Nafarroa afronta los tramos más complejos de la N-121-A tras ejecutar la mitad del recorrido

Tras haber ejecutado y puesto en servicio tres de los cinco tramos de la reforma de la N-121-A, que corresponden casi a la mitad del recorrido, el Gobierno de Nafarroa afronta los más complejos, el que alberga los túneles de Belate y Almandotz, y el de Sunbilla-Bera, sin plazo de ejecución.

Con casi la mitad de su recorrido ya ejecutado, el Gobierno de Nafarroa afronta los tramos más complejos de la N-121-A, según han explicado el consejero de Cohesión Territorial, Óscar Chivite, y el director general de Obras Públicas e Infraestructuras, Pedro López, en el Parlamento navarro.

Ambos han comparecido en la Comisión de Cohesión Territorial del Legislativo a petición del PP para informar sobre las obras de la conversión de la N-121-A en una carretera 2+1 y la construcción de los nuevos túneles de Belate.

En relación a los trabajos, el consejero Chivite ha señalado que es «una obra prioritaria» con una inversión millonaria que busca «eliminar puntos negros y que responde a las demandas reiteradas de los pueblos de la zona, además de mejorar la circulación en una carretera con alta densidad de tráfico, con un alto porcentaje de vehículos pesados».

Chivite ha destacado que en los últimos tres años se han ejecutado tres de los cinco tramos planteados, lo que supone 27 de los 63 kilómetros totales, con una inversión de 46 millones de euros por el momento. Ha defendido el modelo elegido de 2+1 y ha destacado que en 2023 «no hemos tenido que lamentar algún fallecido por accidente en esta carretera».

Situación tramo por tramo

Por su parte, el director general de Obras Públicas e Infraestructuras ha detallado la situación de los trabajos por tramos. El primero, correspondiente a Arre-Olabe, está finalizado desde abril de 2022, tras una inversión de 8,4 millones en cinco kilómetros. También están finalizados los tramos entre Olabe y Lantz (12 kilómetros y una inversión de 15,5 millones) y el de Oronoz-Mugaire y Sunbilla (12,3 kilómetros y una inversión de 21,7 millones).

López ha explicado los dos tramos pendientes de llevar a cabo y que son los más complejos. El correspondiente a Lantz-Oronoz Mugaire es el que alberga el desdoblamiento de los túneles de Belate y Almandotz, además de la variante de ventas de Arraitz y del tramo entre túneles, junto al acondicionamiento de los ya existentes. Es un tramo en el que ya se han adjudicado obras y en los que se revisan algunos proyectos.

Finalmente, en el caso del tramo entre Sunbilla y Bera, el proyecto está en fase de redacción y es el más complejo por la orografía del terreno, que obliga a hacer «las inversiones más importantes», y por lo que todavía no se han fijado plazos de ejecución. López ha destacado que 18 estructuras están en este tramo, casi la mitad del conjunto de la carretera, y cuatro túneles.

Una vez dadas las explicaciones sobre la situación del conjunto de la obra en la NA-121-A, el consejero Chivite ha reconocido que existe un retraso de 20 años a la hora de acometer esta obra, sobre la que existe un mandato europeo desde 2004. Y ha acusado a UPN de no tener «la valentía suficiente para sacarla adelante» y que «la utilizan para seguir manchando a Navarra».

De esta manera se refería a la insistencia, por parte de UPN y PP, sobre que existen dudas sobre la adjudicación de las obras de los túneles de Belate, sobre la que Chivite ha insistido en señalar que «el proceso de licitación es legal y transparente».

Además de hacer referencia a esta cuestión, que será abordada en breve en el Parlamento, el portavoz del PP, Javier García, ha reprochado al actual Gobierno de Nafarroa y a los precedentes el retraso en acometer estas obras y les ha acusado de no cumplir plazos, de falta de ambición por no aplicar una fórmula de 2+2 y de falta de información.

Desde UPN, Pedro González también ha hecho referencia a las dudas en la adjudicación de las obras de los túneles de Belate y ha calificado la fórmula de carriles 2+1 de «insuficiente e insegura» y ha asegurado que generará «un embudo a la salida de los túneles».

Sobre esta última cuestión, Javier Lecumberri, del PSN, ha señalado que «el 2+1 se usa en muchos lugares de Europa y está dando muy buenos resultados», y que «las sombras en la ejecución» que ven UPN y PP se deben más «a las gafas oscuras que llevan puestas de forma continuada que a la realidad».

Por EH Bildu, Adolfo Araiz ha destacado que «es una obra necesaria y lo más importante es que se ejecuten las obras», el compromiso de su formación con esta mejora al conseguirle financiación mediante enmiendas en los Presupuestos del Estado y ha recordado las afecciones que va a tener el último tramo, el más complejo, especialmente en el tráfico.

Pablo Azcona, de Geroa Bai, ha puesto el acento en que «ha habido avances sustanciales y el Gobierno le está hincando el diente de verdad a esta necesidad» y que tendrá un coste de 180 millones de euros, «el equivalente a dos años de peajes en la sombra». Desde Contigo-Zurekin, Daniel López también ha destacado que, a pesar de los retrasos, «los tramos se van haciendo» y Emilio Jiménez, de Vox, ha pedido al Ejecutivo «celeridad, que se termine cuanto antes y con la premisa de la seguridad».