INFO

‘Maestro’, la batuta genial y compleja de Leonard Bernstein

Netflix reveló las primeras secuencias el nuevo filme dirigido y protagonizado por Bradley Cooper, ‘Maestro’. Aborda la obra y vida del compositor y activista de izquierdas Leonard Bernstein e incide en la relación que compartieron el autor de ‘West Side Story’ y su compañera, Felicia Montealegre.


Tras la excelente experiencia que supuso para Bradley Cooper rodar su remake de ‘Ha nacido una estrella’, el cineasta y actor estadounidense ha vuelto a alternar ambos lados de la cámara en su nuevo proyecto, ‘Maestro’.

Apadrinada por Netflix, se trata de un biopic que relata la compleja figura del mítico compositor Leonard Bernstein –interpretado por el propio Cooper– y que centra buena parte de su interés en abordar la relación que compartió con su compañera sentimental, Felicia Montealegre –encarnada por Carey Mulligan–.

El guion de lleva la firma de Josh Singer (‘Spotlight’), con Martin Scorsese, Steven Spielberg, Fred Berner, Amy Durning y Kristie Macosko Krieger en la producción junto a Cooper.

El elenco de la película también suma a Maya Hawke, quien interpreta a la hija de Montealegre y Bernstein, Jamie, mientras que Sarah Silverman interpreta a la hermana del compositor, Shirley. Michael Urie es el bailarín y coreógrafo Jerome Robbins.

De Scorsese a Cooper

Inicialmente, Scorsese figuraba como director de este proyecto, pero optó por rodar ‘The Irishman’. No obstante, se mantuvo unido a ‘Maestro’ como productor, junto a Todd Phillips y Steven Spielberg.

Bradley Cooper reveló que fue Spielberg quien lo sumó a esta aventura: «Quería ser director de orquesta desde que era un niño. Estaba obsesionado con eso, le pedí a Santa Claus una batuta cuando tenía 8 años. Siempre supe que Spielberg sabía que yo tenía esta obsesión por dirigir. Tenía esta idea biográfica y me estaba hablando sobre la posibilidad de actuar en ella. Pero acababa de trabajar en ‘Ha nacido una estrella’. Y dije: ‘Escucha, todo lo que quiero hacer es escribir y dirigir películas. Siempre sentí que podía interpretar a un director, pero ¿puedo investigar el material y ver si puedo escribirlo y dirigirlo? ¿Me dejarías hacer eso?’». Su estreno está previsto para el 22 de noviembre de 2023 y el 20 de diciembre llegará a Netflix.

Bradley Cooper y Carey Mulligan encarnan a Leonard Bernstein y Felicia Montealegre. (NETFLIX)

Homosexual

Bernstein y Montealegre se casaron en la década de los 50. Tuvieron tres hijos y después de compartir muchos años de vida en común, el compositor le dijo a ella que necesitaba vivir su verdadera vida y que no quería seguir ocultando su homosexualidad.

Sobre todo ello, el dramaturgo Arthur Laurents dijo que «Lenny era gay, un gay que como tantos en esos años se casó. No tenía conflicto con su sexualidad. Era, sencillamente, gay».

Bernstein era judío y comunista y, sumado a su condición de homosexual, lo colocaba en una situación compleja. Encontró en la actriz y cantante de origen chileno una gran complicidad. Se sabe que ella siempre supo de la homosexualidad de él pero que nunca le importó.

En una de sus cartas, ella le escribió: «eres homosexual y nunca vas a poder cambiar. No admites la posibilidad de una doble vida, pero ¿qué puedes hacer si tu tranquilidad, tu salud, tu sistema nervioso, todo, depende de un cierto patrón sexual? ¿Qué puedes hacer? Estoy dispuesta a aceptarte como eres, sin ser una mártir. Probemos, veamos qué sucede si eres libre de hacer lo que quieras pero, por favor, sin culpas ni confesión. Nuestro matrimonio no se basa en la pasión. Se basa en la ternura y el respeto mutuo».

El matrimonio duró más de dos décadas. Bernstein se separó en 1976. Por aquellos días estaba enamorado de un joven músico llamado Tom Cochcran. Un año después, Montealegre fue diagnosticada con un cáncer de pulmón avanzado y en cuanto Bernstein se enteró, volvió a su lado para velar de cerca su convalecencia y agonía, hasta su fallecimiento en 1978.

Comunista

En 1949, fue señalado por el senador McCarthy como amigo de los comunistas junto a Arthur Miller o Albert Einstein, entre otros muchos.

Investigado y perseguido durante la llamada ‘caza de brujas’ por su ideario, apoyó a lo largo de los años las más diversas causas políticas asociadas a la izquierda. Fue una de las voces que se alzó contra el racismo y en favor del movimiento por los derechos civiles, apoyó a grupos revolucionarios, recaudó fondos para organizaciones políticas, ofreció recitales benéficos y firmó cuantas solicitadas y declaraciones pudo.

Bernstein dedicó su ‘Sinfonía Kaddish’ a JFK, algo que no le sentó especialmente bien a Nixon, que lo definió como la personificación de la ‘completa decadencia de la élite intelectual’ estadounidense.

Nixon no acudió a la inauguración del Kennedy Center, donde se estrenaba ‘Mass’, de Berstein, ya que le advirtieron que se cantarían textos contra la guerra de Vietnam. Tal y como recogen los audios destapados por el ‘Caso Watergate’, el colérico presidente norteamericano no dudó en calificar al compositor como ‘son of a bitch’.

El músico contraprogramaba conciertos en fechas señaladas para el político y se involucró con agrupaciones y acciones como el Comité Americano para el alivio Yugoslavo, el Congreso por los Derechos Civiles o el Partido de las Panteras Negras de Autodefensa, entre otros.

Además de compositor y director, Leonard Bernstein era un gran divulgador.
Además de compositor y director, Leonard Bernstein era un gran divulgador. LEONARD BERNSTEIN ARCHIVE

Genio

A principios de 1949, Jerome Robbins concibió la idea de actualizar la obra ‘Romeo y Julieta’ de Shakespeare con un Romeo judío y una Julieta católica, y la compartió con Bernstein y con el dramaturgo Arthur Laurents.

El 25 de agosto de 1955 y mientras acompañaba a Laurents en California, leyeron algo sobre las pandillas mexicanas en Los Ángeles y se percataron de que las guerras entre pandilleros puertorriqueños y jóvenes blancos del West Side de Manhattan podrían servir de telón de fondo a su proyecto.

Los creadores de este musical imperecedero tenían claro que su ‘West Side Story’ debía reflejar la cara menos afable del sueño americano. Un fresco social en el que se ponían de manifiesto las diferencias sociales y raciales. Se convirtió en el primer director de orquesta estadounidense de fama y reconocimiento mundial.

Dirigió la Orquesta Filarmónica de Nueva York desde 1944 hasta su muerte, las Filarmónicas de Viena e Israel y la Sinfónica de Boston, entre muchas otras. Era extrovertido y entusiasta en sus gestos. Su interpretación, considerada abiertamente subjetiva y de tradición romántica, producía excelentes resultados con la música de Liszt, Mahler y Shostakovich.

Asimismo, fue un gran divulgador de la nueva música estadounidense incorporando en sus conciertos a Copland, Gershwin e Ives. Como educador confeccionó una serie de clases (‘La pregunta sin respuesta’) sobre la evolución de la música occidental que impartió en Harvard, y en televisión ofreció los programas ‘Conciertos para jóvenes’ y una serie en la que dirigía la Orquesta de Viena y comentaba acerca de la música de Beethoven.

Creativamente era prolífico y telúrico y en cierta ocasión dijo «yo no quiero ser como Toscanini que se pasó la vida estudiando y perfeccionando 50 obras. Me moriría del aburrimiento. Yo quiero dirigir. Tocar el piano. Escribir para Hollywood. Seguir siendo un músico en el más maravilloso de su significado. También quiero enseñar. Y escribir libros y poesía. Y creo, de verdad, que puedo hacer todo eso bien».