20 años de magia con Harry Potter

El actor Daniel Radcliffe tiene ya 32 años, aproximadamente los mismos que muchos espectadores de la primera película de Harry Potter, una saga que vendía ser para niños y que ha traspasado generaciones. J.K. Rowling no contaba con semejante éxito cuando 12 editoriales rechazaron su primera novela.

Jamás una saga de novelas infantiles tuvo tanto éxito como Harry Potter. El niño mago iluminó la imaginación de niñas y niños de todo el mundo, y rápidamente se convirtió en un fenómeno que ya lleva varias décadas siendo la gallina de los huevos de oro.

Era 1990 cuando su autora J.K. Rowling empezó a escribir la trama del niño con gafas y una cicatriz en forma de rayo en la frente sobre una servilleta mientras tomaba un café en la cafetería Elephant House (Edimburgo), según cuenta la leyenda popular. Le costó cerca de seis años acabar de escribir el primer tomo.

La novela fue rechazada por varias editoriales, 12 concretamente, hasta que la británica Bloomsburry se decidió a publicarla el 26 de junio de 1997. Un año más tarde llegaría a Estados Unidos. Tal fue el éxito que tuvo la historia que Rowling vendió los derechos en 1999 de sus cuatro primeros libros, marcando así a toda una generación.

En 2001 fue llevada al cine la primera entrega, ‘Harry Potter y la piedra filosofal’. Han pasado dos décadas y los niños que año tras año esperaban con emoción su carta de invitación al Colegio de Magia y Hechicería Hogwarts, hoy empiezan a peinar canas.

Sin embargo, Harry Potter ha envejecido bien y ha sabido seguir en la palestra, no solo manteniendo la conexión emocional con sus fieles seguidores, sino sumando nuevos materiales, la nueva saga ambientada en el universo Harry Potter ‘Animales fantásticos’ o la secuela en forma de obra de teatro ‘El legado maldito’, que hacen que el «Mundo Mágico» sea cada vez más amplio. Incluso los «muggles» (gente no mágica) han oído hablar de Harry Potter, aunque no hayan leído los libros o visto ninguna película.

‘Harry Potter y la piedra filosofal’ nos presenta a Harry, un niño huérfano que vive en el hueco bajo la escalera de la casa con sus tíos y su primo, unos familiares que no parecen tenerle demasiado aprecio. Su triste existencia da un vuelco cuando recibe una carta para estudiar en Hogwarts, pues aunque él no ha sabido nada hasta ese momento, es un mago, al igual que sus difuntos padres que dieron la vida por él ante un ataque de Voldemort, salvándole así la vida y conteniendo al villano… al menos por unos años.

El tesoro de los pequeños lectores da el salto al cine

Chris Columbus (director de ‘Solo en casa’) fue quien rodó las primeras dos entregas cinematográficas tras aceptar el encargo por insistencia de su hija, fan de los libros. También fue su responsabilidad elegir al elenco de entre miles de niños, a quienes convirtió en estrellas mundiales. Así, Daniel Radcliffe se quedó con el papel del protagonista, y Emma Watson y Rupert Grint encarnaron a sus mejores amigos, Hermione Granger y Ron Weasley. Tom Felton interpretó al archienemigo del grupo, Draco Malfoy.

Una de las exigencias de Rowling para la elección de los actores era que todos ellos debían ser británicos. Por ello, el primer candidato a Harry, Joel Osment (conocido por su papel en ‘El sexto sentido’) fue descartado. La elección de Radcliffe fue una sorpresa para él, que venía de interpretar a David Copperfield en una película para televisión.

La escritora estuvo presente en cada momento de la adaptación de su obra al cine, y fue ella quien eligió a Alan Rickman para que interpretara al profesor Severus Snape (a quien los seguidores despidieron alzando sus varitas en señal de respeto cuando falleció en 2016), y a Robbie Coltrane para que haría del grandullón Rubeus Hagrid. Para el director de la escuela, Albus Dumbledore, eligieron a Richard Harris, pero el actor falleció en 2002 y Michael Gambon tomó el relevo a partir de la tercera película.

Todo un Mundo Mágico

A las afueras de Londres hay un parque dedicado al Mundo Mágico donde es posible beber cerveza de mantequilla, visitar el Callejón Diagón o simular que cruzamos al anden 9 3/4 (este andén también está en la verdadera estación de King's Cross, una de las localizaciones de las películas).

Existe una página web que engloba a todo el Mundo Mágico llamada Wizarding World –antes Pottermore– donde los «Potterheads» (fans de la saga) pueden seguir indagando en la historia. Ahí es donde la propia Rowling publica textos que desarrollan ciertas tramas de los libros no explicadas anteriormente o donde se anuncian eventos especiales.

El año pasado, por ejemplo, durante el confinamiento, se llevó a cabo una iniciativa llamada ‘Harry Potter at home’ (Harry Potter en casa) mediante la cual invitaban a las familias a quedarse en casa a la vez que lanzaban materiales didácticos. Entre las actividades organizadas, se invitó a personalidades a que leyeran un capítulo cada uno de ‘Harry Potter y la piedra filosofal’. En semejante trabajo en equipo participaron enviando vídeos desde sus casas el propio Daniel Radcliffe, el protagonista de ‘Animales fantásticos’ Eddie Redmayne, su compañera de reparto Claudia Kim, Noma Dumezweni quien interpreta a Hermione en la obra teatral, y también otros famosos ajenos a la saga como Dakota Fanning o David Beckham.

Además de los libros originales y las películas, el Mundo Mágico cuenta con innumerables productos asociados, empezando por tres libros extra escritos a petición de los seguidores, mencionados en los libros de Harry Potter e incluso usados a modo de libros de texto por los alumnos de Hogwarts.

El primero ellos es ‘Animales fantásticos y donde encontrarlos’, un bestiario firmado ficticiamente por Newt Scamander y que luego dio pie a la nueva saga de películas. El segundo, ‘Quidditch a través de los tiempos’, explica los pormenores del deporte rey en el Mundo Mágico, el cual ya cuenta con numerosos equipos y ligas en la vida real, incluso en Euskal Herria. El tercero fue ‘Los cuentos de Beedle el Bardo’, libro de relatos cortos firmado por Beedle en el que se alude a las reliquias de la muerte, un trío de objetos importantes en la trama de Harry Potter. Los beneficios obtenidos por la venta de estos tres libros fueron para una organización que lucha por erradicar el hambre infantil.

Hechizos hasta en el felpudo de casa

En torno a los libros y las películas se ha creado todo un imaginario que es carne de cañón para el merchandising. Así, se venden las varitas de cada personaje, peluches de los animales fantásticos que aparecen en la nueva saga, joyería que imita objetos mágicos usados por los protagonistas, sudaderas con el contorno del castillo de Hogwarts o el símbolo de las reliquias de la muerte, felpudos que te dan la bienvenida a casa con el hechizo «Alohomora» (que abre las cerraduras) o fundas para el móvil con la palabra «Always» (siempre) que recuerda un momento mítico de la saga.

Además, existen videojuegos para distintas plataformas, uno de ellos al estilo del exitoso Pokemon Go con realidad aumentada para teléfonos móviles en los que el usuario debe ir avanzando en la historia recogiendo partes de hechizos mientras camina –de verdad– por su barrio acompañado de la banda sonora original.

La obsesión por el Mundo Mágico es tal que en la ya mencionada página web los usuarios pueden hacer un test oficial según el cual el Sombrero Seleccionador determina a qué casa de Hogwarts pertenece, así como otro para saber cuál es su Patronus (animal protector que aparece tras un dificilísimo hechizo).

Dado el éxito que no para, no es sorpresa que casi cada año emitan la saga entera en la televisión. Pero por su aniversario, además, tiene sentido que se reestrene en las salas de cine. De hecho, esta sería la segunda vez que se proyecta este año en los cines del Estado español, pues la distribuidora decidió poner en algunas carteleras la saga entera para celebrar la reapertura de las salas en junio.