Férreo apoyo de Urkullu a Sagardui ante las peticiones de cese de toda la oposición

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha mostrado su total apoyo a la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, de la que ha asegurado que ha dicho toda la verdad sobre las vacunaciones irregulares. El conjunto de grupos de la oposición ha pedido su cese por mentir.

Todos los grupos de la oposición han pedido al lehendakari, durante la sesión de control al Gobierno del Parlamento, el cese de la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, por las irregularidades en las vacunaciones y por mentir a la Cámara. Sin embargo, Iñigo Urkullu ha mostrado su apoyo personal y el de todo el Ejecutivo a la consejera, ha dejado claro que ni va a dimitir ni le va a cesar, porque ha asegurado que actuó con rapidez al conocer los hechos de Basurto y Santa Marina y que dijo toda la verdad en sus comparecencias. Todos los consejeros y consejeras han estado presentes en el Parlamento, lo que no suele ser habitual.

Además, durante la sesión, ha anunciado que la consejera Sagardui ha elevado una consulta a la Comisión de Ética Pública informando sobre los hechos y las decisiones adoptadas. Como se recordará, el pasado 19 de enero trascendió que el gerente del Hospital de Basurto, Eduardo Maiz, se había vacunado días antes de manera irregular y con nocturnidad, al tiempo que también se conocía que el gerente del Hospital Santa Marina. José Luis Sabas, se había vacunado también, cuando no le correspondía, junto a toda la plantilla del centro, lo que tampoco podía hacerse.

Frente a las acusaciones de toda la oposición de que la consejera mintió al Parlamento, Urkullu ha defendido que Gotzone Sagardui compareció con inmediatez el 20 de enero y pidió una nueva comparecencia para siete días después, y que en ambas ocasiones dijo toda la verdad. Es más cierto que el día 20 la consejera participó en una comisión de Salud que ya estaba prevista, que apenas dedicó un párrafo a informar de que se había producido un cese y una dimisión, sin nombres ni reproches, y se levantó de la mesa sin dar las explicaciones que los grupos le habían pedido.

En cuanto a la comparecencia del 27, desde el inicio de la misma el parlamentario del PSE Ekain Rico y el jeltzale Luis Javier Telleria dejaron claro que la comparecencia era a petición de ambos grupos, como las de todos los miércoles, y que además habían pedido un cambio de formato para ampliar las posibilidades de intervención de la oposición. Aquel día, la consejera dijo que con anterioridad al 19 de enero no había sabido nada de que en Santa Marina iba a vacunarse toda la plantilla y que fue al ver el número de vacunas que se estaban dando cuando cayeron en lo que ocurría y empezaron a actuar.

Mensajes de whatsapp

Sin embargo, al día siguiente de la comparecencia, se conoció públicamente el intercambió de mensajes de whatsapp del director-gerente de Santa Marina, José Luis Sabas, con la consejera de Salud y con la directora de Osakidetza. Y en esos mensajes se ve que el 15 de enero, Sabas le dice a Sagardui que «el punto fuerte» de la actuación era «que se va a hacer a la totalidad del personal en una jornada». Después, NAIZ desveló que durante la comparecencia ante la comisión, la consejera de Salud había leído públicamente estos mensajes pero saltándose, precisamente, este aviso del gerente.

Tras conocer estos mensajes, todos los grupos de la oposición exigieron la dimisión de la consejera y su cese inmediato, por lo que consideraban haber mentido al Parlamento. Y esa demanda ha llegado este viernes al pleno de control del Gobierno. Rebeka Ubera, de EH Bildu, Miren Gorrotxategi, de Elkarrekin Podemos-IU, Carlos Iturgaiz, de PP-Cs y Amaia Martínez, de Vox, han exigido al lehendakari que tome medidas.

El lehendakari, vehemente

El lehendakari ha defendido con vehemencia a la consejera, ha asegurado que ni va a dimitir, ni le va a cesar, y ha insistido que se han producido únicamente dos irregulares graves entre más de 50.000 vacunaciones, contra las que ya se ha actuado con rapidez «y transparencia». También ha defendido la labor de todos los trabajadores de Osakidetza, pero también la de los cargos públicos del sistema de salud.

EH Bildu ha asegurado que «merecemos un Gobierno honesto y honrado que no nos mienta». Elkarrekin-Podemos-IU, ha criticado que el Gobierno y el PNV hayan creado «cortinas de humo», poniendo como ejemplo que «llevamos una semana hablando de incidentes callejeros». El PP-Cs ha acusado al lehendakari de «negacionista» por no querer ver el «desastre» de las vacunaciones que están denunciando algunos profesionales de Osakidetza.