París y Madrid modulan a conveniencia la libre circulación de personas en Euskal Herria
La Prefectura de Pau, en coordinación con los delegados del Gobierno español en Nafarroa y la CAV, cerrará desde el 14 de enero ocho pasos. En 2020 sellaron la muga por la pandemia, ahora por «la lucha anti terrorista». París y Madrid modulan a conveniencia la circulación entre territorios vascos.
Por medio de un comunicado emitido a última hora de la tarde del 12 de enero, la Prefectura de Pirineos Atlánticos concretó cómo se aplicará la nueva restricción en cuanto a libre circulación de personas se refiere, dando así una aplicación práctica a la vocación expresada por el presidente francés, Emmanuel Macron, en noviembre de 2020, de reformular el Tratado de Schengen.
Lo hizo durante una visita a la muga entre el norte y sur de Catalunya, donde, como en Euskal Herria, se cerrarán ahora también varios pasos de muga.
La Prefectura de Pirineos Atlánticos evoca en su nota que la medida pretende «facilitar la lucha contra el terrorismo», un objetivo que ya llevó a la reposición de los controles en la muga a finales de 2020, donde rigen desde noviembre controles permanentes.
Defiende la institución que preside Eric Spitz que esa decisión de cerrar ocho pasos de muga se ha tomado en coordinación con los delegados del Gobierno español en Iruñea y Gasteiz.
En aplicación del principio de colaboración mutua, las delegaciones estatales con sede en Pau, Gasteiz e Iruñea comparten la decisión de aplicar un nuevo by-pass en la muga vasca.
Pasos cerrados, pasos abiertos
Como consecuencia de esa decisión entre delegados estatales de limitar la libre circulación interna en Euskal Herria, se cerrarán mañana dos pasos de Hendaia (el transporte con embarcación entre Hendaia y Hondarribia y el puente para el paso de mercancías, situado junto a la estación de la SNCF) y también los pasos de Lizuniaga (RD406) Lizarrieta, Sara (por Venta Berrouet), Izpegi, Aldude y Larraine.
La Prefectura llama a las personas que transitan habitualmente a ambos lados de la muga a utilizar como alternativas, tanto para el paso de peatones como para el paso de vehículos, los pasos de Hendaia-Irun (Santiago), Hendaia-Irun (Behobia), Irun-Biriatu (A63), Ibardin, Dantxaria y Arnegi.
El precedente más cercano de la decisión anunciada ayer es el cierre de pasos de muga, la pasada primavera.
En aquel entonces, la pandemia, con medidas de confinamiento a ambos lados del Bidasoa, fue el motivo de la decisión impuesta por las autoridades de París y Madrid.
Primero se restablecieron los controles de frontera, a partir del 16 de marzo, con fuerte restricción al paso de personas, y en abril, para más señas la víspera de Aberri Eguna, las autoridades galas dieron un paso más con la clausura completa de doce pasos, de ellos diez en tierras vascas.
En el comunicado, la dirección departamental con sede en Pau estima que este nuevo cierre, que entrará en vigor este, jueves 14 de enero, y se aplicará por tiempo indeterminado, debería tener un impacto más limitado «en movilidad y actividad socioeconómica».
Parco consuelo para un vecino de Etxalar y que, en ver de pasar por el alto de Lizarrieta, deberá desplazarse a partir de mañana como cerca hasta Bera para pasar por Ibardin a Urruña y desde allí, seguir quemando kilómetros, para llegar por fin a Sara.
También los baigorriarras deberán renunciar al paso más cercano para conectar con Baztan, por el puerto de Izpegi, y optar por otros pasos, como Aldude.
El hecho de que en esas zonas vivan menos vecinos, hará, eso sí más fácil a la Prefectura gestionar la medida evitando los litigios con las instituciones del sur de la muga por las kilométricas colas que provocan sus decisiones sobre el flujo de frontera en pasos tan concurridos como los de Irun-Hendaia.
No habrá cierres en Huesca, sí en Catalunya
Además de los pasos vascos, la Prefectura da cuenta del cierre de un paso en Biarno (San Martingo Harria). Por el contrario, destaca que seguirán funcionando dos pasos en el pirineo oscense (Somport y Portalet).
Sin embargo, una medida de cierre similar a la que regirá en Euskal Herria, auque justificada en el caso de la Prefectura de Pirineos Orientales por «la lucha contra la inmigración ilegal», afectará a la circulación norte-sur en Catalunya.
Según destacan medios catalanes a partir del próximo lunes, 18 de enero, y como en Euskal Herria, «hasta nueva orden», quedará prohibido cruzar entre el norte y sur catalán por Banyuls, Coustouges, Manrell-Las Illas, camino de Aja –entre Palau de Cerdanya i Puigcerdà- y Vignole Entveig.