Un dispositivo «drive» para agilizar la realización de test se pone en marcha en Baiona

Desde esa semana la capital labortana dispone de un dispositivo nuevo para realizar test de forma numerosa. Instalado en la Casa de las Asociaciones, en la zona de Glaine, el servicio funciona exclusivamente con cita previa y se centra en pacientes a los que el médico ha prescrito la realización de la prueba.

Hasta hoy, de los cerca de 40 de pacientes que han sido testados, sin salir de su vehículo y con estrictos parámetros de seguridad, no ha habido ningún caso positivo.

El servicio de testado «drive» se ha abierto en las inmediaciones del puesto médico avanzado que, al arranque de la crisis sanitaria, se abrió en la Casa de las Asociaciones, de cara a atender a pacientes con síntomas pero en un estado que no exigía, a priori, su ingreso hospitalario. Unas 300 personas han pasado por ese puesto médico gestionado con ayuda de la Cruz Roja.

Hasta la fecha, los tres territorios del norte vasco no se han visto demasiado afectados por la pandemia, no al menos al nivel de otros herrrialdes como Nafarroa o Araba o de zonas hexagonales como Oise o el Gran Este. El último balance oficial cifra en diez las personas fallecidas en el hospital de Baiona (y al menos dos vecinos de Zuberoa fallecieron en el de Pau).

Por otra parte, no hay datos oficiales que permitan saber cuántas de las personas fallecidas en residencias situadas en el Departamento de Pirineos Atlánticos -27 en total, según la Agencia Regional de Salud- murieron en establecimientos situados en Euskal Herria.

Extremar la precaución

Por otro lado, las primeras jornadas del desconfinamiento han transcurrido, según el primer balance hecho público por la Prefectura de Pirineos Atlánticos, con normalidad.

En la nota no se da cuenta de dificultades especiales en esa vuelta progresiva a las actividades cotidianas, principalmente al trabajo y más parcialmente a la escuela, pero se apela a la ciudadanía a «no bajar la guardia» y a respetar las medidas de distanciamiento social.

La Prefectura reitera en ese comunicado que la relativa libertad de movimiento que se ha instaurado en esta primera fase de desconfinamiento –que permite a los habitantes de Zuberoa, Nafarroa Beherea y Lapurdi moverse en un radio de 100 kilómetros en el límite del Departamento de Pirineos Atlánticos– «no lleva a ningún cambio de situación en la frontera».

«Mugak ireki»

Las imágenes que recurrieron las redes, el lunes, de clientela afluyendo en gran número a comprar en las ventas, por ejemplo en Luzaide, han llevado a la Prefectura a anunciar que «está prohibido que la clientela francesa acuda a comprar a esos establecimientos».

«Las autoridades ibéricas nos solicitan que hagamos respetar con firmeza la prohibición de entrada en territorio español», asevera en su nota el prefecto, Eric Spitz.

Luzaidarrek ezin dituzte erosketak egin Luzaideko bentetan, bertara joateko Arnegitik (Baxe Nafarroa) pasa behar direlako. Donibane Garazitik, ordea, arazorik ez bentetara heltzeko. Lotsagarria #koronabirusa pic.twitter.com/txF6Qp8uf5

— Iurre Bidegain (@Iurrebidegain) May 11, 2020

El arranque del desconfinamiento sacaba a relucir una situación kafkiana. Los vecinos de Luzaide, en Nafarroa Garaia, no pueden acudir a comprar a esas tiendas situadas en su municipio, pero sí llegaron a ellas compradores llegados desde el norte de Nafarroa, y en muchos casos procedentes de otros territorios franceses.

Una petición en línea para solicitar que se abran las fronteras entre el norte y el sur de Euskal Herria ha recabado, en solo tres días, más de 1.500 apoyos.