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Las bolsas dejan atrás un año nefasto, golpeadas por la inflación y el miedo a la recesión

Hoy comienza un nuevo año en las bolsas, que debería borrar el mal sabor dejado por el desastre sufrido en 2022. La alta inflación, las subidas de los tipos de interés y el riesgo de entrar en recesión desarbolaron a los mercados. El Ibex, el mejor índice europeo, terminó con una caída del 5,56%.

Corredores de la Bolsa de Fráncfort el pasado viernes. (Daniel ROLAND | AFP)

Nadie pudo adivinar en 2021 que el argumento de la transitoriedad de los precios altos, defendido con firmeza largo tiempo por parte de los bancos centrales, iba a descarrilar de forma abrupta el año pasado. Las subidas continuadas de la inflación, que ha llegado a techos históricos en ambos lados del Atlántico, parecen haber encontrado sus picos máximos, con el 10,6% de octubre para la zona euro y el 9,1% de junio en Estados Unidos.

Los presidentes de la Fed y el BCE ya no ocultan que sus expectativas son preocupantes y por eso están avisando de un periodo largo de tipos altos antes de dar con el momento de girar a la baja. Según sus discursos, no habrá cambios en la política restrictiva monetaria hasta que la inflación vuelva al 2% en el tiempo.

En la actualidad, los tipos de interés están en el 4,50% en Estados Unidos, tras siete subidas desde marzo, y en el 2,50% en la zona euro, con cuatro subidas desde julio. El consenso del mercado espera que la Fed los lleve en 2023 hasta el 5%, mientras el BCE podría detenerse en el 3,5%.

Todas estas subidas están acercando la posibilidad de una entrada en recesión a principios de este año. De momento, no se ha llegado a ese punto en los datos oficiales, pero las proyecciones, aunque no de forma homogénea y global, sí sustentan un empeoramiento que perfila ese escenario. Estados Unidos, después de entrar en recesión técnica en el segundo trimestre de 2022, volvía a crecer en el tercero con un aumento del 0,8% intertrimestral. En tasa anualizada, el crecimiento era del 3,2%, frente al -0,6% del periodo anterior. La zona euro, aunque sigue dando muestras de debilidad, se ha mantenido siempre en expansión económica. En el tercer trimestre crecía un 0,3% en comparación mensual, y un 2,3% respecto al año anterior.

Más factores negativos

Más allá de las políticas monetarias y la persistente inflación, los inversores han hecho frente a otros factores negativos que han castigado las inversiones en bolsa y la mayoría de activos.
Uno de los fundamentales es el impacto continuo de la guerra de Ucrania, que ha impulsado la crisis energética iniciada en 2021.

El inicio de la invasión rusa trajo unas subidas históricas del gas, además de las de otros productos como petróleo o carburantes. Y este problema puede todavía ir a más, a pesar del intento de la Unión Europea para poner un tope al precio del gas de Rusia. La incertidumbre sobre la posición de Moscú, que ya ha anunciado medidas para contestar a Bruselas, añade más sesgo negativo al futuro de una estabilidad del mercado energético y a la posibilidad de reducir el precio para no perjudicar la capacidad productiva en la Unión Europea, dañada en sectores estratégicos donde hay grandes consumidores.

Por otro lado, la situación de China ha dado un giro inesperado en diciembre con la supresión controlada de la política de cero covid, que había torpeado su economía al decretar cierres en grandes ciudades. A partir del 8 de enero se levanta la obligatoriedad de hacer cuarentena para los viajeros que lleguen al país. Los analistas creen que esta reapertura, aunque activará el consumo y el crecimiento, no tendrá un gran impacto inmediato en la economía.

Pérdidas generalizadas

El cierre de 2022 dejó balances anuales muy negativos a ambos lados del Atlántico. El Ibex, el menos castigado, perdía un 5,56%. Hoy comenzará el nuevo ejercicio desde los 8.229,10 puntos. Por su parte, Fráncfort cedió un 12,35%; París, un 9,50%; y Milán, un 13,31%. Por el contrario, Londres ganó un 0,91%. Las caídas fueron más acusadas en Wall Street. Así, el Dow Jones recortó un 8,78%; el S&P 500, un 19,4%; y el Nasdaq 100, un 33,1%.

Valores con fuertes ganancias, pese a la caída del Ibex

El cierre del año bursátil reflejó el mal momento pasado por el Ibex. Aun así, tuvo un comportamiento mejor que la mayoría de los índices de referencia, apoyado por un puñado de valores que logró altas rentabilidades.

En el lado positivo, se pueden mencionar las alzas de Caixabank (+52,28%), Sabadell (+49,15%), Repsol (+42,24%) y Bankinter (+39,02%). No extraña ver en esta lista de los mejores a los bancos, aupados por las expectativas de aumento de beneficios gracias a las subidas de los tipos de interés aprobadas por el BCE. Por su parte, Repsol está sacando provecho de los altos precios del petróleo y el margen de refino. Además, brillaba Logista (+34,63%), que entró en el selectivo este mes.
Entre los peores del año, destacaron las fuertes caídas de Fluidra (-58,75%), Rovi (-51,14%), Cellnex (-39,59%) y Grifols (-36,20%).

También fue noticia importante el abandono del Ibex por parte de Siemens Gamesa el pasado 13 de diciembre, después de haber terminado con éxito la opa lanzada por la matriz Siemens Energy. Su intención es excluir a la compañía de bolsa, que comenzó a cotizar en el año 2000 como Gamesa.