La derecha senatorial gala se aviene a poner coto, con matices, a los alquileres turísticos
El Senado francés adoptó en la noche del martes varias medidas destinadas a regular el sector del alquiler turístico de corta duración que encarna la plataforma Airbnb. La derecha retocó la iniciativa adoptada en la Asamblea Nacional. Pese a todo, electos vascos aplauden la decisión.
El proyecto de ley propuesto por los diputados Annaïg Le Meur (Renaissance) e Iñaki Echaniz (electo por el Partido Socialista en la llamada circunscripción vasco-bearnesa), ya recibió el apoyo de la Asamblea Nacional, donde la derecha no respaldó la norma. Sin embargo, aplicando distintas modificaciones, los senadores de Les Républicains (LR) votaron, en la noche del martes, una normativa para regular el mercado de alquiler turístico y acabar con las ventajas fiscales de que gozan actualmente los propietarios que optan por alquilar viviendas para estancias cortas frente a quienes ofertan alquileres anuales.
Los diputados de la derecha republicana se opusieron ampliamente en la Asamblea Nacional, donde hicieron bandera de la defensa de «los pequeños propietarios».
Sin embargo, sus compañeros de filas en el Senado, tras suavizar, eso sí, algunas medidas previstas en el texto inicial, alcanzaron un consenso que, de entrada, mantiene viva la iniciativa legislativa.
El objetivo común pasa por regular de manera más estricta los alojamientos turísticos amueblados, dado que su proliferación va en detrimento de los alquileres de larga duración.
Muchos senadores, caso del biarrota Max Brisson, se mostraron durante el trámite de la iniciativa alarmados por la escasez de viviendas en sus territorios de origen y apuntaron como responsable de esa situación a la explosión del número de alquileres ofertados por plataformas como Airbnb, ello al calor de un tratamiento fiscal ventajoso.
Precisamente ese «nicho fiscal de Airbnb» estuvo en el centro de los debates en el Senado.
El exdiputado de Vivienda en el Ayuntamiento de París, el senador comunista Ian Brossat, pidió que se ponga fin «al absurdo que significa que hoy en día, un propietario pague más impuestos si alquila su casa a un empleado para todo el año que si alquila su alojamiento a turistas».
Reducción del «nicho fiscal», pero sin ir hasta el final
El texto votado en la Asamblea Nacional proponía reducir el porcentaje de reducción de los ingresos procedentes del alquiler de alojamientos turísticos amueblados al 30% -frente al margen de desgravación de entre 50 y 70% actual-, haciendo una excepción en las zonas rurales «muy escasamente pobladas».
Pese a las apelaciones de la izquierda para ir más allá, el Senado optó por atenuar ligeramente esa evolución fiscal: aprobó el tipo del 30%, pero mantuvo una reducción más favorable -del 50%- a aplicar en exclusiva para los alojamientos amueblados «clasificados».
La plataforma Airbnb se mostró abierta a la evolución legislativa, pero pidió a los senadores «orientar mejor estas medidas para atacar específicamente la especulación», según explicó su director en el Estado francés, Clément Eulry.
Las exigencias de la plataforma también se escucharon sobre un artículo clave: por iniciativa de la derecha, el Senado eliminó la posibilidad de que los alcaldes reduzcan de 120 a 90 días al año la duración máxima durante la cual se puede alquilar una vivienda habitual.
La izquierda lamentó ese «paso atrás», y uno de sus representantes, el senador socialista Rémi Féraud, reprochó a la mayoría senatorial «no confiar en los alcaldes».
Los senadores también ampliaron el plazo concedido a los propietarios de alojamientos turísticos amueblados para cumplir los requisitos en materia de eficiencia energética: la etiqueta energética de mala clasificación -D- solo penalizará a partir de 2034, frente a la fecha de 2029 barajada en el texto que salió adelante en la Asamblea Nacional.
Próxima etapa, la comisión mixta paritaria
Los senadores y diputados tendrán que acordar ahora un texto de compromiso en una comisión mixta paritaria cuya fecha no ha sido fijada todavía.
El propio Echaniz agredeció, en un mensaje en redes sociales, el voto favorable del Senado, apelando a sacar adelante la siguiente etapa, la de la comisión mixta paritaria.
El presidente de la Mancomunidad Vasca y alcalde de Baiona, Jean-René Etchegaray, difundía, por su parte, este mensaje en la red X: «Tras el voto por el Senado de la regulación de alquileres turísticos, el combate continúa».