Una manifestación denuncia en Iruñea las mil caras del racismo
Las movilizaciones contra el racismo y la xenofobia de esta semana en Euskal Herria han concluido este sábado con una manifestación en Iruñea que ha mostrado y denunciado sus múltiples facetas.
Una manifestación, convocada por la plataforma SOS Racismo con motivo de la celebración de la Semana Antirracista, ha recorrido este sábado el centro de Iruñea para denunciar «las múltiples caras del racismo que nos atraviesa».
Los participantes en la manifestación han comenzado la marcha en la Plaza de las Merindades portando pancartas con los lemas "Todos los derechos para todas las personas", "ILP para una regularización extraordinaria de personas extranjeras" y "¿En qué lugar del mundo el/la africano puede vivir en paz?".
También han portado carteles con frases como "Racismo es: Ley de Extranjería", "Racismo es: Que me miren con desconfianza", "Racismo es: Desigualdad de derechos", "Racismo es: No facilitar la integración" o "-Raza, +razón".
La manifestación ha recorrido el centro de Iruñea hasta llegar a la Plaza del Ayuntamiento, donde se ha leído el titulado Manifiesto contra el Racismo y la Xenofobia.
El racismo, se denuncia en el texto, «sigue vigente en la actualidad, forma parte de la estructura social y política y sigue sirviendo para recortar o suprimir derechos y libertades de personas en función de su origen y racialización».
Además, agrega, el racismo «sigue institucionalizado, con leyes que discriminan de manera directa e indirecta, como la Ley de Extranjería, que sigue condenando a la irregularidad a miles de personas, o las políticas de extranjería que criminalizan el derecho a circular libremente».
«Hoy estamos aquí para decirlo muy claro: el racismo sigue existiendo en la actualidad y en estas tierras. Hemos traído carteles con diferentes formas de racismo; hablan del racismo en el empleo, en educación, en sanidad, en las leyes, en las calles, en las actitudes, en las noticias… entre otras», asegura la plataforma.
En ese sentido, considera que «en las vidas de personas migradas y racializadas las discriminaciones operan de maneras múltiples, y muchas ocasiones simultáneamente. Desde Coordinadora Antirracista Navarra entendemos que deben funcionar también así los mecanismos de denuncia y lucha».
Estos mecanismos, destaca, son necesarios porque «el racismo es un lastre que trasciende siglos y que sigue funcionando como una herramienta para sostener el sistema de privilegios del norte global sobre el sur global, de quienes están en el centro y ostentan poder económico, social y político sobre las que son relegadas a los márgenes».
Otra expresión de esta lacra, se indica en el manifiesto, «es el racismo social, basado en el pensamiento excluyente, que hace que se justifique, no se la haga frente, se tape, o viendo el racismo siempre en las otras, es decir, convirtiendo el racismo en un tabú».
Ley de Extranjería, Ley Mordaza y Ucrania
Por ello, subraya, «volvemos a exigir la derogación de la Ley de Extranjería y la Ley Mordaza, así como el cierre definitivo de los Centros de Internamiento y retención (CIE, CETI, CATE) pues son la máxima expresión del Racismo institucional. Proponemos seguir combatiendo el racismo en todas sus formas y seguir aunando luchas contra este sistema excluyente, que pretende dividirnos en categorías y seguir construyendo privilegios aniquilando nuestros derechos».
En las últimas semanas, resalta, la guerra en Ucrania «nos ha mostrado una nueva faceta del racismo europeo, de discriminación y de trato, exigimos el mismo trato que al pueblo ucraniano para todas las personas que ejercen su legítimo derecho a migrar y a construir sus proyectos de vida de manera digna».
Además, la plataforma se une «a las voces que están denunciado los ataques contra las comunidades romaníes dentro y fuera de las fronteras de Ucrania, síntoma atroz de la naturaleza sistémica del antigitanismo y de la necesidad urgente de blindar los derechos de todas las personas».
El padrón
Por último, el manifiesto alude a una problemática «que afecta a muchas personas y especialmente a personas migradas y racializadas: el padrón».
El acceso al empadronamiento, denuncia, «se ha convertido en un privilegio, porque una parte de la sociedad tiene grandes dificultades para conseguir documentos requeridos desde los ayuntamientos. Por ello desde Coordinadora Antirracista Navarra lanzamos una campaña para reclamar el derecho de empadronamiento a todas las personas y hacer cumplir la obligación de las instituciones a hacerlo efectivo».
Así, anuncia la plataforma, durante el año va a contactar con instituciones y partidos políticos para hacerles llegar sus propuestas y, en paralelo, llevará a cabo actividades de sensibilización y denuncia sobre este tema con movilizaciones en la calle, formaciones, charlas y entrevistas para concienciar la sociedad.
«En nuestra diversidad reside nuestra fortaleza y capacidad de resistencia. Frente a todo el miedo y el odio que desde los poderes nos intentan inyectar, seguiremos construyendo redes de apoyo mutuo para construir alternativas a este sistema que sigue intentando reducirnos a categorías», concluye el manifiesto.