Europa, la clave para ser el cuarto mejor equipo de la Liga en los últimos cinco años
El club blanquiazul es el único que se ha clasificado para competición continental siempre junto a Real Madrid, Barcelona y Atlético desde la llegada de Imanol. El prestigio y el dinero de la Europa League, con una buena gestión, ha permitido mantener presupuestos altos y a los mejores futbolistas.
La victoria de la Real ante el Betis del domingo le permitió asegurar la presencia en la Europa League la próxima temporada, con unos ingresos superiores a los de la Conference League, aunque menores que los recaudados este año por participar en la Champions.
La máxima competición continental ha permitido llegar a un presupuesto récord de 162 millones de euros de ingresos, que se han incrementado con la clasificación para octavos y la venta de Momo Cho en enero al Niza por diez más.
La participación, al menos, en Europa League desde que Imanol comenzó por vez primera una temporada como entrenador es la clave que ha convertido a la Real en el cuarto equipo que más puntos ha sumado desde entonces en Primera (311), solo superado por Real Madrid (429), Barcelona (404) y Atlético de Madrid (377). Por detrás quedan Sevilla (307), Villarreal (293), Betis (283), Athletic (268), Osasuna (240), Valencia (231), Celta (219) y Getafe (216), los doce que han competido estos cinco años en la máxima categoría.
La Europa League ha permitido manejarse a la Real en presupuestos de unos 130 millones cuando en la 2016-17, la de la anterior clasificación para esta competición, era de 74.3. Esos ingresos, una buena gestión y el atractivo que para los jugadores tiene jugar en Europa ha permitido mantener a la mayoría de las piezas básicas con la única venta de Isak por 67 millones en una posición de fuerza. Sevilla, Betis y Villarreal, por contra, se veían obligados a desprenderse de ellos y debilitar sus plantillas para cuadrar números.
Villarreal y Sevilla, al que solo le salvó ganar la Europa League la pasada temporada, han quedado por vez primera en estos cinco años fuera de Europa, lo que agravará su situación, y el Betis verá reducidos sus ingresos por jugar la Conference.
La Real ha acabado estas cinco temporadas cuarta la pasada, quinta la 2020-21 y sexta las otras tres, con una regularidad que además le permite mejorar los ingresos por los contratos televisivos vía Liga. Una parte están sujetos a las clasificaciones de las cinco temporadas anteriores, lo que reforzará cada año a la Real ante los rivales directos.
El Girona, la excepción
Por eso no se puede competir con Barcelona, Real Madrid y Atlético. Hasta esta temporada que el Girona, sin jugar en Europa y con el apoyo del Manchester City, acabará tercero, llevaban once seguidas entre los tres primeros en la Liga, clave en un reparto que de por sí les favorece por otras cuestiones.
Competir en las tres competiciones como la Real esta temporada por ello tiene mucho valor. Un dato lo resume todo. Imanol alcanzó el domingo las 100 victorias en Liga en 219 partidos (45%), un porcentaje cercano al que logró Alberto Ormaetxea con 113 en 238 (47º) y que le acerca también al técnico con más triunfos con la Real en Primera, John Toshack, 126 en 322 encuentros (39%).
Esta comparación ayuda a entender que no es justo decir que la Real ha hecho historia al lograr cinco clasificaciones seguidas porque no lo logró ni el equipo campeón. Entonces solo los cuatro-cinco primeros tenían plaza para Europa vía Liga y la Real fue cuarta en la temporada 1978-79, segunda en la 1979-80, primera en las dos siguientes (1980-81 y 1981-82), séptima en la 1982-83, sexta en la 1983-84, séptima en la 1984-85 y 1985-86, campeona de Copa en la 1986-87 y subcampeona en la 1987-88.
Y en todos los años en los que fue séptima el campeón de Copa quedó por delante, con lo que habría jugado durante diez temporadas de manera consecutiva competición continental con los criterios actuales. Eso no quita mérito a lo que ha conseguido la Real en las últimas cinco campañas, pero no se puede decir que el equipo actual haya conseguido algo que no logró el campeón. Es justo lo contrario.
Ingresos mayores
Además de los ingresos por el abono europeo, entradas y otros conceptos, la Europa League garantiza la próxima temporada cuatro millones a los 36 equipos que van a estrenar el nuevo formato repartidos en cuatro grupos de nueve que van a jugar ocho partidos a una vuelta, cuatro en casa y cuatro fuera, desde el 26 de septiembre hasta el 30 de enero.
Jugar más partidos, solo doce equipos no disputarán al menos cinco, ofrece más alicientes económicos en un club en el que los jugadores se llevan una parte importante de los ingresos europeos con las variables de sus contratos, lo que también ayuda a retenerlos.
Cada victoria se premia con 450.000 euros y el empate con 150.000. No hay descensos de la Champions ni a la Conference League. Los ocho mejores de los 36 pasan a octavos y los dieciséis siguientes juegan una eliminatoria el 13 y el 20 de febrero para completarlos. Desde ahí siguen las eliminatorias habituales hasta la final del 21 de mayo en San Mamés.
La Real estará entre los nueve mejores por coeficiente UEFA junto a Roma, Chelsea, Oporto, Ajax, Glasgow Rangers, Eintracht Frankfurt, Lazio y Tottenham. El Athletic quedará en el tercer bloque de equipos y se conocerán los grupos el 30 de agosto. Los dos conjuntos vascos no podrán coincidir en el mismo.