Ignacio Garitano ve «dificilísimo» que los niños y niñas se puedan contagiar en el colegio
El coordinador del Plan de Vigilancia covid-19 de Osakidetza, Ignacio Garitano, ha rechazado que la vuelta a las aulas vaya a dar pie a un aumento de los contagios. «Va a ser dificilísimo que un niño se contagie en el colegio», ha apuntado.
El coordinador del Plan de Vigilancia de Osakidetza, Ignacio Garitano, ha reconocido que en la CAV existe transmisión comunitaria, y ha apuntado que «nos encontramos en una fase ascendente de la pandemia. Los indicadores están empeorando de manera lenta, con un impacto creciente pero moderado».
No obstante, en una entrevista concedida a Radio Euskadi, ha apuntado que «de momento» el porcentaje de positivos es asumible a la hora de hacer rastreos de brotes como los registrados en Gernika y Donostia, ligados a «las no-fiestas, a hacer una vida social como hacíamos en la época previa a la pandemia».
En este sentido, ha señalado que los establecimientos hosteleros son sitios por los que desfila «muchísima gente» y ha insistido en que «tenemos que ser muy serios con el cumplimiento de las medidas que conocemos que son útiles», como son las mascarillas.
«Si nuestra vida social se restringe a tomar una cerveza en una terraza con uno o dos amigos, el peligro es muy bajo, pero si pasamos a hacer unas no-fiestas es gasolina. Desde que ponemos un pie fuera de casa tenemos una las opciones para no contagiarnos y para no contagiar a otras personas», ha indicado.
En cuanto a la vuelta a las aulas, ha rechazado que el inicio de las clases presenciales de pie a un aumento de los casos: «Los niños ahora no están encerrados en sus casas. No partimos de una una situación de confinamiento. Partimos de una situación de vacaciones y vamos a meterlos en los colegios, y es probable que detectemos casos en los colegios. ¿Qué se van a contagiar ahí? Eso va a ser dificilísimo».
«Las medidas van a ser como quien va ahora en un autobús público, en un avión, al cine o al teatro. Son sitios que se han transformado en seguros por la distancia, por el uso de mascarillas y por el gel», ha asegurado.
Comparación con la primera ola
Garitano ha incidido en que la situación actual dista mucho del pico registrado durante la primera ola. «Si hubiésemos tenido las mimas PCR que ahora y la misma manera de diagnosticar habríamos diagnosticado 6.000 personas el día que se produjo el pico, no 700», ha destacado antes de insistir en que la primera curva fue «enrome». «La de ahora es enana y está más tumbada», ha añadido.
«Estamos viendo que para el mismo número de casos ahora casi no hay hospitalizaciones. No tiene nada que ver, es mucho más lenta. Y esto es sin duda por el impacto de los comportamientos individuales, en la mayoría de los casos responsables», ha subrayado, aunque ha recordado que «la tendencia es la que es. Estamos empeorando paulatinamente».