La apertura de una gran mina de litio en el norte de Serbia desata una ola de movilizaciones
Miles de personas han salido este sábado por la noche a las calles de la capital de Serbia, Belgrado, para protestar contra la reanudación de un proyecto de explotación de litio en el norte del país, en una movilización que ha culminado con el bloqueo de varias líneas de tren y de metro.
Belgrado ha sido escenario de grandes movilizaciones en rechazo de la reapertura de una gran mina de litio en el norte de Serbia. En el centro de la crisis se encuentra un reciente veredicto judicial que anulaba una orden previa de paralizar el proyecto de Loznica –en el valle de Jadar, muy cerca del parque natural que lleva su nombre– que quiere emprender desde hace años el gigante minero angloaustraliano Rio Tinto y que activistas medioambientales perciben como una gran amenaza al medio ambiente.
El dictamen fue emitido por el Tribunal Constitucional del país y determinó que las autoridades de Serbia se excedieron en sus poderes al detener este proyecto en 2022 tras ceder a las presiones de los grupos medioambientales contra esta explotación, presupuestada en unos 2.200 millones de euros.
El Gobierno serbio defiende que el valle de Jadar contiene unos 158 millones de toneladas de litio, casi un 20% de las reservas totales estimadas en el continente europeo, si bien ha asegurado que la mina no seguirá adelante si percibe el más mínimo riesgo para la naturaleza, aunque los activistas no se fían de la palabra de las autoridades.
El litio se usa para baterías de almacenaje de energía. Se considera una de las mejores opciones que existen en la actualidad, ya que su capacidad es muy elevada, su mantenimiento es bajo y los desechos de ion-litio son fácilmente reciclados.
Reducir la dependencia del litio de China
Además, el proyecto tiene una vertiente política muy destacada, ya que su reanudación tiene lugar después de la firma de un pacto sobre materias primas críticas con la Unión Europea para reducir la dependencia del litio procedente de China.
Las protestas han continuado hasta las 05.30 de esta madrugada, cuando fuerzas antidisturbios han acabado interviniendo para expulsar a decenas de personas aglomeradas en las vías de la estación de tren de Prokop.
Uno de los organizadores de las marchas, el activista medioambiental y agricultor Zlatko Kokanovic, ha confirmado que las protestas continuarán este domingo en al menos tres ciudades del país, recoge la agencia de noticias Beta.
Las concentraciones del sábado acabaron con 14 detenidos, según el ministro del Interior, Ivica Dacic, quien ha reconocido el carácter pacífico «inicial» de las marchas hasta que varios «alborotadores» decidieron interrumpir el tráfico ferroviario.
Vucic indica que «no se ha decidido nada»
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, ha comparecido ante los medios a mediodía de este domingo para indicar que todavía no hay una decisión definitiva sobre el proyecto antes de garantizar que, si ocurre, el Gobierno serbio exhibirá una dureza sin precedentes para asegurar que respeta en la medida de lo posible el medio ambiente.
«Voy a ser el peor policía posible», ha indicado Vucic antes de expresar sus dudas sobre la posibilidad de someter la cuestión a referéndum, preocupado por la baja participación, porque «hay gente que al final siempre va a encontrar una excusa para no votar».
El presidente ha recordado además que este proyecto no tiene carácter inmediato. «Quedan todavía dos años para que ocurra algo. Durante ese tiempo podremos hablar lo que queramos, para ver qué podemos ganar con esto, qué nos gusta y qué no nos gusta. Y será entonces cuando adoptaremos una decisión al respecto», ha manifestado en comentarios recogidos por la radiotelevisión pública serbia RTS.