El Consejo Constitucional francés valida el retraso de la edad de jubilación a los 64 años
El Consejo Constitucional francés, blindado literalmente en su sede parisina de Palais Royal, ha dado a conocer, mediante un comunicado difundido a las 18.00 de este 14 de abril, su decisión en torno a la reforma de las pensiones.
El Consejo Constitucional francés, reunido desde la mañana de este viernes en su sede parisina de Palais Royal, ha avalado el capítulo esencial de la reforma de pensiones.
El órgano encargado de velar por la compatibilidad de las leyes con la Constitución, ha avalado el propósito gubernamental de pasar de 62 a 64 años la edad de jubilación. Tampoco cuestiona la utilización del artículo 49.3 para aprobar, vía decreto, el proyecto.
De ahí que, nada más conocer el dictamen, la primera ministra gala, Élisabeth Borne, proclamara en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, que «el Consejo Constitucional ha juzgado que tanto en la forma como en el fondo la reforma es conforme a la Constitución».
#Retraites | Le @Conseil_constit a jugé, tant sur le fond que sur la procédure, la réforme conforme à notre Constitution.
— Élisabeth BORNE (@Elisabeth_Borne) April 14, 2023
Le texte arrive à la fin de son processus démocratique.
Ce soir, il n’y a ni vainqueur, ni vaincu.
En su pronunciamiento, el Consejo retoca ciertos capítulos, como los relativos al contrato y al índice de trabajadores senior.
Un consuelo vano, al avalar el grueso de la ley, pero que ha servido a portavoces de la Nupes, como es el caso del diputado comunista Fabien Roussell, para pedir al presidente francés, Emmanuel Macron, que no proceda, a «riesgo de alentar el estallido social», a una promulgación inmediata de la ley.
El Consejo ha rechazado, por otra parte, la primera de las dos demandas de referéndum. Tardará en torno a un mes en determinar si es aceptable la segunda.
Ello permitiría, a priori, abrir ese paréntesis que solicitan quienes se oponen a la reforma.
Sin embargo, nada apunta a que vaya a producirse, y es bastante probable que el presidente promulgue el texto este mismo fin de semana.
Así las cosas, la líder ultraderechista Marine Le Pen ha sentenciado que «no se puede negar la palabra al pueblo» y ha sentenciado que «la alternancia se prepara», fijando así la vista en un futuro horizonte electoral.
Elíseo y Matignon, marcan con actos y discursos la jornada
Desde horas antes de que se diera a conocer la decisión del Consejo Constitucional, tanto el Elíseo como Matignon trataron de marcar con discursos propios la jornada.
Emmanuel Macron ha acudido esta mañana a visitar las obras de reconstrucción de la catedral de Nôtre-Dame de París, fuertemente dañada por el devastador incendio de abril de 2017.
En ese encuentro con los técnicos que dirigen esa ingente obra, Macron ha hecho alusión a las dificultades y al calendario de esa puesta a punto del templo parisono y lo ha hecho haciendo suya una expresión que, desde hace tres meses, entonan los manifestantes y líderes sindicales que se oponen a la reforma de las pensiones en las manifestaciones.
«Mi divisa es no rendirse nunca», ha sentenciado, en un tono de cierta arrogancia.
Por su parte, la primera ministra, Élisabeth Borne, ha optado por dedicar las horas previas a la decisión del Consejo Constitucional a una visita a un supermercado adscrito a la cadena de distribución que aplicó, de manera pionera, la medida de canasta básica impulsada por el Ejecutivo para enfrentar la inflación.
De esta forma, la jefa del Ejecutivo cambiaba el paso y focalizaba su agenda sobre la cuestión del poder adquisitivo, la primera preocupación de la ciudadanía, según señalan las encuestas.
Si durante la visita de Macron los sindicalistas optaban por expresar su denuncia desde una barcaza, en el Sena, en el desembarco de Borne a un «super U» de Eure-et-Loir la premier y un grupo de sindicalistas jugaron al gato y al ratón, en los diferentes pasillos del centro comercial.
Además, la jefa de Ejecutivo ha sido abordada por distintos clientes, que le han trasladado su malestar, ya sobre la reforma de las pensiones, ya sobre la escalada de los precios.
Con todo, Borne, ha aprovechado la breve escala para colocar un compromiso. Ha anunciado así que el Salario Mínimo o Smic, que se revalorizó ya el 1 de enero hasta alcanzar los 1.700 euros brutos mensuales, aumentará en un 2,2% (unos 30 euros) el próximo 1 de mayo.
Al tiempo, la premier gala ha conminado a los empresarios a «negociar las escalas salariales» para combatir la pérdida de poder adquisitivo derivada de la inflación, que es hoy del 5,7%.