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La manifiesta contundencia rumana fulmina el ejercicio patriótico de Ucrania (3-0)

La contundencia de una Rumanía muy consistente ha eclipsado el ejercicio patriótico de una Ucrania –sus jugadores han salido ataviados con la bandera del país– inmersa en la guerra contra Rusia y que se ha visto muy superada por su rival.

Con este golpeo ha anotado Stanciu el 1-0 rumano, el gol más bonito hasta ahora del torneo. (Tobias SCHWARZ | AFP PHOTO)

RUMANÍA 3

UCRANIA 0

La selección ucraniana no solo no ha podido dar una alegría a su país, inmerso en una prolongada guerra con Rusia, sino que además ha salido vapuleada por una Rumanía mucho más consistente y hecha como bloque.

Y es que los de Eduard Iordanescu han justificado el porqué de su inmaculada fase clasificatoria –seis victorias y cuatro empates, primeros por delante de Suiza– con una consistencia y pegada que les puede hacer ser una de las sorpresas de esta Eurocopa.

A ello se ha acompañado la tarde nefasta de Andriy Lunin, protagonista desafortunado en los dos primeros goles de Rumanía. El portero del Real Madrid no ha ofrecido, ni de lejos, el rendimiento que mostró en partidos importantes con el conjunto blanco.

De todo modos, al encuentro le ha costado agitarse casi media hora. Tiempo en el que ambas escuadras se han apropiado de papeles bien diferentes, los ucranianos llevando la iniciativa y los rumanos, esperando a salir con velocidad.

Pero ha sido de una presión alta de donde ha llegado el momento que ha cambiado el rumbo del envite. La delantera tricolor ha apretado la salida de balón de su rival y, entre Zabarnyi y, sobre todo, Lunin, han cometido un error imperdonable.

El guardameta del Real Madrid se ha quitado la pelota de encima sin atinar una dirección adecuada, siendo interceptada por Man, quien ha cedido a un mejor colocado Stanciu quien, viniendo desde atrás, ha colocado casi en la escuadra un golpeo con el empeine interior en el minuto 29.

La diana ha sido balsámica y demoledora, a partes iguales. Rumanía ha crecido de manera exponencial, ya no ha aguardado en su propio terreno y ha seguido merodeando el área contraria, mientras que Ucrania ha acusado el duro golpe.

Pese a ello, la banda izquierda compuesta por Zinchenko y Mudryk lo ha seguido intentando, con el del Chelsea centrando con mucho peligro y Dragusin enviando a corner de cabeza en lo que ha podido convertirse en un autogol (m.36).

Sin embargo, ha estado más cerca el 2-0 que el empate. Man se ha fabricado una bonita diagonal y su zurdazo ha sido desviado por contrario en lo que casi ha sido la segunda diana rumana, saliendo el cuero rozando el poste derecho.

Ese saque de esquina ha estado a punto de convertir a Stanciu –uno de los máximos anotadores de su equipo en la fase clasificatoria– en bigoleador, pues el futbolista del Damac ha intentado un tanto olímpico que ha sorprendido a Lunin y solo ha evitado el travesaño.

Fulminados en cuatro minutos

Cuatro minutos le ha costado a Rumanía dejar ventilado el duelo. Demasiado relajada para lo que había en juego, Ucrania ha vuelto a conceder demasiados huecos que su adversario no ha echado en saco roto.

De una nueva salida en velocidad y conducción limpia del cuadro centroeuropeo en el 53 se ha generado su doble ventaja. Una nueva diablura de Man, al que se le ha escapado un poco el cuero, ha acabado el rechazo en las inmediaciones de Razvan Marin, que se ha sacado un mísil raso, ante el que Lunin ha vuelto a mostrar su fragilidad, pasando el cuero por debajo de su brazo derecho.

Y Dragus, en un lance en el que la defensa ucrania ha dejado patente su bisoñez, ha apostillado con el 3-0 en el 57, al adelantarse a su par dentro del área pequeña tras la enésima jugada individual de Man, el mejor del choque.

La enorme desventaja ha catapultado el carrusel de cambios de Sergiy Rebrov, que ha llegado a colocar hasta cuatro delanteros en el césped, pero la sentencia ya estaba echada.

Al menos, lo han intentado. Un disparo de Sudakov que ha parado Nita (m.77), una gran estirada del guardameta del Gaziantep para evitar el autogol de un compañero (m.80), un disparo arriba de Mudryk (m.84) y una vaselina a la parte exterior del larguero de Yaremchuk (m.92) ha sido el bagaje infructuoso de una Ucrania que ha defraudado a tenor de su nómina de jugadores.

Muy al contrario que una Rumanía que no ganaba un partido de Eurocopa desde hace un cuarto de siglo –lo logró en 2000– y que ha dejado la sensación de que va a ser un bloque difícil de batir en el grupo E.

Ficha técnica:

Rumanía: Nita, Ratiu, Burca, Dragusin, Bancu, M. Marin (Rus, m.75), R. Marin, Stanciu (Racovitan, m.86), Man (Hagi, m.62), Coman (Mihaila, m.62) y Dragus (Puscas, m.75).

Ucrania: Lunin, Konoplia (Tymchyk, m.72), Zabarnyi, Matviyenko, Zinchenko, Stepanenko (Brazhko, m.62), Shaparenko (Yaremchuk, m.62), Tsigankov (Yarmolenko, m.62), Mudryk, Sudakov (Malinovsky, m.83) y Dovbyk.

Goles: 1-0, m.29: Stanciu. 2-0, m.53: Razvan Marin. 3-0, m.57: Dragus.

Árbitro: Glenn Nyberg (sueco). Ha amonestado a Konoplia (m.68) y Razvan Marin (m.79).

Incidencias: Unos 61.591 espectadores en el Munich Football Arena.