Torres: «No hay nada más bonito para un navarro que vestirse de Osasuna»
Roberto Torres va camino de convertirse en un «one man club» tras su compromiso hasta 2023 con Osasuna, una camiseta que viste con «orgullo», más todavía ahora que se encuentra en su «mejor momento deportivo y vital».
«No hay nada más bonito para un navarro que vestirse cada fin de semana de Osasuna. Soy un privilegiado por hacer lo que quiero y donde quiero, por eso agradezco mucho esta renovación en un momento importante y feliz en mi vida y en mi carrera deportiva», ha reconocido Roberto Torres en el acto público de la prórroga de su contrato hasta 2023.
El centrocampista de Arre ha resaltado que «siempre me he sentido importante en este club» y que espera dar «todavía más» a partir de ahora. «Como decía un entrenador que tuvimos, no hay que quedarse con los recortes de periódico, debo reinventarme y mejorar, no vale solo con lo que hecho hasta ahora», se ha puesto como meta.
El talentoso futbolista rojillo ha señalado que ahora mismo se encuentra «bien físicamente» a sus 31 años, «mejor que cuando tenía 21, de verdad», y que su idea es seguir vistiendo la elástica rojilla más allá de 2023. Incluso ser un «one man club», algo que «por desgracia, no se ve tanto hoy día. De corazón, mi único reto ha sido siempre vestir esta camiseta hasta que me retire», ha confesado.
La ampliación de su compromiso «significa que estoy haciendo muchas cosas bien», porque «solo por el hecho de ser de caso el club no te tiene que regalar nada, hay que ganárselo sobre el césped», ha querido dejar claro.
También el que sea una pieza esencial en el vestuario transmitiendo los valores de Osasuna en el día a día –«trato de dar ejemplo en cada entrenamiento, me encanta bajar a Tajonar»– y que esté ubicado en los puestos cabeceros de la estadística histórica rojilla, porque «los números son importantes y me gustaría retirarme estando en las posiciones más altas», ha resaltado.
La renovación se ha adornado con un mural de su figura que el artista LKN ha proyectado en una de las paredes de El Sadar, trabajo que ha sido recogido en un pequeño video, que ha sido «impresionante y quiero felicitarle porque sé que a él también le ha hecho ilusión».
Ha admitido, por contra, que ahora mismo no es el Torres de pasadas campañas por culpa de su última lesión. «Me he pegado un mes metido en el gimnasio, sin estar en el campo de entrenamiento y todavía no estoy al nivel de mis compañerso. La lesión me dio más lata de la que esperaba y ahora debo coger el ritmo».
El canterano fue precisamente protagonista en el encuentro de la anterior campaña contra el rival al que Osasuna se medirá este domingo, el Barcelona. Él fue el autor de un 1-2 sorprendente, al conseguirse, además, en inferioridad numérica. «Somos humildes y sabemos lo que hacemos bien y en qué nos equivocamos. Si jugamos bien, somos difíciles de batir y por qué no vamos a pensar en repetir lo del año pasado», ha indicado.
Ha comentado que la especial situación que vivimos iguala las abismales diferencias que hay entre unos y otros equipos. «Todos estamos afectados por ello, ha habido menos descanso entre ambas temporadas y el calendario es muy apretado, lo que lleva todo al límite y hay que cuidar al máximo cada detalle: entrenamiento, descanso y alimentación».
En todo caso, no se queja por este trote deportivo. «Se me caería la cara de vergüenza si lo hiciera. En las actuales circunstancias hay mucha gente que no tiene trabajo y nosotros hacemos lo que nos gusta, somos unos privilegiados», ha reconocido.
David García y Adrián, bajas
El técnico rojillo, Jagoba Arrasate, tendrá que hacer frente a un contratiempo inesperado, ya que David García no podrá jugar en el Camp Nou. El central de Ibero se encuentra confinado en su domicilio tras ser contactado por Salud Pública, ya que mantuvo contacto directo con un positivo por Covid-19.
Ello le impedirá estar en la expedición osasunista, pese a haber dado negativo en los últimos test PCR y de antígenos que se le han realizado, debido a que debe cumplir con el protocolo sanitario. Un problema añadido para el preparador de Berriatua que había ensayado entre semana con la posibilidad de saltar de inicio al estadio blaugrana con tres centrales. Ahora mismo, solo le quedan disponibles ese número de futbolistas específicos para dicha posición: Roncaglia, Unai García y Raúl Navas.
Por otro lado, tampoco podrá contar con Adrián. Tras las pruebas médicas a las que ha sido sometido el delantero asturiano, presenta una lesión muscular de grado I-II en el sóleo de su pierna derecha, lo que le mantendrá varias semanas alejado de los terrenos de juego.
Además, Lucas Torró y Aridane siguen trabajando de forma parcial con el grupo, mientras que Calleri, Juan Pérez y Chimy Ávila continúan con sus respectivos procesos de recuperación.