El Estado español, el único socio de la eurozona que destruyó empleo en febrero
Los pésimos datos del paro difundidos el martes por el Gobierno español no han pasado desapercibidos en las instituciones comunitarias, ya que ha sido la única economía de la zona del euro que sigue destruyendo empleo pese a mantener activas herramientas como los ERTE de fuerza mayor.
La actividad del sector privado de la eurozona se deterioró en febrero por cuarto mes consecutivo, aunque a menor ritmo que en los anteriores, según el índice compuesto de gerentes de compras (PMI).
Este índice ha pasado a 48,8 puntos desde los 47,8 de enero, lastrado por la contracción del sector servicios, lo que sugiere que la economía del bloque podría enfrentarse a una doble recesión, según comenta IHS Markit, que señala al Estado español como única economía analizada que seguía destruyendo empleo.
Hacia una segunda recesión
El PMI del sector servicios se situó en febrero en 45,7 puntos, frente a los 45,4 de enero, por debajo del umbral de 50 puntos que separa la contracción de la expansión, mientras que el dato manufacturero subió a 57,9 enteros desde los 54,8 del mes anterior.
«Puesto que la actividad total ha registrado una contracción por cuarto mes consecutivo, la economía de la zona euro está en camino de señalar una recesión de doble caída», ha indicado Chris Williamson, economista jefe de IHS Markit, señalando que la ralentización en el ritmo de declive subraya que la última desaceleración parece ser «mucho menos severa que la de la fase inicial de la pandemia del año pasado».
Con respecto al empleo, hubo algunas noticias positivas, ya que se registró un aumento neto por primera vez en doce meses y este incremento fue generalizado en toda la región, a excepción del Estado español, donde volvió a destruirse empleo.
Según los datos publicados el martes por el Gobierno español, en el conjunto de Hego Euskal Herria el desempleo se redujo en 441 personas respecto al mes de enero.
Por contra, el Estado francés experimentó el incremento más fuerte de la dotación de personal.
«Cada vez está más claro que será necesario implementar muchas medidas para combatir el virus durante algún tiempo, en parte debido a la lentitud en las campañas de vacunación. Esto podría extender el lastre económico por la pandemia hasta la segunda mitad del año y moderar el ritmo de recuperación», ha advertido Williamson.