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El joven rescatado el martes en la sierra de Aralar sufrió un accidente laboral

El Consejo de la Juventud de Euskadi (EGK) ha denunciado que el rescate en helicóptero de una persona con una fractura en una pierna, el pasado martes, día 20, en una zona de la Sierra de Aralar, en la localidad guipuzcoana de Amezketa, fue motivado por un accidente laboral.

Imagen del herido en el momento de ser trasladado del helicóptero a una ambulancia. (ERTZAINTZA)

La plataforma de asociaciones juveniles EGK ha denunciado este jueves lo ocurrido en un comunicado en el que critica que «una vez más haya que lamentar un grave accidente laboral en el que se ve gravemente afectada una persona joven».

El accidente ocurrió este martes, sobre las 13.00 horas en las inmediaciones de la sierra de Aralar, donde, según informó entonces el Departamento de Seguridad de Lakua, efectivos de la Ertzaintza rescataron en helicóptero a un herido y lo trasladaron al campo de fútbol de Zumarraga, desde donde fue evacuado en ambulancia al hospital de esa localidad.

EGK ha informado de que se trataba de un joven empleado que sufrió «una fractura en una pierna tras clavarse uno de los postes con los que estaba trabajando».

En opinión del Consejo de la Juventud, «la precariedad y las malas condiciones laborales son una causa directa de los accidentes de trabajo, de las enfermedades laborales y del deterioro de la salud de la juventud».

«La precaria situación laboral de la gente joven –subraya el organismo–, lejos de mejorar, está empeorando considerablemente, lo que perjudica su salud física y mental, y aumenta sus posibilidades de sufrir accidentes de trabajo y enfermedades».

A su juicio, esta situación de «inestabilidad y vulnerabilidad se ve recrudecida por la menor cobertura por desempleo y mayores dificultades de acceso a prestaciones» como la RGI que padecen los jóvenes.

EGK exige a las instituciones que hagan cumplir «la reglamentación en materia de seguridad laboral y fomente las inspecciones de trabajo», especialmente sobre «fórmulas excepcionales de contratación», para prácticas o becas, e implanten «mecanismos de control» para equilibrar «la cualificación demandada para un puesto y la necesaria para desarrollarlo».