ELA, sobre la reforma laboral: «El 76,3% de los contratos siguen siendo temporales»

El estudio ‘Análisis de la contratación en 2022’ elaborado por ELA ha denunciado que, un año después de la convalidación de la reforma laboral, un 76,3% de los contratos firmados en 2022 fueron temporales, mientras que solo uno de cada diez fue indefinido a jornada completa.

ELA ha alertado este lunes que, casi un año después de que el Parlamento español convalidara el decreto de la reforma laboral, esta no ha conseguido abordar la precariedad del mercado laboral, sino más bien lo contrario. Así se recoge en el informe ‘Análisis de la contratación en 2022’ elaborado por el sindicato y que algunos de sus representantes han presentado este lunes.

Xabier Zabala, miembro del Gabinete de Estudios de ELA, ha comenzado realizando un análisis de la reforma de 2022, ante «los buenos resultados» promulgados por «distintas instituciones y ciertos medios de comunicación». El primer dato que ha resaltado Zabala ha sido que el 76,3% de los contratos siguen siendo temporales, o lo que es lo mismo, tres de cada cuatro firmados durante el último año. Esto supone que un 23,7% fueron de carácter indefinido, aunque de estos solo la mitad eran a jornada completa. «En 2022, podemos decir que únicamente uno de cada diez contratos fue indefinido a jornada completa», ha criticado.

En segundo lugar, Zabala ha señalado que el 44% de los contratos firmados por las mujeres de Hego Euskal Herria en 2022 fueron a tiempo parcial. Una cifra que prácticamente dobla el porcentaje de contratos parciales entre los hombres, que se sitúa en el 22,9%. «Estos datos reflejan la discriminación que las mujeres siguen sufriendo tanto en el ámbito laboral como en el familiar», ha valorado el miembro de ELA.

Sobre la duración de los contratos temporales, Zabala destacado que el 75% de los contratos temporales duró menos de un mes, añadiendo que el 10,7% de los contratos, 72.075 en total, tuvieron una duración menor a 7 días, lo que refleja que «el problema de la temporalidad sigue estando a la orden del día».

Por último, ha criticado el aumento de la contratación indefinida, «sobre todo en sus modalidades más precarias». Así, el aumento de los contratos a jornada parcial y fijos discontinuos superó «ampliamente» el aumento de la jornada completa. Zabala ha detallado que el aumento de contratos fijos discontinuos se produjo «en modalidades mucho más flexibles que antes», y que del mismo modo «los contratos fijos son mucho más precarios que antes».

Aumenta la «contratación indefinida precaria»

El responsable de Negociación Colectiva de ELA, Pello Igeregi, ha sido el encargado de realizar un balance político sobre el impacto de la reforma laboral en la contratación. Según Igeregi, el primer problema fue que hace un año la CEOE se negó a derogar la reforma de 2012 y que actualmente sigue siendo «fácil y barato despedir». «Un año después estamos en el mismo punto: sigue siendo la CEOE la que limita las opciones de mejorar la legislación laboral», ha criticado.

Igeregi también se ha referido a la «contratación indefinida precaria»: «Estamos hablando de trabajadores y trabajadoras que tienen un contrato indefinido pero que de forma fraudulenta les finalizan el contrato durante el periodo de prueba, algo que ha aumentado un 700% durante el último año».

Por su parte, la secretaria general adjunta de ELA, Amaia Muñoa, ha explicado que «los resultados de esta reforma distan mucho de lo que vende el Gobierno», remarcanado que la mejora de la contratación en aspectos estadísticos «no es significativa», a merced del 76,3% de contratos temporales. Muñoa ha acusado al Gobierno español de «esconderse» detrás de los datos y de aprovechar la situación para «hacer propaganda».

En ese sentido, la secretaria adjunta de ELA ha apuntado que los partidos del Ejecutivo han incumplido su compromiso de derogar la reforma de 2012, impulsada por el Gobierno de Mariano Rajoy. «Hace un año se renunció a derogar la reforma laboral y con ello se consolidaron sus elementos más lesivos, además de mantenerse la estatalización de la reforma de 2010», ha declarado.

Por ello, desde ELA han reivindicado la derogación de la reforma de 2012 y la estatalización «que nos impide firmar en Euskal Herria convenios que mejoren las condiciones de miseria de los convenios estatales».