Cine para la convivencia; Ángeles Cruz, premio honorífico de Zinegoak
La actriz y directora mexicana Ángeles Cruz, premio honorífico del festival de cines y artes escénicas LGTBIQ+ de Bilbo, Zinegoak, ha reivindicado el cine como herramienta para construir convivencia y comunidad, frente a «la competencia del cine tradicional».
La directora mexicana Ángeles Cruz recibirá este lunes el premio Zinegoak de honor durante el acto de inauguración que dará el pistoletazo de salida a la vigésima edición. Antes de recibir el galardón, ha comparecido ante los medios de comunicación, donde ha agradecido «el honor de recibir el abrazo de la comunidad de Zinegoak», que trata de «abrir camino a la diversidad».
Los organizadores del festival han valorado «el compromiso social, artístico y político de Cruz», que habla en sus películas de la migración, la pobreza y las comunidades indígenas, y «su valentía» para presentar referentes LGTBI+ y otros temas que no suelen reflejarse en el cine convencional.
Cruz, Premio Ariel de la Academia Mexicana de Cine, obtuvo el año pasado el premio Lesbianismo y género del festival bilbaino por el film ‘Mixteco’, nombre de la lengua de su comunidad.
Ha explicado que procede de una comunidad indígena conformada por unas 300 personas, en la alta montaña de Villa Guadalupe Victoria, San Miguel el Grande, Oaxaca, al sur de México, «un país sumamente racista y clasista», y que comenzó como actriz y le tocó interpretar personajes «muy estereotipados» que le hacían sentir «como con una camisa de fuerza», porque no se sentía representada y no veía en ellos su cultura.
Por ello, escogió dirigir su propia película para contar un abuso a una persona cercana a su familia. Sintió entonces «la necesidad de contar esa historia» y, siempre desde la ficción, plasmar otras reflexiones sobre la vida de su comunidad, que «se rige por propios sistemas normativos», donde no hay propiedad privada de la tierra sino que es comunal, y las decisiones fundamentales se toman en asamblea la asamblea.
Cruz pide permiso a su comunidad para reflejar su vida social y en sus filmes participan sus vecinos, por lo que son fruto de «un trabajo colaborativo» con actores del mismo pueblo y casi el 80% de la comunidad ha salido en sus producciones.
«El cine tiene que ser de esa manera. Nos han enseñado que el cine es competencia y que hay que pasar por encima de otra persona para poder crear, pero yo pienso que es convivencia y colaboración», ha opinado.
El festival Zinegoak comenzará con la gala de inauguración que se celebrará en el Teatro Arriaga, aunque ya han empezado las primeras proyecciones y actividades vinculadas con esta edición, que se clausurará el 3 de julio en Bilborock, donde se dará a conocer el palmarés del festival.