Osasuna pone la guinda de la Conference para la mejor temporada de la historia rojilla (2-1)
Osasuna le ha puesto la guinda a la mejor temporada de su historia confirmando la clasificación para la Conference League tras vencer al Girona con un doblete de Budimir al comienzo de la segunda parte, a lo que hay unir la final copera y la participación en la Supercopa el próximo enero.
La Conference League –podría ser la Europa League si hay sanción al Barça– es el broche de oro a una campaña sobresaliente de Osasuna, después de finalizar séptimo en Liga, disputar la final copera y jugar la Supercopa el próximo enero.
La escuadra navarra ha superado al Girona gracias a un doblete de Budimir al inicio de la segunda parte –minutos 52 y 55–, lo que ha generado la locura en las repletas gradas de un Sadar que no ha dejado ni un segundo de animar a los suyos.
Con la clasificación europea en sus manos, el conjunto rojillo firma por cifras el mejor curso de su historia de poco más de un siglo, en el quinto ejercicio de Jagoba Arrasate en el banquillo, uno de los grandes artífices de la hazaña.
Superar al cuadro catalán no ha sido tarea fácil, los de Michel han sido un digno rival. De hecho, la escuadra navarra ha salido dispuesta a jugar con la ansiedad del rival, al que solo le valía ganar para alcanzar el séptimo puesto, esperando en tres cuartos y apretando la salida catalana.
Los de Michel, fieles a su estilo, han arriesgado lo suyo para partir con el balón controlado y eso les ha costado más de un disgusto que los anfitriones no han sabido concretar en el luminoso de la primera parte.
Además, han tenido una pérdida muy importante. La de su capitán, David García, que se ha visto obligado a retirarse en el minuto 6 por una lesión muscular en el abductor, siendo reemplazado por Juan Cruz.
Cierto que el Girona ha sabido llegar con criterio al área rojilla, pero han sido los locales quienes han dispuesto de mejores ocasiones para inaugurar el marcador, con un Abde inquietando constantemente a Arnau.
El internacional marroquí, que en algunos lances ha pecado de individualismo, ha sido el primero en encarar la meta visitante, en el minuto 9, pero su chut buscando la base del poste se ha marchado fuera.
Las oportunidades se han ido intercalando. Iván Martín ha probado a Aitor, más tarde decisivo, en el 16 con un remate raso y fácil para el guardameta de Arrasate, muy seguro bajo palos.
Budimir ha puesto la réplica cuatro minutos más tarde con un zurdazo que ha buscado la escuadra tras robo de Aimar a Gazzaniga y posterior asistencia. Una pena que el de Arazuri no le ha visto antes al croata, que estaba solo apenas un instante anterior.
El encuentro ha seguido por los mismos derroteros, con los dos equipos buscando el gol, cada uno con su propio estilo. Barja ha rematado de cabeza alto un corner (m.24) y Riquelme ha puesto un nudo en la garganta a la grada (m.26) con un disparo raso y cruzado al que ha respondido la estirada de Aitor.
El mismo mal trago que se ha vivido con una pérdida de Juan Cruz (m.33) que se ha llevado con el cuerpo y la mano Castellanos –el árbitro ha dado validez a la jugada–, si bien Aridane ha restablecido el orden de inmediato.
Manu Sánchez, muy activo en el costado zurdo junto a Abde, lo ha intentado en el 36 con su pierna mala, la derecha, pero centrado y sencillo para Gazzaniga. El marroquí ha trenzado en el 39 con Aimar y su tiro ha golpeado en un defensa. En el posterior corner, Budimir ha cabeceado al centro, deteniendo el balón el meta visitante.
Todo se ha acelerado en el tramo final del primer periodo y, tanto Osasuna como Girona, han podido estrenar el electrónico. Ya en el descuento, de nuevo Abde ha recortado por dos veces y ha percutido al primer palo, pero Gazzaniga ha estado bien colocado.
En el siguiente lance, han sido los de Michel en doble ocasión quienes han podido materializar el 0-1. Una arrancada por la derecha de Tsygankov y su posterior tiro se han encontrado con la manopla salvadora de Aitor y en el saque de esquina Bernardo se ha sacado un testarazo que no ha encontrado portería de milagro.
Dos picotazos de Budimir
Esa alternancia se ha visto truncada con dos rápidas salidas rojillas a la contra en el inicio del segundo periodo, culminadas con sendos picotazos de un Ante Budimir que no solo ha estado certero, sino que también se ha vaciado en la primera línea de presión.
Dos disparos del ansioso Abde –quería despedirse por la puerta grande– han precedido a los lances que han terminado de decantar el duelo del lado rojillo, aprovechando los anfitriones los errores del adversario.
El primero, del lateral zurdo Miguel, en el 52, cuando ha intentado en posición acrobático cortar un envío largo de Torró. Ha errado y ello ha permitido que Barja haya corrido en solitario el costado diestro y servir un envío raso que ha empujado a las redes el ariete croata.
El 1-0 ha aumentado la autoestima navarra, mientras que el Girona se ha quedado tocado. Tanto, que en el siguiente lance, Aimar ha recuperado la pelota, con un toquecito ha servido a otra nueva carrera por la derecha, esta vez de Moncayola, que ha puesto una pelota aérea que ha rematado con toda su alma Budimir para subir el 2-0.
Y, de paso, desatar la locura en un graderío que, a poco más de media hora, ya se veía saboreando el premio de la Conference League. Todavía quedaba mucho que sudar para lograr el objetivo, porque los visitantes no han tirado para nada la toalla, pese a que en ese momento necesitaban tres dianas.
Osasuna se ha puesto en modo defensivo y ha aguantado las acometidas catalanas, que han sido varias, hasta que Reinier –ha salido reemplazando a un enfadado Castellanos– ha peinado de cabeza el 2-1 tras falta lateral en el minuto 75.
Todo un cuarto de hora por delante, si bien los resultados en otros campos favorecían los intereses rojillos. Por si acaso, Arrasate ha decidido que era necesario fortalecer el medio campo y ha dado entrada a Moi Gómez y Pablo García para el tramo final.
A partir de ahí, poco más se ha jugado. El Girona ha inquietado con un testarazo arriba de Stuani, pero el triunfo se ha quedado en un Sadar que ha festejado a la conclusión del choque la gran temporada que ha protagonizado.
Ficha técnica:
Osasuna: Aitor Fernández; Rubén Peña, Aridane, David García (Juan Cruz, m. 6), Manu Sánchez; Lucas Torró, Moncayola (Moi Gómez, m. 84), Aimar Oroz; Kike Barja (Rubén García, m. 70), Budimir (Chimy Ávila, m. 69) y Abde (Pablo Ibáñez, m. 84).
Girona: Gazzaniga; Arnau, Bernardo (Couto, m. 64), David López, Miguel (Javi Hernández, m.86); Tsygankov, Iván Martín, Oriol Romeu, Herrera (Aleix García, m. 58), Riquelme (Stuani, m.59); y Castellanos Reinier, m. 64).
Goles: 1-0, m.52: Budimir. 2-0, m.55: Budimir. 2-1, m.75: Reinier.
Árbitro: Órtiz Arias (Comité madrileño). Mostró amarilla a Moncayola, por parte de Osasuna, y a Herrera, Bernardo, Gazzniga y Couto, por el Girona.
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima octava y última jornada de LaLiga Santander disputada en el estadio El Sadar ante 22.128 espectadores.
Fiesta final
Ni un alma se ha movido del estadio iruindarra para festejar una clasificación europea ganada a pulso, jornada a jornada, gracias a una enorme regularidad y a ser un bloque muy competitivo.
Además del habitual cántico final en común entre plantilla y grada –esta última también se ha acordado de recientes glorias rojillas como Oier y Puñal–, a ello le ha seguido una fiesta en la que todo el plantel y cuerpo técnico ha sido presentado uno por uno, incluido Roberto Torres, en un bonito detalle del club hacia el mago de Arre.
Emocionado por todo lo conseguido a lo largo de la campaña, el director deportivo osasunista, Braulio Vázquez, ha reconocido que se han cumplido todos sus sueños: ascender a Primera, jugar una final copera y ahora disputar competición europea.
Ha asegurado que «nuestras estrellas están ahí adentro (ha señalado el vestuario) y todo lo hemos conseguido gracias a vosotros. Lo dejo caer, la final de la Conference es en Atenas», afirmación a la que ha sobrevenido la atronadora aprobación de la grada.
Y, como no podía faltar, el preparador osasunista, Jagoba Arrasate, ha querido poner el colofón con un bertso. Antes, ha recordado que en la previa de la final copera, «muchos equipos querían que ganase el Real Madrid para poder optar a la séptima plaza, pero nos ha hemos quedado nosotros», ha elevado el tono entre el júbilo del personal.
Para concluir, lo dicho. El tradicional bertso del míster de Berriatua que ha finalizado con la consigna de que ahora toca defender el escudo de Osasuna por Europa.
«Hemos vivido momentos mágicos»
Ya en sala de prensa, el entrenador vizcaino ha recordado que «hemos vivido momentos mágicos en Copa y en Liga, también. Va para todos los rojillos, esa afición tan fiel», ha expresado.
Así, ha destacado la «ilusión» que se ha generado este curso entre el osasunismo. «Por suerte, y con la ayuda de la afición, lo hemos sacado adelante. Estamos súper orgullosos y felices de meternos en Europa. Para nosotros es muy grande», ha afirmado sobre la clasificación para la Conference League.
Y una de las causas de este éxito ha sido que «es evidente que en casa hemos mejorado. Los objetivos se consiguen en casa y hemos dado un paso. Estoy contento porque la afición ha podido disfrutar del equipo».
Sobre la tercera competición continental ha indicado que le hace «mucha ilusión defender este escudo por Europa, pero tenemos que pasar una previa. Tenemos la Liga, la Copa, la Supercopa... Muchos estímulos por delante».
Interpelado sobre si Osasuna ha llegado a su límite competitivo, Arrasate ha señalado que «jugar una final de Copa, jugar Europa... No sé si hemos tocado techo, pero estaremos rozándolo si no lo hemos tocado», se ha sincerado.