Otegi denuncia que la estrategia de convivir con el covid no ha mejorado la salud ni la economía
El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, ha asegurado que la estrategia de «convivir» con el virus «no ha mejorado» ni la salud pública «en términos colectivos» ni la economía.
Otegi hace esta reflexión en una nota publicada en su blog, en el que opina que los dos parámetros que se pretendían «salvar» con esta estrategia «han salido dañados».
Por el contrario, mantiene que la propuesta de «confinamiento duro», que su coalición defendió al inicio de la pandemia, «doblegó la curva» y asegura que «la acelerada salida del mismo», con la que «sólo se buscaba proteger los intereses económicos de una minoría» conduce ahora otra vez a una nueva situación «de posible confinamiento».
«Lo dijimos al inicio de la pandemia: hay algo peor que un confinamiento y es un segundo confinamiento. El Estado francés ha decretado el confinamiento duro pero limitado. Alemania cierra bares y restaurantes… ¿Qué nos hace pensar que aquí el escenario será distinto?», se pregunta Otegi.
«Hoy -añade- los países que apostaron por el confinamiento estricto y la desescalada prudente tienen una situación económica y sanitaria infinitamente mejor que la nuestra, mientras a nosotros se nos aboca a un escenario de restricciones no sólo con respecto a nuestra movilidad sino en cuanto a nuestros derechos sociales y económicos».
En su opinión, los «gobernantes» de Hego Euskal Herria «han propiciado una estrategia a todas luces fracasada de convivencia con el virus que tenía por único objetivo el no colapso» de unos sistemas sanitarios que «han sido debilitados durante décadas por las políticas de recorte que ellos mismos han propiciado».
«La gente debe saber que esta batalla no será corta: basta de especular con vacunas milagrosas y recetas mágicas que nos salvarán en el corto plazo de seguir sufriendo restricciones y pérdida de derechos», recalca el dirigente abertzale.
«No se tratar de alarmar. Se trata de volver a exigir un plan y una estrategia que nos dé certezas: mantener y sostener a los sectores golpeados económicamente, fortalecer nuestra sanidad pública, y nuestra educación, aumentar exponencialmente el número de rastreadores, aplicar las medidas que sean necesarias para frenar el virus y su expansión», insiste.
«La convocatoria a luchar contra el virus y sus consecuencias -agrega- debe de reunir a empresarios, sindicatos, partidos, mujeres, jóvenes, instituciones, universidades… ¡Un pueblo para derrotar al virus!», concluye.