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Podemos Ahal Dugu pide a Urkullu diálogo para acordar un confinamiento «rediseñado»

La coordinadora general de Podemos Ahal Dugu, Pilar Garrido, ha afirmado que, en estos momentos «muy preocupantes» por la expansión del covid-19 en la CAV, es necesario poner sobre la mesa «medidas restrictivas», pero también «diálogo entre partidos» para rediseñar un posible nuevo confinamiento domiciliario, que va a ser «mucho más complejo» que en la primera ola, y «un escudo social vasco» con medidas para ayudar a los sectores más perjudicados.

Pilar Garrido, coordinadora general de Podemos Ahal Dugu, en una imagen de archivo. (Gorka RUBIO/FOKU)

En rueda de prensa en Donostia, Garrido, acompañada de la responsable de sociedad civil y movimiento popular de Podemos Ahal Dugu, Maite Gartzia, ha urgido adoptar «medidas adecuadas y eficaces» para hacer frente a la pandemia y ha apuntado que en otros lugares como Gran Bretaña, Estado francés o Portugal ya lo están haciendo, porque «es esencial actuar a tiempo».

«Llevamos 15 días esperando a que se tomen decisiones importantes que sean certezas seguras para que los ciudadanos sepan a qué atenerse y se pueda hacer frente lo antes posible a esta pandemia», ha subrayado, para lamentar, a continuación, que ya se va «tarde». «Hay que tomar las medidas adecuadas, pertinentes y tienen que llegar a tiempo», ha incidido.

Además, ha destacado que esta situación se va a prolongar en el tiempo, por ello, se requiere de medidas a «largo plazo» para poder salir de esta situación. A su juicio, se debe «diseñar» cómo se va a abordar un posible confinamiento, porque «no se trata de hacer lo mismo que en la primera ola, sino de adecuar el confinamiento a las circunstancias».

Diálogo y «escudo social vasco»

Garrido ha defendido que para adoptar esas medidas que den «salida a una situación muy preocupante tiene que existir un diálogo político». En este sentido, ha recordado que su formación viene reclamando al lehendakari, Iñigo Urkullu, que cree «un foro, una figura para que las fuerzas políticas rediseñen las medidas que van a sustentar ese posible confinamiento», porque «las medidas acordadas van a ser más eficaces».

Asimismo, ha opinado que también es necesario poner en marcha «un escudo social vasco», porque las restricciones «tienen que ir acompañadas de medidas que ayuden a sostener a los sectores cada vez más perjudicados».

«El Gobierno Vasco y el lehendakari tienen que hacer caso a la comunidad educativa y tomar medidas para que servicios esenciales estén en disposición de ofrecer su actividad con calidad y condiciones laborales adecuadas», ha incidido.

En este contexto, ha abogado por hablar de «teletrabajo, de transporte seguro, de flexibilidad en horarios, de que quienes no puedan teletrabajar tienen que ir a trabajar seguras, tanto en el transporte como en la empresa».

«Hay que tomar medidas para que los trabajadores vayan a trabajar seguros, medidas de conciliación, las familias van a tener muchas dificultades, apoyo concreto con medidas concretas y recursos públicos a servicios y actividades empresariales que se vayan a ver afectadas por las restricciones y el posible confinamiento, como la hostelería», ha añadido.

«Caldo de cultivo»

Garrido ha aludido también a los «disturbios» que se han registrado en los últimos días en diferentes lugares tanto de Euskal Herria como del Estado español y ha asegurado que «detrás está la extrema derecha que ha creado un caldo de cultivo».

Para Garrido, «todas las críticas y reivindicaciones son legítimas y tienen cabida pero otra cosa diferente son los disturbios que se están dando en ciudades vascas» y detrás de los cuales ha asegurado «está la extrema derecha» que ha ido creando «un caldo de cultivo» al que también «ayudó la moción de censura» contra el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, para así «avivar la tensión y la conflictividad social con el objetivo de que el gobierno de coalición» de PSOE y Unidas Podemos «no pueda seguir haciendo las cosas que está haciendo y girando el timón hacia la conformación de un nuevo modelo social en el que no solo las élites se beneficien, sino que las minorías también».

«La mejor manera de hacer frente a esos grupos minoritarios es que el Gobierno Vasco ponga medidas eficaces que den seguridad y certeza a los ciudadanos sobre la mesa», ha finalizado.