Unai López, el director de orquesta que necesita el Athletic de Garitano
Con Garitano en el banquillo, el Athletic se ha caracterizado por la solvencia defensiva pero le falta dar un paso a nivel ofensivo en cuanto a creación y llegada a la portería rival de los centrocampistas. Unai López, un jugador al que le ha costado seis años asentarse en el primer equipo, tiene las aptitudes y capacidad necesarias como demostró con los dos goles marcados en Ipurua.
Unai López fue el artífice de la primera victoria del Athletic en esta Liga. El jugador de 24 años -cumplirá 25 a finales de octubre- marcó la diferencia en el derbi ante el Eibar con dos goles y se postuló como el director de orquesta que necesita el Athletic de Garitano. El entrenador elogiaba el trabajo del centrocampista y admitía en sala de prensa que al jugar de 8 le piden que, además de participar en la creación, tiene que llegar al área porque «lo puede hacer» y «tiene un buen disparo».
El guipuzcoano fue una de las novedades en el once rojiblanco y respondía con creces en su primera titularidad del curso. En Granada salió en el segundo tiempo al ser uno de los contagiados por coronavirus y no poder entrenar con normalidad durante la pretemporada.
A Unai López le ha costado más de un lustro pasar de promesa a asentarse en el primer equipo, aunque todavía le quedan pasos que dar para convertirse en referencia indiscutible en la medular.
El guipuzcoano recaló en Lezama en edad juvenil proveniente de Zubieta. Su fichaje causó malestar en la Real y Bittor Alkiza, responsable de la cantera txuri-urdin en aquella época, se quejó diciendo que «hay clubes en los que se habla mucho de lo que se tiene en casa pero si pueden pescar en la casa de al lado es lo primero que hacen». Unai López formado en la cantera del Antiguoko estuvo un año en la Real y había sido citado por las categorías inferiores de la selección española.
Desde el Athletic, Fernando Quintanilla ‘Txirri’ -director de Lezama en 2011- argumentó que fue el jugador el que contactó con el club rojiblanco y que también tenía una oferta del Barcelona.
Valverde le dio la oportunidad con apenas 18 años en la temporada 2014/15. El guipuzcoano debutó en la previa de Champions ante el Napoli y llegó a jugar 24 encuentros esa campaña. En la mayoría de partidos actuó en la media punta y no consiguió encontrar su sitio.
A Unai López le ha costado hacerse un hueco en el primer equipo del Athletic. Tras su debut, jugó con el Bilbao Athletic en Segunda al año siguiente y después tuvo que salir cedido al Leganés en Primera y al Rayo Vallecano en Segunda. Con los madrileños completó una excelente temporada logrando el ascenso y en la siguiente pretemporada con Berizzo parecía que había llegado su hora.
Sin embargo, los malos resultados trajeron la destitución del argentino y Garitano apostó por la veteranía para salir a flote.
Al igual que ocurrió con el portero Unai Simón, en la temporada siguiente arrancó de titular. El técnico de Derio descartó su salida el año anterior y optó por trabajar con él en Lezama en labores defensivas.
Al final consiguió entrar con asiduidad en las alineaciones, pero fue una campaña con altibajos. Su salida del equipo coincidió con la racha negativa en Liga con diez partidos sin ganar al coincidir con las eliminatorias de Copa.
Antes del parón por el coronavirus regresó con un golazo de falta en Valladolid y en el atípico final de campaña fue uno de los titulares habituales. Al Athletic le faltó dar un paso al frente en el apartado ofensivo y fue una de las razones por las que se quedó sin entrar en Europa. A la ausencia goleadora de Aduriz se le sumó la escasa aportación en ataque de los centrocampistas, que en pocas ocasiones se atreven a pisar el área.
Tras perder en Granada, Garitano achacó a la falta de pegada arriba del Athletic como diferencia entre los dos equipos, aunque los tantos de los andaluces los marcaron centrocampistas como Herrera y el debutante Luis Milla.
En los últimos años con el declive de Beñat y San José, al igual que ocurrió con Iturraspe y Mikel Rico, el Athletic ha acuciado problemas a la hora de crear juego y, sobre todo, en la incorporación de jugadores de la segunda línea. Esa carencia fue solventada la temporada anterior con los goles de los laterales Yuri y Capa.
Sin embargo, el equipo necesita que sean más los jugadores que llegan a posiciones de remate. Sobre todo, si cuentan con el toque y la calidad de Unai López, que dejó su sello en Ipurua y sale fortalecido del choque.