Zupiria huye de polemizar con los sindicatos y comprende la preocupación de los docentes
Evidente cambio de tono en el Gobierno de Lakua. El nuevo portavoz del Ejecutivo, Bingen Zupiria, en su primera rueda de prensa, ha huido deliberada y repetidamente de polemizar con los sindicatos de la Enseñanza, ha reconocido la amplitud del seguimiento de la huelga sin entrar en guerras de cifras, ha dicho comprender la preocupación de los docentes y también de las familias y asegura compartirla.
Varias veces se le ha preguntado al nuevo portavoz del Gobierno, Bingen Zupiria, sobre si, como había dicho el lehendakari, la huelga de la enseñanza de hoy era «injustificada». Y tantas veces como se le ha preguntado ha escapado de ello, asegurando que no quería entrar en polémicas sino en trabajar conjuntamente con la comunidad educativa para garantizar el derecho a la enseñanza del alumnado y que esta sea presencial. En cuanto a las críticas de soberbia que la oposición ha dedicado al Gabinete de Urkullu, Zupiria ha respondido que las críticas son libres y que como portavoz no haría ningún favor si entra en esa rueda.
El cambio de portavocía ha supuesto también, al menos por el momento, un cambio de tono no solo sobre el empleado por su antecesor en el cargo, sino también sobre las últimas declaraciones realizadas tanto por el lehendakari como por el consejero de Educación.
Durante la rueda de prensa que ha seguido al Consejo de Gobierno y cuando se le ha preguntado por la huelga en la Enseñanza, Bingen Zupiria ha dicho que disponían solo de datos de la red pública, y que constaban un paro del 45%, que ha calificado como una «respuesta amplia». Ha dicho no querer entrar tampoco en una guerra de cifras con los convocantes que hablaban de un 65%. Ha asegurado comprender la preocupación de los docentes, los trabajadores de la enseñanza y de la familias, y ha afirmado que «es la misma preocupación del Gobierno».
«Situación muy complicada»
El portavoz ha destacado que la situación es «muy complicada», que «no sabemos cómo acabaremos el curso» y que el «reto» y el objetivo es «garantizar el derecho a la educación» del alumnado y el compromiso de que esta «sea presencial». Lo ha definido como «una maratón».
Sí ha querido dejar constancia de que la CAV era «el único lugar del mundo» en el que se ha convocado una huelga de la enseñanza por este motivo cuando en lugares cercanos la situación es peor, pero tampoco ha abundado después en ello, apuntando que «es un dato y la realidad que nos corresponde gestionar». «No pienso polemizar», ha insistido.
Bingen Zupiria ha aprovechado las preguntas sobre la huelga para recordar que el Gobierno de Lakua destina un 30% de su presupuesto a Educación. Ha añadido que el acuerdo de coalición suscrito por PNV y PSE recoge el refuerzo del prestigio de la función docente, la estabilización del profesorado y la mejora de la tasa de continuidad.