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NA+ se niega a corregir su censura a Pirritx, Porrotx y Marimotots y la «brecha orgásmica»

El Ayuntamiento de Iruñea ha trasladado hoy que no programará de nuevo la actuación de los payasos Pirritx, Porrotx y Marimotots, así como la charla sobre la «brecha orgásmica» que censuró de forma ilegal, tal y como ha resuelto el Tribunal Administrativo de Navarra.

Paola Damonti, la ponente censurada por los tabús del alcalde. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)

Los partidos de la oposición, incluido el PSN con el que el alcalde Enrique Maya ha alcanzado un acuerdo presupuestario, han exigido al alcalde que programara de nuevo los dos eventos que censuró según el TAN. El equipo de gobierno se niega a volver a concertar ambas actuaciones.

La actuación de los payasos euskaldunes estaba programada con motivo de la celebración del Día del Euskara en 2019, el 29 de noviembre. No obstante, como Maya había recuperado el bastón de mando en verano, decidió anular la actuación (que no sufragaba el Ayuntamiento, sino que tan solo facilitaba el lugar) sin explicar los motivos. La suspensión del acto fue ilegal. En respuesta a este acto de censura, los payasos celebraron otra actuación en Iruñea que acabó llenando el Anaitasuna.

La charla sobre la «brecha orgásmica» era un acto programado por las técnicas de Igualdad para la Casa de las Mujeres. El titular de la conferencia de la experta en género Paola Damonti escandalizó a Vox, que denunció la convocatoria de la charla en Twitter, provocando al poco que el Ayuntamiento la eliminara. Una de las mujeres que iba a asistir denunció los hechos ante el TAN, quedando probado de nuevo como un acto de censura de la concejala de cultura, María García-Barberena. Na+, sin embargo, se niega a volver a progrmar el acto porque cree que el tema no va acorde con la institución. 

En la sesión de hoy en el Ayuntamiento, la portavoz de EH Bildu, Maider Beloki, ha criticado la euskarafobia del Ayuntamiento con una nariz de payaso en la mano, a la par que se ha preguntado «¿cuántos orgasmos han dejado de existir por esa supremacía masculina?». Beloki les ha acusado de practicar un apartheid cultural.