La división podría dejar sin escaños al espacio de la izquierda confederal
Los partidos llamados a coaligarse para conformar una lista única de la llamada izquierda confederal aseguran que siguen trabajando con discreción. Sobre ellos pende la espada de Damocles de que presentarse por separados podría llevarles a quedarse sin ningún escaño en el Parlamento de Gasteiz.
Fuentes de los partidos que deben conformar la coalición de la izquierda confederal consultadas por este medio sostienen que siguen conversando sin descanso para tratar de llegar a un acuerdo, pero aseguran que evitarán poner fechas públicas que puedan «convertirse en hitos» y que prefieren trabajar con discreción, lo que consideran más productivo.
Estos partidos habían anunciado un encuentro el pasado viernes, del que salieron sin ningún acuerdo. La cuestión es que Podemos Euskadi tiene su propia candidata a lehendakari, que es Miren Gorrotxategi, la actual portavoz del grupo Elkarrekin Podemos-IU en el Parlamento de Gasteiz. Por su parte, Sumar Mugimendua ha propuesto a Alba García, que hasta el momento de su nominación, la pasada semana, era «liberada» de Podemos. Aunque con menor proyección, Berdeak Equo también tiene su propia «candidata a lehendakari», la exconcejal de Bilbo Carmen Muñoz.
Desde Ezker Anitza-IU han aclarado a este medio que su apuesta por Jon Hernández no es como candidato a lehendakari, sino como su principal referencia dentro del espacio común y dentro de una candidatura coral.
Ante la falta de acuerdo, tras la reunión del pasado viernes, Podemos propuso públicamente al resto un «refrendo popular», «la búsqueda de un instrumento que permita la participación de todas las personas que forman parte del espacio político, de las distintas organizaciones, en la elección de la mejor candidata». Esto tiene el problema de que según la Ley de Protección de Datos no es posible mezclar las identidades de los afiliados de cada formación y, probablemente, los resultados de una elección por separado serían muy cuestionados.
Ir por separado, peligroso
La espada de Damocles que pende sobre los negociadores es que en caso de no llegar a un acuerdo y el espacio se dividiera en dos candidaturas, como ha ocurrido en Galiza, podrían quedar todos fuera del Parlamento autonómico.
Es una cuestión de números. Por un lado, la ley electoral establece que para que una candidatura obtenga representación por un territorio debe superar el 3% del voto.
Aunque esta es una condición necesaria, pero no suficiente. Por ejemplo, en 2009, Eusko Akartasuna obtuvo el 3,41% de los votos en Araba, y aun así se quedó sin escaño. Lo mismo le pasó el mismo año a Ezker Batua en Araba (3,31%) y Bizkaia (3,41%). Más recientemente, en 2016, Ciudadanos se quedó fuera del Parlamento pese a haber sumado un 3,17% del voto en Araba.
En las pasadas elecciones forales del 28 de mayo, la coalición formada por Podemos, Ezker Anitza-IU, Berdeak Equo y Alternativa Verde, apoyada por Yolanda Díaz, es decir, todo el espacio junto y unido, consiguieron el 6,97% del voto en Araba, el 7,25% en Bizkaia y el 6,47% en Gipuzkoa.
No es difícil pensar que, por un lado, parte del electorado que en mayo optó por la coalición, podría castigar su división y las luchas intestinas que ya se observan, con acusaciones de deslealtad entre las formaciones. Si hubiera una facción claramente victoriosa, podría andar entre el 4% y el 5%. Pero si la división es más ajustada, ambas partes podrían quedarse sin representación. Ya les ocurrió a Izquierda Unida, Ezker Batua-Berdeak y Equo, que se presentaron por separado en 2011 y se quedaron fuera de la Cámara, aunque juntos hubieran sumado el 5,25% del voto.
¿Qué bloques?
Parece evidente que hoy por hoy hay dos núcleos dentro de este espacio. Por un lado, está Podemos Euskadi, que reivindica tener la mayor base militante de los partidos llamados a conformar la coalición. Por el otro, está Sumar Mugimendua, que reivindica su papel de «fuerza tractora del espacio», ya que forma parte del Gobierno español de coalición.
Los otros dos partidos piden que no se les ponga en la disyuntiva de tener que elegir entre unos y otros, alegando que finalmente se llegará a un acuerdo. Pero es posible que esto no ocurra.
Ante esa posible eventualidad, hay que recordar que Ezker Anitza es parte de Izquierda Unida, que es una de las fuerzas constituyentes de Sumar en el ámbito estatal. Y la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, es miembro de la ejecutiva federal de IU, como el vasco Iñigo Martínez.
En cuanto a Berdeak Equo, cabe señalar que su coportavoz y candidato a lehendakari en 2020, Joserra Becerra, ha sido nombrado director general de Derechos de los Animales del Gobierno español en los últimos días de diciembre, con lo que cabe prever la lealtad de este partido a Sumar, más aún cuando en las anteriores elecciones autonómicas acusaron directamente a Pablo Iglesias de haberlos vetado para la coalición Elkarrekin Podemos.
Monedero entra en liza
En este contexto, Radio Euskadi entrevistó ayer a Juan Carlos Monedero con motivo del décimo aniversario del nacimiento de Podemos en el Estado español, y no se mordió la lengua a la hora de hablar de la situación en la CAV.
Mientras apuntaba que la actual coordinadora de Podemos en Euskadi tiene una actitud «dialogante», aseguraba que «Sumar vuelve a equivocarse. Sumar apuesta por los caminantes blancos, con gente que perdió en Podemos, se fue enfadadísima, y que los dioses me perdonen, pero tengo la sensación que donde van rompen las cosas». Y añadió que «entonces, claro, Lander [Martínez] llega a Euskadi y cree que, porque es el lugarteniente de Yolanda Díaz, puede imponer sus modos, maneras y sus decisiones. Dices, oiga, que aquí lleva a la gente trabajando una larga temporada».
En cuanto a si Podemos podría aceptar que Miren Gorrotxategi no fuera la candidata, Juan Carlos Monedero afirmó que «las bases no lo van a tolerar» y recordó que están muy enfadadas. «Sumar –dijo– tiene las dificultades de aceptar primarias porque no tiene a nadie detrás. Te llevan a callejones sin salida. Y estamos repitiendo ese escenario terrible, de muchas fuerzas pequeñitas de la izquierda, que prefieren ser cabecita de ratón a ser cola de león», concluyó.
El PNV prepara un acto de remontada en Durango
El PNV llama a su afiliación a asistir al acto de presentación de las candidatas y los candidatos que integrarán las listas jeltzales en las elecciones autonómicas y europeas, que se celebrará el sábado 27 de enero en Durango con el lema ‘Landako, hemen hasiko da dena’. El PNV anunció ayer que Imanol Pradales Gil y Bakartxo Tejeria Otermin han superado la segunda vuelta como candidato a lehendakari y a presidenta del Parlamento Vasco, respectivamente.
Concluida la segunda vuelta el pasado domingo, y a falta de la recepción de los últimos resultados, la Comisión Nacional de Garantías y Control ha constatado hasta el momento un apoyo unánime a las candidaturas de Pradales y Tejeria.
Ahora será el turno de las asambleas territoriales. Gipuzkoa celebrará la suya mañana, 18 de enero; le seguirá Nafarroa al día siguiente, viernes 19 (en este caso, solo para las elecciones al Parlamento Europeo); Bizkaia la organizará el próximo martes, 23 de enero; y Araba cerrará el turno el miércoles 24 de enero.
Asamblea y acto electoral
El proceso interno lo cerrará de forma definitiva la Asamblea Nacional, que se reunirá en Landako (Durango) el sábado 27 de enero. Ese día, el máximo órgano soberano del PNV deberá validar o rechazar no solo las candidaturas de Pradales y Tejeria, sino también la composición de las listas de los tres territorios, con un orden de salida propuesto previamente por el Euzkadi Buru Batzar, así como de la lista para las elecciones europeas del 9 de junio.
Ese mismo sábado, también en Landako (Durango) y a partir de las 12:00 horas, el PNV celebrará el acto de presentación de todas las candidatas y candidatos que concurrirán a los comicios vascos y europeos de 2024.