Licitada la construcción del puente móvil entre Erandio y Barakaldo

La Diputación de Bizkaia ha licitado ya la construcción del puente móvil de 460 metros que unirá las redes ciclistas de ambas márgenes de la ría entre Erandio y Barakaldo garantizando la navegabilidad en las mismas condiciones de hoy en día.

El proyecto, que cuenta con un presupuesto de 25,9 millones de euros y establece un plazo de ejecución de 30 meses, parte de un planteamiento similar al que existe en la ría de Ondarroa desde principios del siglo XX. Y es que gracias a los tramos móviles que tendrá en su parte central, permitirá el paso de embarcaciones de gran tamaño.

El nuevo proyecto incorporará varias mejoras sobre el proyecto inicial, que recogen propuestas realizadas por otras instituciones o entidades. Entre ellas destaca la ampliación del parque de Altzaga, en Erandio, mediante la construcción y urbanización de una estructura que sobrevolará la lámina de agua de la ría con la que se generará un nuevo espacio de 1.970 metros cuadrados junto al puente.

Asimismo, en el proyecto constructivo se ha adecuado el aterrizaje del puente en la orilla de Barakaldo, adaptándolo a la futura actuación urbanística en la zona, y además se ha reforzado y optimizado la estructura a nivel de tablero, pilas y cimentaciones.

En la elaboración del presupuesto de licitación se han actualizado los precios estimados en el proyecto inicial teniendo en cuenta el incremento que han registrado los precios de los materiales de construcción, especialmente del acero, así como del coste de la mano de obra, de tal forma que el presupuesto ha pasado de una estimación inicial de 16 millones a 25,9 millones de euros.

Las ingenierías SBP –con el referente internacional en el diseño de estructuras Mike Schlaich–, Calter y Fulcrum firman esta nueva pasarela que unirá las redes ciclistas de Barakaldo y Ezkerraldea con el Bulevar de la ría, facilitando que la ciudadanía de ambas márgenes pueda optar por realizar sus desplazamientos habituales en bicicleta o a pie. Así mismo, al tratarse de un puente móvil, garantiza la navegabilidad de la ría en las mismas condiciones de hoy en día.

Si bien la anchura del cauce de la ría en el punto en que se ejecutará el puente es de 240 metros, la longitud total de la estructura será de 460 metros en un trazado diseñado en curva para integrar los aterrizajes del puente en las dos orillas y para hacer más cómodas las pendientes a ciclistas y peatones.

El ancho útil de la pasarela será de seis metros, de los cuales tres se destinarán al uso peatonal y otros tres al ciclista, estando ambas franjas segregadas entre sí.  El puente integrará asimismo mobiliario urbano y contará con iluminación.

Dos tramos móviles

Según se define en el proyecto constructivo, la estructura se apoyará sobre 12 pilas ancladas al lecho de roca y distribuidas en dos tramos fijos y dos tramos móviles. Los vanos tendrán una luz (distancia entre pilas) de 27 metros, excepto en el vano central, que acota el canal de navegación y tendrá una luz de 60,20 metros, y sus dos vanos contiguos, con una luz de 20 metros. Los dos tramos móviles se abrirán girando en el sentido de las agujas del reloj, de modo que en el tramo más cercano a Barakaldo el vano central quedará orientado aguas arriba, y en el de Erandio, aguas abajo.

El canal navegable bajo el puente tendrá una anchura de 50 metros y la inmensa mayoría de barcos que navegan por la ría pasarán con el puente cerrado, ya que el diseño presenta un gálibo libre bajo tablero de 6,5 metros en pleamar. Tomando como referencia el tráfico fluvial actual, el puente se abriría dos veces por semana para permitir el paso de embarcaciones de mayor porte.

Respecto a los materiales, las pilas, estribos y lastres del puente se realizarán en hormigón armado, y la sección estructural en diferentes aceros que responden a los requerimientos mecánicos de cada una de las partes; el tablero y los mástiles y las velas que constituyen el sistema de atirantado de los dos tramos móviles. Entre las mejoras introducidas en el proyecto constructivo, y en base a los resultados de la campaña geotécnica, se han reforzado las cimentaciones y las pilas de la estructura, adecuándolas a los diferentes esfuerzos a los que estarán sometidas.

En el acto de presentación del proyecto, la alcaldesa de Erandio, Aitziber Oliban, destacó que además de mejorar la conexión con Barakaldo y la seguridad vial, este puente ratifica la apuesta compartida por la movilidad sostenible. Asimismo, pone en valor que supondrá un importante empujón a la colaboración con la margen izquierda, con la que existen multitud de sinergias, incrementando la calidad de vida de sus vecinas y vecinos.

Por su parte, la alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, ve en este puente una oportunidad para posicionar Barakaldo como eje de la movilidad sostenible entre ambas márgenes y Bilbao, con el añadido de que se realizará en una zona estratégica de expansión como es el parque de ribera impulsado junto a Bilbao Ría 2000.

Las obras del parque de ribera de Barakaldo comenzarán en abril

El puente móvil entre Erandio y Barakaldo se asentará en la margen izquierda junto al nuevo parque de ribera, un espacio verde de 90.000 metros cuadrados ubicado en la dársena de Portu (entre la desembocadura del río Galindo y el puente de Rontegi) en el que se crearán una playa urbana, zonas de juegos y pistas de deporte.

Está previsto que las obras de urbanización de este espacio comiencen el próximo mes de abril, toda vez que la sociedad Bilbao Ría 2000 las adjudicase el pasado mes de enero a las empresas Viuda de Sainz y Perica Obras y Servicios.

Las obras se llevarán a cabo en dos fases por un presupuesto total de 9 millones de euros y se estima que tengan una duración total de 18 meses. Se estima, por lo tanto, que el parque de la ría será una realidad en 2024.

Este nuevo espacio recibirá el nombre de Zamalanda, en referencia al cargadero de mineral (zamaleku, en euskera) que existía en las inmediaciones del parque y que fue rehabilitado en 2002, y a la campa (landa) o espacio verde que se creará en dicho lugar.
Al dotarlo de este nombre, la pretensión es tener presente el pasado industrial de Barakaldo. De hecho, la sociedad Bilbao Ría 2000 concibe este proyecto como una vía para recuperar y dotar de vida al área industrial que utilizaron los Altos Hornos de Bizkaia en Barakaldo.

La alcaldesa de esta localidad, Amaia del Campo, sostiene que «somos una ciudad orgullosa de su pasado que mira al futuro teniéndolo muy presente. Por eso nuestro pasado industrial está reflejado en este nombre, y también estará presente en el parque con unos paneles para cuya elaboración hemos contado con la ayuda del historiador barakaldés Mikel Alvira».

Además de la mencionada playa urbana, está previsto que el nuevo parque albergue otros servicios como zonas de juegos infantiles, un merendero, una pista de patinaje, una de pump track para bicicletas, una gran plaza, una zona de restauración y un espacio para huertos.

El nuevo parque cambiará por completo la forma en la que Barakaldo se relaciona con su ría. «Durante años nuestra industria nos hizo vivir de espaldas a la ría, porque era una zona que se utiliza para el transporte de mercancía. Ahora, no solo hemos comenzado a mirar a la ría y ponerla en valor, sino que vamos a poder tocar la balsa de agua y disfrutar de ella», asegura la alcaldesa.