El tráfico en Alde Zaharra de Iruñea pasa de ZAC a ZBE, pero solo cambia el nombre
Las calles de Alde Zaharra de Iruñea son desde el 1 de enero Zona de Bajas Emisiones (ZBE) dejando de ser ZAC (Zona de Acceso Controlado). El Ayuntamiento reconoce que solo cambia el nombre, ya que las limitaciones de acceso son las mismas y no hacen falta nuevos distintivos.
La implantación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en Alde Zaharra de Iruñea a no supone nuevas limitaciones de acceso ni exigencias añadidas para los vehículos que circulen por estas calles. Así, no existe ninguna restricción para los automóviles según su distintivo ambiental. Es por eso, según informa el Ayuntamiento, que no será necesario que los vehículos cuenten con ningún distintivo medioambiental visible, como sí ocurre en otras ciudades como Madrid.
Es decir, lo único que cambia es la denominación de la restricción de acceso a Alde Zaharra, limitada a vecinos y vehículos autorizados, que sigue teniendo las mismas características.
En el mes de diciembre, el Ayuntamiento acordó crear la primera Zona de Bajas Emisiones en el Casco Antiguo, en cumplimiento de la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de Cambio Climático y Transición Energética, que establece la obligación de los municipios de más de 50.000 habitantes de generar una Zona de Bajas Emisiones antes de 2023. Esta nueva zona entró en vigor el pasado día 1 y afecta a la que hasta ahora era la Zona de Acceso Controlado (ZAC). El cambio de denominación, no obstante, no supone nuevas restricciones de circulación por esas calles. La zona comprende el perímetro formado por las calles Taconera, Navas de Tolosa, paseo de Sarasate, calle Duque de Ahumada, calle Juan de Labrit, calle Vergel y calle Santo Domingo (Huertas de Santo Domingo).
El acceso a estas calles está controlado, limitado a vecinos y reparto, y con la posibilidad de entradas puntuales mediante autorización previa. Desde su implantación, el tráfico de vehículos en la zona se ha reducido en porcentajes que superan el 40% en las principales calles.
No obstante, el Ayuntamiento de Iruñea está analizando el Real Decreto sobre Zonas de Bajas Emisiones, aprobado el pasado 27 de diciembre, «para comprobar las afecciones que pueda tener en la ciudad». Además, el Ayuntamiento se está reuniendo con vecinos y vecinas, comerciantes y otros sectores implicados, «para que puedan expresar sus necesidades y tenerlas en cuenta en los nuevos desarrollos». Además, en paralelo, se van a instalar sensores en toda la ciudad para ayudar en el diseño de una zona de bajas emisiones concreta y adaptada a las características peculiares de Iruñea.
El Ayuntamiento ha recibido, a través del proyecto ‘Pamplona Avanza. Medidas palanca en la movilidad sostenible y la Zona de Bajas Emisiones’, 914.726,23 euros (IVA no incluido) de los fondos europeos Next Generation EU para el desarrollo y puesta en marcha de esa ZBE, que según reconoce el propio Consistorio ha consistido en un mero cambio de nombre.