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El bienestar de la mascota, por encima de la belleza

Tamara Alkorta aplica en su consulta de Tolosa los conocimientos y la experiencia adquiridos en más de 25 años de trabajo en el sector de la peluquería canina.

El corte de pelo no solo mejora la estética, también contribuye al bienestar. (NAIZ)

Portugaluja de nacimiento y amante de los animales, Tamara Alkorta lleva media vida cumpliendo su sueño de trabajar en lo que realmente le apasiona: los animales. Desde muy pequeña, ha convivido con perros, concretamente con los de raza schnauzer mini. Fueron sus mejores amigos, y a día de hoy sigue teniéndolos de la misma raza, concretamente tres preciosos schnauzer junto a tres adorables gatos.

Fue un día que llevó a su perra a una peluquería, cuando salió tan sumamente fea que empezó a interesarse por el mundo de la peluquería canina. Así, acudió a varias exposiciones caninas con su perra, y comenzó a relacionarse con personas que trabajaban en centros caninos.

Poco a poco fue integrándose en el sector, hizo un seminario sobre peluquería en schnauzer y empezó su andadura como profesional en 1995. Fue entonces, hace 27 años, cuando Tamara tuvo la oportunidad de formar parte de la primera peluquería canina de Bilbao, Royal Touch, desarrollándose por primera vez como profesional en el sector.

Los primeros pasos, confiesa, los dio «un poco «a ciegas». En aquella época, no había «mucha historia» en el mundo de la peluquería canina, «nada que ver con la variedad que hay ahora», explica. Hace unos años, conoció a su actual marido y se fue a vivir a Abaltzisketa, con las mismas ganas de seguir ligada al mundo de la peluquería canina. Así que, en el año 2019, emprendió su propia peluquería canina en Tolosa, Tamara Alkorta Txakur Estilista.

Formación continua

Los clientes de este centro son fieles, siempre suelen ser los habituales. Admite que la peluquería no va nada mal, incluso comparte las horas de la semana con una compañera que está empezando, y poco a poco aprendiendo.

Según explica Tamara, como en todas las profesiones, se aprende practicando y formándose. Así, asegura que nunca deja de estudiar, y a día de hoy cursa diferentes seminarios durante algunos fines de semanas para seguir formándose. «Con 500 horas de un curso de peluquería no es suficiente», sostiene, a la vez que se lamenta de la situación que atraviesa el sector.

«Hoy en día, la peluquería canina no es una profesión oficial, por lo que los estudios constan de cursos y seminarios ofrecidos en entidades privadas», explica.

Corte de uñas y pelo

En cuanto a la actividad que desarrolla diariamente en su consulta, lo que más le piden es el servicio de cortar las uñas. Algo básico y que Tamara hace con mucha frecuencia, así como cortar el pelo para que los perros puedan estar guapos y frescos. Hay veces que la portugaluja se ha echado las manos a la cabeza con lo que le han llegado a pedir. «En alguna ocasión me han pedido hacerle al perro el ‘león’, es decir, cortarle el pelo del cuerpo y dejarle mucho pelo en la zona de la cabeza», explica.  

Tamara tiene muy presente el bienestar del animal antes que los deseos de los dueños. Por ejemplo, tiene muy claro que no corta el pelo al cero. ¿Por qué? Según explica, «hay que pensar en una persona calva cuando está al sol en temporada de verano. Se echa crema porque si no la piel sufre, se quema… Y eso mismo ocurre cuando se corta el pelo al cero a los perros». Por ello, y aunque no suele imponerse a lo que los clientes quieren, esa norma la tiene siempre muy presente. El objetivo es claro, que el bienestar de la mascota esté siempre por encima de la belleza.

Como su propio nombre indica, Tamara Txakur Estilista atiende generalmente a perros, y no porque no sea amante de los gatos –tiene tres–, sino porque el gato tiene una forma diferente de comportarse en un sitio que no conoce, y no pone las cosas fáciles para cortarles el pelo como los canes. En cualquier caso, Tamara recalca que adora a los gatos.