Un periodista de Cubainformación se enfrenta a seis años de prisión por denunciar el bloqueo

El juicio contra el periodista José Manzaneda tendrá lugar este jueves en Madrid. El coordinador de Cubainformación se enfrenta a una pena de 6 años de prisión y multas de hasta 70.000 euros por calificar de «criminal de guerra» al presidente de una destacada organización «anticastrista».

El periodista y coordinador de Cubainformación José Manzaneda se enfrenta a seis años de prisión y multas de hasta 70.000 euros por un reportaje en el que denunciaba «la guerra contra la cooperación médica cubana» y señalaba a la «organización anticastrista» Prisoners Defenders, querellante en el caso.

En una rueda de prensa ofrecida en la sede de Euskadi-Cuba, la asociación vasca de amistad y solidaridad con Cuba, Manzaneda ha explicado los pormenores del juicio al que tendrá que acudir este jueves, 15 de febrero, en Madrid. «Una cosa es la posible sentencia, con una posible condena o absolución, y otra es lo que llaman ‘pena de banquillo’: nos obligan a ir hasta Madrid y gastar mucho dinero en la defensa. Unos recursos que finalmente no recuperas», ha denunciado el periodista, agradeciendo al mismo tiempo la solidaridad recibida para hacer frente a estos gastos.

La acusación particular, ejercida por Prisoners Defenders, solicita una condena de seis años de cárcel y una indemnización de hasta 70.000 euros por «calumnias e injurias graves, y delito de odio». Según ha señalado Milagros Acea, miembro de Euskadi-Cuba, Prisoners Defenders es una «organización anticastrista» que ha difundido «grotescas falsedades» contra su asociación, a la que acusan de recibir fondos públicos del Gobierno de Lakua para «desestabilizar Europa y España», «minar sus instituciones» y para «labores de inteligencia» cubana.

El presidente de dicha organización es Javier Larrondo, empresario de nacionalidad española que ha residido en Estados Unidos, según ha explicado Manzaneda. En la página web de Prisoners Defenders se presenta a Larrondo como «no sólo un experimentado profesional de los negocios en el área de la transformación digital, sino también un dedicado activista de los derechos humanos, con una vasta experiencia en la implementación de proyectos pro-democracia en Cuba».

«Estamos hablando de una organización que, como tantas otras del entramado del anticastrismo y de los ‘Patria y Vida’, se presenta como defensora de la libertad de expresión y de prensa en Cuba, donde supuestamente no la hay, pero que luego quiere encarcelar a un periodista por un reportaje», ha ironizado Manzaneda sobre la querella de Prisoners Defenders, organización con sede en Madrid.

Falta de medicamentos

En el reportaje en cuestión, el coordinador de Cubainformación analizaba cómo Prisoners Defenders trabaja por denostar «la cooperación médica cubana» sostenida por La Habana, «con sus propios recursos», en países del Tercer Mundo. «No solamente trata de dañar la imagen que tiene Cuba como potencia médica y solidaria, sino que además daña los ingresos que obtiene el país para poder sostener su sistema de salud. Lo que Prisoners Defenders pretende con todo esto es crear una crisis sanitaria en Cuba, es decir, que no lleguen medicamentos, que no se puedan fabricar los mismos, que no se pueda importar tecnología, que no se puedan arreglar los hospitales...», ha señalado el propio Manzaneda, puntualizando que «la situación de hoy en Cuba es muy delicada, también en el sistema de salud, con una falta flagrante de medicamentos».

Ante unos hechos que el coordinador de Cubainformación considera «totalmente demostrables», señala que Prisoners Defenders encontró «una excusa para poder llevar adelante esta agresión jurídica, una especie de lawfare a pequeña escala». Concretamente se ampararon en la definición de Larrondo como «criminal de guerra».

«Javier Larrondo, miembro de una de las familias de la burguesía cubana amparada por la dictadura de Fulgencio Batista, es, como Marco Rubio [senador republicano por el estado de Florida] y Donald Trump [entonces presidente estadounidense], un criminal de guerra. Y como tal debería ser tratado», se podía leer en el artículo de Manzaneda. Sin embargo, esta calificación fue retirada del artículo por parte del equipo de Cubainformación «incluso antes de tener una comunicación por parte de los querellantes protestando por el material».

En este sentido, Manzaneda ha defendido que, tal como han amparado numerosas fuentes académicas, jurídicas, políticas o periodísticas, «el bloqueo contra Cuba es un acto de guerra en tiempo de paz, un crimen contra la humanidad y una grave violación de los Derechos Humanos condenada por la Asamblea General de Naciones Unidas todos los años», recordando que 187 países lo condenan y solo dos votan por mantenerlo: Estados Unidos e Israel.

«Guerra no convencional»

«Por esto que digo que el bloqueo es una guerra. Yo utilicé una expresión que era ‘criminal de guerra’ dirigida a Donald Trump, entonces presidente; Marco Rubio, que es el senador de la Florida arquitecto de esta política de asfixia contra Cuba y de las 243 nuevas sanciones impuestas a la isla; y la persona que se quería contra mí, Javier Larrondo», ha apuntado el periodista. Así, ha matizado que esa calificación «no tiene que ver con una guerra militar, sino con una guerra no convencional; una guerra contra su cooperación médica», pero que en un «ejercicio de corrección» la redacción optó por retirarlo.

Aun así, desde Prisoners Defenders enviaron un burofax solicitando «no retirar una frase, sino retirar el material completo, que es lo que les duele». Ante la negativa de su redactor y el resto del equipo, se inició el proceso penal en su contra.

El juicio se celebrará este jueves en el Juzgado de lo Penal nº 36 de Madrid a las 11.30. Antes, desde las 10.30, se ha convocado una concentración solidaria frente al edificio, situado en el número 31 de la calle Albarracín de la capital española. Manzaneda ha expresado que acudirán con «total tranquilidad», en la convicción de que están realizando un trabajo periodístico especializado en un país y en contra de «la manipulación».

Campaña solidaria

La campaña contra Manzaneda y Euskadi-Cuba, asociación que hasta 2020 fue propietaria legal de la página web de Cubainformación, ha despertado numerosas muestras de solidaridad. Además de la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP) y el exdirector de Le Monde Diplomatique y profesor de Teoría de la Comunicación Ignacio Ramonet, más de 200 colectivos, sindicatos y partidos han firmado un comunicado de solidaridad con Euskadi-Cuba y Cubainformación.

«Estamos ante una persecución judicial y, además, un intento de criminalizar el periodismo crítico y la solidaridad», ha señalado Milagros Acea, que también ha calificado esta campaña de «operación de intoxicación dentro de la estrategia de guerra no convencional contra Cuba».