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Consumado el divorcio entre los socialistas y los abertzales en la Alcaldía de Hendaia

El Consejo Municipal que tuvo lugar el miércoles en Hendaia terminó con la alianza que comenzó en la segunda vuelta de las elecciones a la Alcaldía del 2020. Se retiró de sus cargos a las dos ediles abertzales que tenían responsabilidades municipales junto con el socialista Kotte Ezenarro.

Votación a favor de romper la alianza entre los socialistas, comunistas y abertzales en Hendaia. (© Guillaume FAUVEAU)

La alianza entre Hendaia Biltzen y el Partido Socialista terminó en el Consejo Municipal del miércoles. Tras el acuerdo firmado antes de la segunda vuelta de las elecciones del 2020, el grupo abertzale gestionaba dos áreas que ahora han quedado en manos de la mayoría del alcalde, Kotte Ezenarro. La decisión fue aceptada por los socialistas, los comunistas y los abertzales.

La votación a mano alzada mostró de abril la clara voluntad de los partidos de romper el acuerdo; Ezenarro concluyó definiéndolo como «divorcio amistoso», aunque los intercambios entre concejales de ambos grupos previos a la votación dejaron claras las discrepancias.

Fue el pasado 18 de abril cuando el alcalde y vicepresidente de la Mancomunidad Vasca dio a conocer formalmente su decisión de romper la alianza.

Tras esta ruptura, la oposición está formada por 13 concejales abertzales y de la derecha, mientras que la mayoría socialista y comunista está formada por 20 miembros.

Puntos divergentes

Céline Cotinat y Claire Legardinier gestionaban hasta el miércoles las concejalías de Nuevas movilidades y circuitos cortos, y Economía social y solidaria. En su alocución, esta última enumeró los puntos divergentes entre ambos grupos: el proyecto Legarralde, el futuro de los terrenos Moleres, los transportes… Incluso añadió que espera que la juventud se haga cargo de la política local, para cambiar las costumbres y las formas de vida, «para responder a las urgencias sociales a veces olvidadas en favor de intereses personales».

Ante la ruptura de la coalición, la oposición de derechas no participó en la votación, tal y como afirmó su cabeza de lista, Pascal Destruhaut, que dijo negarse a hacer de «árbitro».