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El PSE se une en la crítica de la oposición a la «falta de compromiso» con la variante de Ermua

Con las elecciones a la vista, el PSE ha criticado en Juntas de Bizkaia la «falta de compromiso» de su socio en la Diputación con la culminación de las obras de la variante de Ermua. El PNV se ha quedado solo en una proposición en la que insta a reducir «en lo legalmente posible» los plazos.

Concentración para exigir que se culmine la variante de Ermua. (Oskar Matxin Edesa | FOKU)

La culminación de la variante de Ermua ha marcado la última sesión de las Juntas Generales de Bizkaia, en la que el PNV se ha quedado solo en la defensa de la posición de la Diputación. Sus socios del PSE han lamentado la «falta de compromiso» de los jeltzales, que se han posicionado en contra de reducir los plazos para la puesta de marcha del proyecto, tal y como defienden desde el Ayuntamiento.

En la comisión se han sentado entre el público el alcalde de Ermua, Juan Carlos Abascal, y su antecesor, Carlos Totorika, para mostrar el hartazgo que hay en la localidad con este asunto.

Al final, gracias al voto ponderado del PNV, ha salido adelante una proposición en la que se insta a la Diputación a reducir los plazos para culminar la variante de Ermua «en lo legalmente posible», de cara a iniciar las obras de la primera fase de Urtia.

Dicho acuerdo ha sido adoptado tras debatirse tres proposiciones no de norma en relación a esta solución, una del PNV, otra del PSE y una conjunta de EH Bildu y Elkarrekin Bizkaia relativa a la culminación de la alternativa viaria oeste de la localidad vizcaina.

En las tres proposiciones, los cuatro grupos junteros han marcado sus posturas sobre cómo materializar los dos tramos de la alternativa oeste que quedan por hacer, Urtia y Goitondo.

Reproches mutuos

En el debate, han surgido reproches mutuos por las posturas de las distintas formaciones. EH Bildu, Elkarrekin Bizkaia y PSE han reprochado a los jeltzales que defiendan «cosas distintas» en Ermua y en las Juntas.

Los jeltzales se han defendido diciendo que el II PTS de Carreteras, aprobado por la Cámara vizcaina con el apoyo de sus socios, incorpora la construcción de la variante y también otras 28 actuaciones.

«Somos coherentes y tenemos el deber de defender el mandato de las Juntas Generales», ha defendido la jeltzale Irene Edesa, tras criticar a la oposición por «no acordarse de la variante en los últimos cuatro años» hasta que se constituyó la plataforma ciudadana en noviembre de 2022.

La iniciativa del PNV aprobada plantea que la Diputación «siga avanzando con la tramitación del proyecto de la variante oeste de Ermua, tal y como establece el II PTS de Carreteras aprobado provisionalmente, tanto en lo que a la redacción del proyecto constructivo se refiere, como a su tramitación ambiental y administrativa».

En base a esta proposición, la Cámara vizcaína demanda al Gobierno foral que se reduzcan «en la medida de lo legalmente posible» los plazos para su culminación definitiva.

En la iniciativa se insta a la Diputación a «seguir avanzando» en la redacción del proyecto constructivo de la fase de Urtia, así como en la tramitación del proyecto constructivo de la fase Goitondo, de cara a iniciar, a posteriori, ambas obras.

Muy críticos

EH Bildu, PSE y Elkarrekin Bizkaia se han mostrado críticos con la postura jeltzale. El PSE ha planteado su propia proposición que viene a recoger lo aprobado por el Ayuntamiento de Ermua, el 31 de enero, tal y como han demandado también las dos formaciones de la oposición, pero incluyendo los socios de Gobierno «una mayor concreción», según ha defendido su portavoz Juan Otermin.

En dicha iniciativa se solicitaba al Gobierno foral una reducción del plazo de 32 meses previstos por la Diputación para la redacción del proyecto constructivo de la fase de Urtia.

El PSE ponía plazos: la fecha de inicio de las obras «no debería ser más tarde del año 2025 y la duración de las obras de toda la variante oeste (Urtia y Goitondo) debería ser de 3 o 4 años como máximo».

Por su parte, EH Bildu y Elkarrekin Bizkaia han apoyado la oferta del PSE, al tiempo que han defendido su propia iniciativa, que supone un «traslado» de lo acordado por el Pleno municipal de Ermua con amplia mayoría (solo el PP votó en contra).

La demanda de ambos grupos pasa por que la Diputación se comprometa a poner «fechas concretas de finalización, con una dotación presupuestaria en su totalidad, con inicio de las obras de la fase de Urtia según finalice el proyecto actualizado y el inicio de las obras de la fase de Goitondo de continuo, a la mayor brevedad posible».

También solicitaban reducir el plazo de los 32 meses que empezó a correr en junio del año pasado. En base al calendario actual, la obra podría licitarse en enero o febrero de 2025.

La culminación de las dos fases de la variante oeste de Ermua permitirá eliminar el paso diario de unos 1.200 vehículos pesados que se dirigen hacia los polígonos industriales de Urtia y Goitondo, algo «necesario» según han reconocido todos los grupos junteros.

Mientras se construye esta alternativa viaria, la plataforma ciudadana "Ermuko Saihesbidea, Variante Ya", pidió en la comisión de Peticiones y Relaciones con la Ciudadanía del 17 de febrero, un plan para desviar de forma temporal el tráfico de camiones y plantearon dos desvíos para no atravesar la trama urbana. La última movilización ciudadana congregó a un millar de vecinos.