Un poderoso Pello Bilbao remata en la llegada de Issoire y se coloca quinto en la general
Pello Bilbao (Bahrain) ha tenido unas magníficas piernas para imponerse en una quebrada y calurosa jornada por tierras del Macizo Central y, de paso, cobrar una cuantiosa ventaja que le permite hacerse con la quinta plaza en la general, también gracias a la bonificación de su triunfo.
Pello Bilbao ha ganado la décima etapa del Tour entre Vulcania e Issoire, con más de 3.000 metros de desnivel en 167,2 kilómetros. El vizcaino ha querido ser protagonista desde el inicio y no ha parado hasta entrar en una escapada que le ha permitido llegar el primero a meta con 2:53 respecto al grupo de los favoritos para colocarse quinto en la general, a 4:34.
Jonas Vingegaard sigue líder con 17 segundos de ventaja sobre Tadej Pogacar después de estar muy activos en un comienzo de etapa espectacular.
Tras la primera jornada de descanso, la etapa en el Macizo Central presentaba terreno para la batalla desde el inicio y corredores importantes se han movido desde la primera cota de Tercera al atacar Romain Bardet y marcharse con él Pello Bilbao para buscar un corte en el que estaba Ion Izagirre.
Ello ha llevado a Vingegaard y a Pogacar a reaccionar para quedarse por delante con 50 segundos de ventaja a un pelotón en el que Ineos y Bora han tenido que trabajar para defender la posición de Carlos Rodríguez y Jai Hindley hasta que han conseguido unirse a los de adelante.
Los ataques han continuado y en la segunda cota, el col de Guéry, se han quedado en el primer grupo apenas una treintena de corredores con 1:35 a un segundo en el que se habían quedado dos de los diez primeros se la general, David Gaudu y Romain Bardet, a 140 kilómetros de meta.
Pello Bilbao ha insistido y se ha marchado con Skjelmose (Trek), Chaves (EF), Asgreen (Soudal), Barguil (Arkéa), Zimmermann (Intermarché) y Schultz (Israel), perseguidos por otro septeto con Alaphilippe (Soudal), Neilandts (Israel), Tejada (Astana), Pedrero (Movistar), O’Connor (Ag2r), Perez (Cofidis) y Kwiatkowski (Ineos).
Jumbo les ha dado permiso para formar la escapada y eso ha permitido volver a Gaudu y Bardet, pero han trabajado por detrás para que la fuga no cogiera mucha distancia.
La subida más dura de la jornada ha permitido a O’Connor cazar a los de adelante y Asgreen se ha descolgado para ayudar a Alaphilippe y ha conseguido que los dos grupos de escapados se unieran a 85 de meta.
La fuga ha tenido más de tres minutos de ventaja a 75 kilómetros para la conclusión, lo que permitía a Pello Bilbao ubicarse en el quinto puesto e incluso amenazar la cuarta plaza de Carlos Rodríguez.
A partir de ahí, la renta ha ido descendiendo –el pelotón ha recortado casi un minuto en 20 kilómetros– y los dos clasicómanos Van Aert y Van der Poel se han adelantado al grupo principal en la larga bajada previa al último obstáculo de la jornada, Chapelle Marcousse, una cota de Tercera, aunque el intento ha sido baldío.
Neilandts lo pone difícil
Como cabía esperar, en este puerto –6,5 kilómetros al 5,6% de media– se han desatado las hostilidades en la fuga, imponiendo el Israel, con Neilandts y Schultz, un ritmo que ha ido dejando cadáveres a las primeras de cambio, como Kwiatkowski, entre otros.
Mediada la subida y mientras corredores importantes se han ido quedando atrás –Barguil y Alaphilippe–, Neilandts ha demarrado cobrándose una más que interesante ventaja, que se ha marchado a los casi 40 segundos en la cima.
La rápida ascensión también ha permitido que la brecha se hiciese más grande respecto al pelotón, lo que aupaba en esos momentos a la cuarta posición de la general a un Bilbao que ya mostraba muy buenas piernas.
De hecho, el gernikarra ha liderado el descenso para reducir la distancia con Neilandts, al que han cazado a falta de tres kilómetros para meta, a la par que Ineos se ha hecho con la cabeza del grupo principal para salvar el cuarto puesto de Carlos Rodríguez.
O`Connor y Zimmermann han intentado sorprender en el tramo final, pero un poderoso Pello Bilbao ha saltado para abortar ambos ataques y se ha impuesto con autoridad en la llegada de Issoire.
La undécima etapa de este miércoles presenta una nueva opción a los sprinters, con 179.8 kilómetros entre Clermont Ferrand y Moulins, que solo presentan tres cotas de cuarta categoría.