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Netanyahu sugiere una operación a gran escala también en Cisjordania

Tensando la impunidad de la que goza, el  primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, tiene claro que su objetivo es prolongar la agresión a Palestina al máximo y estudia incluso llevar a cabo una operación a gran escala en Cisjordania, donde los ataques a la población an acercando ese escenario.

Un padre llora la muerte de su hija, Sidal, muerta por un bomba israelí en Rafah. (Mahmud HAMS | AFP)

Las declaraciones de Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí, rechazando que Hamas o la Autoridad Palestina puedan gobernar Gaza y sugiriendo que, tras devastar la Franja, puede extender una operación a gran escala a toda Cisjordania, confirman que «su guerra es contra todos los palestinos», denunció el secretario del Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Husein al Sheij.

La radio pública israelí señaló que el Gobierno de Netanyahu no descarta aumentar la actual agresión en Cisjordania, que ha provocado ya 290 muertos desde el 7 de octubre, y pasar de las razzias en las ciudades y campos de refugiados a una operación militar de envergadura e incluso a una confrontación con la Autoridad Palestina (AP).

Según este medio, Netanyahu está haciendo planes para esa posible confrontación, afirmando que tanto Hamas como la AP buscan la destrucción final de Israel y solo les diferencia que los segundos buscan hacerlo «por etapas».

Nabil Abu Rudeineh, portavoz de la AP, consideró que esto muestra la premeditada decisión de atacar Cisjordania y continuar la «guerra total» que lleva a cabo en Gaza.

Para Abu Rudeineh, Netanyahu busca una «guerra sin fin en la región» que amenaza la paz y la seguridad internacional. Más aún cuando esa guerra es para Netanyahu su último salvavidas político en Israel.

Para Hamas, las declaraciones muestran que quiere consolidar la ocupación, «especialmente sobre Jerusalén y la Mezquita de Al Aqsa» y no está interesado en ningún acuerdo político, por lo que pidió a la AP que rechace los Acuerdos de Oslo de 1993 y la colaboración en materia de seguridad con Israel y se pase a la resistencia armada.

Seis muertos más

Israel ya mantiene a Cisjordania bajo un estado de guerra permanente. Al menos seis palestinos murieron ayer por un ataque con un dron israelí en la ciudad de Jenin, en el norte de Cisjordania, lo que eleva el total de fallecidos en este territorio a casi 490 desde que comenzó al año. «Fuad Imad Abahra, de 36 años, murió después de que la ocupación impidiera a la ambulancia transportarlo al hospital durante media hora tras resultar herido en el muslo, mientras que el niño Ahmed Samar, de 13 años, falleció porque la ocupación impidió su llegada al hospital», denunció el Ministerio de Sanidad palestino.   
Las incursiones de fuerzas israelíes y los enfrentamientos con palestinos en localidades de Cisjordania o barrios de Jerusalén se repiten casi a diario este año y se ha intensificado aún más desde el 7 de octubre. Desde esta fecha, han matado a 281 palestinos, incluido más de 70 menores, pero también nueve han muerto a manos de colonos, protegidos por los militares.

Los ataques israelíes por tierra y aire en Jenin y Tulkaremn se acercan al escenario previsto por Netanyahu.

A la vez, los palestinos arrestados superan los 3.500 desde el 7 de octubre. Ayer, fueron otros 50 los detenidos en  Cisjordania.

Los planes para continuar la guerra y extenderla a Cisjordania ratifican además que los objetivos van más allá de «acabar con Hamas y rescatar a los rehenes».

Y las «diferencias» al respecto con su valedor, EEUU, no son obstáculo para frenar a Israel. Washington quiere que la operación en Gaza acabe antes de fin de año para aliviar la presión internacional, y también cuestiona el rechazo de Netanyahu a que la AP controle el enclave tras la ofensiva.

Netanyahu agradeció el pleno apoyo del Gobierno de Joe Biden a las masacres de Gaza, pero reconoció «un desacuerdo cuando se trata del ‘día después de Hamas’». «Espero que lleguemos aun acuerdo sobre esto también», manifestó. «Gaza no será Hamastán ni Fatastán», insistió apuntando de nuevo a una reocupación del territorio o una «limpieza étnica».

El «día después» puede llegar a una Gaza totalmente arrasada. El jefe de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa), Philippe Lazzarini, desde el sur de la Franja, calificó la situación de «un infierno en la tierra». «La gente está en todas partes, vive en la calle, necesita de todo. Suplican por seguridad y por el fin de este infierno en la tierra», denunció.

Alrededor de 1,9 millones de personas –más del 85% de la población en la Franja de Gaza– han sido desplazadas una o más veces debido a las operaciones militares de Israel por aire, mar y tierra.
De estos, casi 1,3 millones de desplazados internos se refugian en 154 instalaciones de Unrwa, que también son objetivo de los bombardeos.

Según el primer ministro palestino, Muhamad Shtayé, Israel intenta hacer que la Franja de Gaza sea «un lugar inhabitable», a la vez que el Estado ocupante mantiene sobre la mesa un plan de desplazamiento forzoso de población e intenta empujar a la población hacia la frontera con Egipto.

«El que sobrevive a los bombardeos muere de hambre y el que sobrevive al hambre muere enfermo y sin tratamiento», denunció.

Biden admite que Israel está perdiendo apoyo

El presidente de EEUU, Joe Biden, admitió ayer que Israel está perdiendo apoyo por los bombardeos de la Franja de Gaza y opinó que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, debería cambiar su Gobierno. Biden criticó que el actual Ejecutivo es el «más conservador de la historia de Israel» y lamentó que «no quiere una solución de dos Estados».

Con todo, EEUU fue el único miembro del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que votó la semana pasada en contra de una resolución que pedía un alto el fuego en Gaza, una medida que no salió adelante debido al poder de veto que tiene Washington. Y sigue mostrando su apoyo «inquebrantable» a una operación que ha matado ya a más de 18.400 personas. Ayer, la Asamblea General de la ONU debatió el alto el fuego y el veto de EEUU, retratando las posturas de sus miembros.

Entre los apoyos del Estado israelí, empiezan a surgir matices. El representante diplomático de la UE, Josep Borrell, avanzó que el bloque europeo se volvería a dividir en la votación, y «unos votarán unos a favor, otros en contra y otros se abstendrán». La votación llegó después de que el secretario general de Naciones Unidas invocara el Artículo 99 de la Carta de la ONU, alertando así al Consejo de Seguridad e instándole a presionar por evitar una catástrofe humanitaria, que fue ignorado por EEUU. En un comunicado conjunto, los primeros ministros de Canadá, Australia y Nueva Zelanda, Justin Trudeau, Anthony Albanese y Christopher Luxon, coincidieron con Israel en que «no hay lugar para Hamas en la futura gobernanza de la Franja de Gaza» pero añadieron que Israel debe «respetar la ley internacional humanitaria».

A la vez, el ministro de Exteriores de la Autoridad Palestina recibió en Ginebra el apoyo de 200 representantes diplomáticos en las celebraciones del 75 aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos de la ONU.

Puma

La firma alemana Puma dejará de patrocinar al equipo de fútbol de Israel cuando expire el actual contrato en 2024, si bien subrayó que se trata de una decisión exclusivamente comercial. Firmado en 2018, desencadenó una campaña de boicot.

Misil de Yemen

Una fragata militar francesa y el destructor estadounidense USS  ayudaron al petrolero noruego Strinda, que sufrió un ataque aéreo en el Mar Rojo por parte de los hutíes de Yemen, con un dron que causó un incendio a bordo, según el Estado Mayor francés.  Los hutíes asumieron el ataque y reiteraron que seguirán impidiendo que todos los barcos que se dirigen a puertos israelíes naveguen en los mares Árabe y Rojo.


Palestinos muestran sus identificaciones para recibir comida de la Unrwa. (Mohamed ABED/AFP)

Ospitaleen aurka jarraitzen dute

Israelgo Armadak egun batzuk zeramatzan Kamal Aduan ospitalea setiatzen eta erasotzen, Gazako Zerrendaren iparraldean. Atzo azkenean indarrez sartu zen, eta patioaren inguruan bildu zituen gizonak, horien artean ospitaleko langileak. Gazako Osasun Ministerioa beldur da ez ote diren atxiloketak edo exekuzioak gertatuko. Ospitale horretan 3.000 desplazatu inguru daude, eta Israelgo Armadaren erasoak amategia jo zuen; bi ama hil ziren.

Bestalde, Tedros Adhanom Ghebreyesus Osasunaren Mundu Erakundeko (OME) zuzendari nagusiak adierazi zuen joan den larunbatean soldadu israeldarrek bi aldiz geldiarazi zutela Al Ahli ospitaletik ebakuatzeko bidalitako konboi bat, eta Ilargi Gorriko zenbait kide atxilotu zituztela, ordu luzez galdekatu, tratu txarrak eman eta umiliatu ondoren. OMEren konboiak material mediko eta kirurgikoa garraiatzen zuen Al-Ahliko ospitalera, eta zauritu larrienak ebakuatu behar zituen. «Gure langileetako bat belaunikatzera behartu zuten pistolaz –esan zuen. Richard Peeperkorn, OMEk Palestinan duen ordezkariak–. Orduan konboiari eraso egin zioten eta, egoera kritikoan zeuden pazienteak garraiatzen zituen arren, segurtasun kontrolak egin zizkieten denei». Ondorioz, gaixo bat bidean hil zen, «zauri larriez eta tratamendua jasotzeko atzerapenagatik», deitoratu zuen Tedrosek. Eta berdin Gaza hirian ere, laguntza medikoa zeramaten kamioietako bat eta anbulantzia bat tiroka harrapatu zituzten.