La mano derecha del lehendakari seguirá diseñando y controlando las encuestas
PNV y PSE, siguiendo el criterio del Gobierno de Urkullu, han rechazado siquiera debatir la proposición de ley de EH Bildu para crear un Centro de Estudios de Opinión como organismo autónomo que actúe con independencia y neutralidad y que no dependa, como ahora, de la mano derecha del lehendakari.
Ni han permitido el debate de la proposición de ley ni han sido capaces de debatir con su impulsor. PNV y PSE han impedido la tramitación de la creación del Centro de Estudios de Opinión propuesta por EH Bildu, pero además se han limitado a votar y utilizar su turno de explicación de voto, que impide que haya ningún tipo de réplica.
EH Bildu había propuesto crear un Centro de Estudios de Opinión como organismo autónomo que actúe con independencia y neutralidad, y que sustituiría al actual Gabinete de Prospecciones Sociológicas, que depende directamente de la mano derecha del lehendakari, su secretario general de Coordinación y Comunicación Social, Manu Castilla.
Pese a que en 2007 el Parlamento pidió por unanimidad y a instancias del PSE la elaboración de una ley que regulara el funcionamiento de este Gabinete de Prospecciones Sociológicas, ahora ni este partido ni sus socios del PNV lo considera necesario. A su entender, todo va bien.
Sin embargo, para el parlamentario de EH Bildu Josu Estarrona no es normal que un ente de esta importancia no esté regulado por ley ni tenga una normativa, no esté regido por un consejo plural como es habitual en este tipo de organismo, no sea neutral y sea un cargo cercano al lehendakari quién decida qué preguntas se hacen o cuáles son las que no hay que hacer, que no sea imparcial en cómo se formulan esas preguntas y cómo se publican los resultados y que únicamente estén disponibles los informes finales en PDF sin fichero de datos y microdatos, sin opendata y sin ningún formato para poder operar con ellos.
Además, Estarrona ha denunciado que el criterio desfavorable del Gobierno se base en afirmaciones que no son ciertas, como que existe una planificación anual que se da a conocer al Parlamento cuando se presentan los presupuestos, que se remiten a los grupos con anterioridad a ser publicados y que todos los datos están a disposición de quien quiera analizarlos. A eso añade que, pese a lo que dice el Ejecutivo sobre la buena valoración del trabajo del Gabinete, no hay ningún criterio para su evaluación. Como tampoco hay ningún estudio que determine que la creación del Centro de Estudios de Opinión «multiplicaría el gasto».
Todos los grupos de la oposición han criticado el funcionamiento del Gabinete de Prospecciones Sociológicas. Sin embargo, los del Gobierno están satisfechos.