Etxeberri y Molle reclamarán su exculpación porque «la acción de Luhuso fue legítima»
Txetx Etxeberri y Béatrice Molle serán juzgados los días 2 y 3 de abril en el Tribunal Correccional de París. «Asumiremos completamente lo que hicimos en Luhuso, porque fue una acción legítima y necesaria, como lo demuestra lo avanzado por la paz desde entonces».
Jean-Noel 'Txetx' Etxeberrri y Béatrice Molle asumirán ante el Tribunal Correccional de París el acto para favorecer el desarme de ETA que llevaron a cabo el 16 de diciembre de 2016 en Luhuso, con el concurso de otras tres personalidades ya desaparecidas.
«Sabíamos que era ilegal, pero también que actuábamos por el bien del país, y que nuestro acto era legítimo», ha declarado Molle, mientras que Etxeberri se apoyaba en los acontecimientos ocurridos después de la acción de Luhuso, que les costó su arresto por la Policía francesa y, tras recobrar la libertad, una espera de siete años hasta el juicio.
Etxeberri ha citado la Jornada de Desarme, la apertura de un espacio de diálogo sobre la política penitenciaria con el Ministeriio de Justicia francés y, finalmente, la desaparición de ETA como hitos principales para proclamar que «la acción que llevamos a cabo permitió una aceleración en el tiempo y hoy, todos podemos ver que este país está en una situación mejor».
La presidenta de Bake Bidea, Anaiz Funosas, ha destacado en la conferencia de prensa, celebrada en un céntrico hotel de Baiona, que quieren utilizar el proceso de París para dar un nuevo impulso a las tareas pendientes en la construcción de la convivencia, y ha remarcado la calidad y diversidad de los apoyos recibidos por la campaña puesta en marcha para «pedir la absolución definitiva de Txetx y Béatrice».
«Si tuviéramos que volver a hacerlo, haríamos todo lo que hicimos», ha remarcado Funosas.
Ahern, Adams, Kasrils, Taubira, Cárdenas...
Jean-Daniel Elixiri, en nombre de Artesanos de la Paz, ha sido el encargado de leer los nombres de esos primeros firmantes de la declaración de solidaridad con los dos procesados.
En esa lista figuran personalidades tan destacadas como el exprimer ministro irlandés Bertie Ahern; el expresidente del Sinn Féin Gerry Adams; el exministro sudafricano y miembro de la Comisión Internacional de Verificación Ronnie Kasrils; el expresidente de gobierno de México DF Cuauhtemoc Cárdenas; Olivier Faure, actual secretario general del Partido Socialista francés; la exministra de Justicia Christianne Taubira; el filósofo Edgar Morin; dos lehendakaris ya retirados, Juan Jose Ibarretxe y Carlos Garaikoetxea, y uno más en activo, Jean-René Etchegaray; o Mathias Fekl, exministro de Interior francés en funciones el 8 de abril de 2017, cuando en la capital labortana se proclamó que ETA era ya una organización desarmada.
A través de la página web de Bake Bidea se podrá firmar la declaración y también apoyar económicamente la campaña, que tendrá una primera presencia física, este fin de semana en la fiesta de Laborantza Ganbara, en Ainize-Monjolose, y que ya durante el juicio, más concretamente el 3 de abril, se plasmará mediante la realización movilizaciones en «el mayor número posible de localidades vascas».
También se prevé que durante el proceso se produzcan actos de solidaridad en París.
Tanto los procesados como los representantes de Artesanos de la Paz y Bake Bidea han recordado lo ocurrido aquel 16 de diciembre de 2016 en Luhuso, concretamente en la casa de Béatrice Molle y de su marido, ya fallecido, el exdirigente jeltzale Ximun Haran, en Luhuso.
Ese día, además de Molle y Etxeberri, otras tres personalidades reconocidas y posteriormente fallecidas –quien fuera fundador del sindicato agrario ELB, Mixel Berkohoirigoin, el empresario vinícola Michel Bergouignan y el presidente de honor de la Liga francesa de Derechos Humanos, Michel Tubiana– secundaron una acción para poner fuera de funcionamiento «una decena de armas y una caja de explosivos» que fue filmada por una persona que finalmente ha quedado fuera del sumario.
Detención y oleada de solidaridad
La Policía gala procedió al arresto de los activistas de Luhuso que, sin embargo, tuvieron tiempo de avisar de la acción, que pudo ser inmediatamente mediatizada.
De hecho, en la documentación entregada a los medios de comunicación figura el documento en que los participantes en la acción de Luhuso explican su sentido y aclaran «no guardar ningún tipo de subordinación respecto a ETA».
Coincidiendo con el traslado a París de los detenidos, se produjo de inmediato una campaña de solidaridad que, según han remarcado Anaiz Funosas, puso de manifiesto que, transcurridos cinco años de la Conferencia Internacional de Aiete y de la posterior Declaración de Baiona que «imbricó directamente el proceso de paz en la dinámica territorial», en la sociedad vasca «sensibilidades políticas diversas secundaban una acción necesaria ante el riesgo patente de un bloqueo del proceso de paz».
«La acción de Luhuso buscaba avanzar hacia un desarme que centenares artesanos de la paz llevaron finalmente a cabo el 8 de abril de 2017 en Baiona», ha completado la presidenta de Bake Bidea.
«No hicimos sino asumir nuestras responsabilidades en vista que los estados no lo hacían pese que, tras cinco años desde Aiete, la voluntad de ETA de desarmarse estaba más que probada», ha apuntado, al respecto, Etxeberri, recordando que en su afán dificultar «que se cumpliera la voluntad de una mayoría social y política» del país los estados llegaron «al paroxismo de perseguir a mediadores internacionales».
Con todo, bajo el impulso de la sociedad civil, se llegó al hito del desarme, y el 3 de mayo de 2018, ETA anunció su disolución poniendo fin definitivo a medio siglo de accionar político-militar.
«Entre todos hicimos frente al inmovilismo, pero queda mucho por hacer todavía para lograr una paz justa y duradera que, huyendo del revanchismo, reconozca a todas las víctimas, facilite el retorno de las personas que siguen presas o en el exilio, sin olvidar el deber de memoria», han proclamado los participantes en la rueda de prensa.
En este sentido, tal como han resumido Molle y Etxeberri, «una simple y clara exculpación en el juicio de París sería la mejor muestra de voluntad para que Euskal Herria, que durante demasiado tiempo ha sufrido la confrontación armada pueda, superando entre todos sus consecuencias, escribir una nueva página en su Historia».
La correspondencia con ETA
En la rueda de prensa, se ha distribuido a los periodistas un exhaustivo informe en el que figuran las cartas que intercambiaron los participantes en la iniciativa para acelerar el desarme y la organización ETA.
La primera misiva, con fecha de 3 de octubre de 2016, está firmada por Michel Tubiana, Mixel Berhokoirigoin y Txetx Etxeberri, y explicita a ETA la voluntad de «participar en acciones concretas para llevar a buen fin el proceso de desarme».
El 19 de octubre, ETA responde a la misiva agradeciendo la predisposición de los activistas, aceptando globalmente su propuesta y exponiendo que «caso de que (ustedes) dispongan de los medios necesarios para su concreción y estén dispuestos a llevar adelante el procedimiento deberemos definir el método que permita su realización».
El siguiente intercambio, ya en noviembre, está destinado a concretar la acción, en el caso de los miembros de la sociedad civil, y a dar cuenta de las tareas desarrolladas para llevar a buen término el desarme, en el caso de ETA.