EH Bildu de Iruñea reclama crear un fondo de un millón de euros frente a la pobreza energética
EH Bildu de Iruñea ha propuesta que el Ayuntamiento de Iruñea cree un fondo de un millón de euros para ayudas para combatir la pobreza energética. Para ello, defiende que se modifique el presupuesto de 2022. Junto a ello, quiere impulsar las centrales de biomasa y las comunidades energéticas.
EH Bildu defenderá en la próxima Comisión de Presidencia del Ayuntamiento de Iruñea la creación de un fondo de ayudas para combatir la pobreza energética dotado con un millón de euros ampliables según las necesidades que se detecten. Esta medida está integrada dentro de un plan más ambicioso que incluye, entre otras cosas, implicar activamente al Ayuntamiento en la creación de centrales de biomasa en los barrios como alternativa al consumo de gas, o impulsar la creación de comunidades energéticas de autoconsumo. «Los precios se están disparando en un contexto de alza general de la inflación y no podemos permitir que este invierno algunas familias de Iruñea tengan problemas para calentar sus hogares», ha destacado Joseba Asiron.
El portavoz de EH Bildu, que ha comparecido en rueda de prensa junto al concejal Borja Izagirre, ha explicado que el plan que impulsarán contiene dos tipos de medidas: «Unas de carácter paliativo y otras de carácter estructural». El fondo de ayudas contra la pobreza energética, así como una instrucción especial de Alcaldía a las unidades de barrio para activar un sistema de detección y seguimiento de situaciones de pobreza energética, se encuadran dentro de las primeras.
En su exposición, Asiron ha explicado que para poner en marcha el fondo de ayudas «apostamos por una modificación urgente del presupuesto de 2022, ya que las necesidades se van a dar de forma inmediata». »Si Navarra Suma no lo impulsase, propondremos a los demás grupos de la oposición incorporarlo a los presupuestos de 2023, dando, eso sí, carácter retroactivo a las ayudas», explicaba. Familias en situación vulnerable y comunidades con calefacción central serían dos de las receptoras potenciales de este tipo de ayudas.
Centrales de biomasa y comunidades energéticas
En cuanto a las medidas de carácter estructural, destaca la apuesta a medio plazo por impulsar centrales de niomasa en los barrios de la ciudad. Al respecto, Asiron ha planteado una partida de medio millón de euros para que el Ayuntamiento participe, junto al Gobierno navarro, en la que ya se está promoviendo en la Txantrea. «Estamos hablando de impulsar en toda la ciudad la biomasa certificada y de kilómetro 0 como alternativa más barata, ecológica y segura que el gas para el uso de las calefacciones», explicaba el portavoz abertzale.
En el mismo plano se encuentra la propuesta de impulsar las comunidades energéticas de autoconsumo. EH Bildu plantea que de cara a 2023 se impulsen hasta cuatro nuevas comunidades de este estilo en otras tantas dotaciones municipales en diferentes barrios que tomarían como ejemplo la que se está impulsando en el colegio de Mendillorri. «Esto se explica de una forma muy sencilla: el Ayuntamiento financia la creación de estas comunidades en centros y edificios de titularidad pública y la energía que se genera la consumen las comunidades vecinales adyacentes», ha dicho Asiron. «El Ayuntamiento es el inversor y las familias las beneficiarias», ha añadido.
Más fondos para eficiencia energética en edificios antiguos
También se plantea aumentar un 150% la partida de subvenciones para energía eléctrica fotovoltaica de autoconsumo en edificios dentro del término municipal. En concreto, se plantea pasar de los 40.000 euros actuales «a, al menos, cien mil euros». Igualmente, EH Bildu plantea extender a todos los barrios el nivel máximo de ayudas a la rehabilitación que actualmente disfrutan Alde Zaharra y Zabalgunea. «Esta propuesta se justifica en la necesidad de dar cobertura, por ejemplo, a los proyectos de revestimiento de edificios que buscan aumentar la eficiencia energética», explicaba el portavoz soberanista.
En la misma línea, EH Bildu pide crear una oficina presencial modelo Efidistric-Txantrea en Arrosadia para impulsar la rehabilitación energética de estos barrios obreros. «Más allá de la cuestión polemizada y mal gestionada por Navarra Suma del PEAU de este barrio, creemos que Arrosadia, como Txantrea, necesita coger impulso de rehabilitación integral para que sus edificios, ideados en su día sin parámetros de eficiencia energética, opten a ella».
La última propuesta plantea recuperar el proyecto del Operador Energético Municipal «como herramienta para el desarrollo y seguimiento de toda la estrategia de transición energética con funciones de comercializadora municipal o gestión de las comunidades energéticas municipales y de los excedentes», ha concluido Asiron.