47 migrantes muertos por inanición al quedar a la deriva sin llegar a Canarias
El drama de la migración revela este martes de nuevo toda su dureza con el testimonio de los siete supervivientes de una barca que había salido hacia Canarias. El motor se averió y quedaron a la deriva, por lo que hasta 47 personas han ido falleciendo por inanición.
Los guardacostas mauritanos rescataron el lunes a siete emigrantes subsaharianos de una patera con destino las Islas Canarias que partió hace dos semanas de la localidad marroquí de Tintane y en la que viajaban unas 40 personas más. Murieron en la embarcación al quedarse sin comida ni agua, según ha explicado los supervivientes este martes.
Según informó a Efe una fuente de seguridad de la localidad costera de Nuadibú, donde se encontró la patera con los supervivientes, los fallecidos formarían parte de un grupo de más de 50 emigrantes, mayoritariamente senegaleses y malienses, que salieron el pasado 1 de agosto de Marruecos con la intención de alcanzar las islas.
Los supervivientes explicaron a las autoridades mauritanas que, una vez en el mar, el motor de la embarcación se paró y la patera se quedó a merced de las olas.
Con el paso del tiempo, las provisiones de alimentos y el agua potable que llevaban a bordo comenzaron a acabarse, lo que provocó la muerte progresiva de los pasajeros, entre los que había mujeres y niños, relataron las personas que han conseguido sobrevivir. Apuntan que no fallecieron ahogadas, sino por inanición.
Estas siete personas se salvaron tras saltar a tierra cuando finalmente la patera llegó, llevada por las olas, a las costas mauritanas.
Los supervivientes fueron atendidos por miembros de la guardia costera mauritana y llevados a la policía de Nuadibú, que tramitará su expulsión a sus países de origen cuando se hayan investigado las circunstancias del suceso.