Una concentración en Bilbo denuncia la «inacción de los gobiernos» reunidos en la COP28
Una concentración en Bilbo ha exigido adaptarnos a la crisis climática, al tiempo que han denunciado la «inacción de los gobiernos» reunidos en la COP28 de Dubai. Han reivindicado la necesidad de cuidar del agua como bien público escaso y de la salud de las personas en ciudades habitables.
Varias decenas de personas se han concentrado este sábado al mediodía en la plaza del Arriaga, en Bilbo, para denunciar la «inacción de los gobiernos» que estos días se reúnen en Dubai en la COP28 contra la emergencia climática.
En el transcurso de la movilización, convocada por diversos agentes sociales, activistas han realizado una pequeña parodia en la que representantes de diferentes países han jugado con el futuro del planeta mientras los participantes en la protesta se han situado detrás de una pancarta con el lema 'Krisi klimatikoaren aurreran; COP28 ¡Soluciones y no declaraciones!'.
En el manifiesto leído, han apostado por la justicia climática. «Cuando millones de personas se ven obligadas a abandonar sus hogares, tenemos que luchar por sus derechos en todo el mundo, y destinar fondos internacionales suficientes a la adaptación y a las pérdidas y los daños de los países y comunidades más vulnerables», han defendido, precisando que esos fondos «en ningún caso», deberían agravar la deuda de los países del sur
Los convocantes han reclamado la necesidad de adaptarnos a la crisis climática creando ciudades resilientes y habitables, «en lugar de islas de calor y asfalto dónde el poco arbolado urbano que existe se sigue talando en pos de proyectos urbanísticos propios de otro siglo».
Cuidar del agua y la salud
Se ha reivindicado la necesidad de cuidar del agua como un bien público escaso. «Conforme la sequía se convierte en un problema cotidiano para la ciudadanía y la agricultura, debemos apostar por una adecuada gestión y tratamiento del agua urbana, por cultivos de temporada, locales y poco intensivos», han abogado.
Asimismo, han incidido en la necesidad de cuidar de la salud de las personas, «disminuyendo la contaminación atmosférica que cada año mata a más de 44.000 personas solo en el Estado español y apostar por una sanidad pública y de calidad».
Piden también reforzar el transporte público, impulsar las zonas de bajas emisiones y un modelo ferroviario «que vertebre el territorio y enfríe el planeta».
Además, han exigido promover un sistema de reducción, reutilización y reciclaje de residuos, y elaborar un plan de cierre progresivo de las incineradoras, «contaminantes y casualmente colocadas cerca de los barrios más populares».