EH Bildu sale de la reunión con el Gobierno como única baza de Chivite para los presupuestos

Tras más de una hora de reunión con el Gobierno para tratar los presupuestos de 2023, los responsables de EH Bildu han demandado que cumpla con todos los compromisos firmados el año pasado y participar activamente en la elaboración de las nuevas cuentas. Navarra Suma decidió no acudir a su cita. 

Después de que Navarra Suma diera plantón al Gobierno, EH Bildu ha entrado a Palacio como única opción para que María Chivite aprobara los presupuestos del año próximo. El Gobierno del PSN, Geroa Bai y Podemos siempre se apoyó en EH Bildu los tres años previos. 

Laura Aznal, la nueva candidata de la formación, ha acudido acompañada por Bakartxo Ruiz y Adolfo Araiz a la reunión. Por el lado del Ejecutivo, han estado presentes la consejera de Hacienda y portavoz, Elma Saiz, y los vicepresidentes primero y segundo: Javier Remírez (PSN) y José Mari Aierdi (Geroa Bai). 

A preguntas de los periodistas sobre si el plantón de Navarra Suma dejaba a EH Bildu en una posición de fuerza, Aznal ha dejado claro que esta cuestión «no es baladí».

En cuanto a las demandas de la formación independentista, hay dos principales. Una de ellas es el cumplimiento de los compromisos firmados en el presupuesto anterior que el Gobierno navarro aún no ha cumplido. EH Bildu exige que se cumplan estas promesas y, además, una caldendarización sobre cuándo se acometerán todas estas partidas. 

La segunda de las peticiones de EH Bildu es participar en la elaboración misma de los presupuestos. No quieren que su papel se quede en meras enmiendas, sino que plantean reunirse con los distintos departamentos para aportar desde el inicio. 

En este sentido, como ya sucedió en las ocasiones anteriores, EH Bildu ha acudido con un documento de trabajo. En este caso, ha trasladado un balance de lo realizado hasta ahora, así como la traslación de las prioridades de la formación. 

Aznal (que ha intervenido en castellano, después de que Ruiz lo hiciera en euskara) ha señalado que «el documento de trabajo recoge las prioridades de Euskal Herria Bildu para el próximo ejercicio. Les hemos advertido de que vamos a ser ambiciosas y exigentes. Hemos demostrado nuestro ánimo de acordar, pero recordando que es un Gobierno en minoría». 

Ruiz, por su parte, ha insistido que persisten diferencias importantes en varios aspectos, como el de la fiscalidad. En este sentido, ha recordado que a una negociación no se viene con posturas inmovilistas y que ambas partes deben dejar de lado las líneas rojas. 

Asimismo, Ruiz ha adelantado que las próximas tres semanas van a resultar intensas y que esto no ha hecho «nada más que empezar». 

El desplante de Navarra Suma

El alejamiento de Navarra Suma de la negociación presupuestaria ha venido siendo progresivo. La formación de Esparza lleva su propia narrativa al respecto. El primer año, Esparza mantuvo una breve reunión a la que llegó con el único fon de dar un ultimátum. «Tendrás que elegir entre EH Bildu o nosotros», afirmó haberle dicho a Chivite aquel día. 

En 2020, la reunión se quedó en videoconferencia y Esparza no pudo negarse. Tampoco en esa ocasión fructificó nada. 

El año pasado, sin embargo, Navarra Suma prefirió dar cierta espectacularidad a sus diferencias con Chivite. Para ello, acudió a la reunión para levantarse airadamente a los diez minutos y después colgar un vídeo corto en las redes con intención de que se viralizara. Dijo no querer participar en el «teatrillo». 

En esta ocasión, simplemente ha dicho que no ha ido. Dejando a EH Bildu como única opción de Chivite para sacar adelante unos presupuestos expansivos (449 millones de euros más que el anterior, cerca de un 10%). Si Chivite no aprueba estas cuentas, no podría ampliar las partidas y acometer ese gasto suplementario. 

Izquierda-Ezkerra

Izquierda Ezkerra estaba citada tras EH Bildu. Han llegado un poco antes de tiempo, sin que Aznal, Ruiz y Araiz hubieran abandonado el Palacio. El único voto en el Parlamento de la formación no es relevante para el juego de mayorías y, además, I-E irá a las próximas elecciones coaligado con Podemos, que actualmente forma parte del Gobienro. 

A través de una nota de prensa, los de María de Simón han manifestado su voluntad de «materializar unos Presupuestos que protejan socioeconómicamente a las familias trabajadoras, así como la necesidad de profundizar en políticas fiscales justas, progresivas y redistributivas».