La ola de calor azota esta vez la costa vasca y llega a 42,8º en Laudio
Ninguna zona de Euskal Herria se ha librado este domingo del azote del calor. En un hecho muy poco habitual, los termómetros han superado los 41 grados en Bilbo y han alcanzado un tope de 42,8 º C en Laudio.
La barrera de los 40 grados centígrados se ha roto este domingo en diferentes localidades vascas, y especialmente esta vez en la costa, que se libró el sábado. Pasadas las 16.00 se han superado en Bilbo los 41,7º C (medidos en Zorrotza), al igual que en el observatorio del aeropuerto de Hondarribia (41,7), con un aumento brutal de 20 grados en apenas cinco horas. En Baiona, también en la costa, se han medido 39.
El calor ha sido tan impresionante en el litoral que a muchos les ha imposibilitado incluso estar en la playa, donde se aguantaba en el agua pero a duras penas sobre la arena. Ha sido un condicionante importante para la Aste Nagusia donostiarra, que ha tenido que modificar algunas actividades festivas. No obstante, a mediodía hay quien no se ha arredrado para las euskal dantzak previstas en el Bulebar.
Esta vez el interior vasco, más acostumbrado a estos golpes térmicos, se ha visto superado en el ranking de temperaturas. Con todo, en Iruñea se ha llegado a 39 grados por segundo día consecutivo y en Gasteiz se han medido 38. Para completar el cuadro de herrialdes, en Donibane-Garazi y en Maule también se han ido hasta los 39 grados.
Al margen de las capitales, el pico se ha marcado, según los datos de Euskalmet y Aemet, en Laudio, puesto que allí se ha llegado a 42,8º C. También se ha pasado de esos 42 en Sestao, Sopuerta, Zizurkil o el observatorio del aeropuerto de Loiu, y de 41 en Azpeitia.
Todas ellas han superado esta vez al valle del Ebro, habitualmente la zona más castigada por estas olas. En Tutera el mercurio ha marcado un tope de 38. Pero no ha habido alivio realmente en ningún punto del mapa vasco. Por ejemplo, en la pirenaica Izaba se ha llegado a 34 grados.
Laudio y Getxo
Frente a ello, las instituciones han distribuido los consejos habituales. El Consistorio de Donostia ha difundido información sobre una serie de zonas de la ciudad que podían servir como refugio climático. Aunque quien más innovador se está mostrando ante este efecto del cambio climático es el de Laudio: a la decisión del pasado año de habilitar el salón de plenos municipal, refrigerado, para quien necesitara aliviarse del calor le ha sumado esta vez la puesta a disposición del vecindario de la iglesia. Allí se medían unos 22 grados más que agradables en contraste con los casi 43 del exterior.
Una de las actividades deportivas más afectada por esta jornada tórrida en Euskal Herria ha sido la prueba ciclista del Circuito de Getxo, para profesionales, muchos de ellos tras participar el sábado en la Clásica de Donostia y antes, durante toda la semana, en la Vuelta a Burgos. La organización ha optado por recortar algo el recorrido y por permitir, de modo extraordinario, el avituallamiento en cualquier punto de la carrera.
En Bilbo ha habido que interrumpir la labor de montaje de las txosnas para las fiestas que comienzan el sábado y las comparsas han emitido algunos consejos para evitar males mayores. Y en Donostia también se han tomado medidas de alivio para quienes trabajaban en los eventos festivos, como poder refrescarse cada diez minutos.
Afortunadamente se ha tratado de un repunte muy pasajero, que solo ha durado unas horas en gran parte de la geografía vasca. Peor están las cosas en otras partes de la Península Ibérica por la continuidad de estas altas temperaturas, sin dar tregua. Como dato, ayer en Valencià la temperatura del Mediterráneo superó ya los 29 grados. Son seis más de los que se miden en el litoral vasco del Cantábrico estos días de agosto.
Veinte atenciones de Osakidetza
Osdakidetza ha atendido a veinte personas durante el pasado fin de semana como consecuencia de las altas temperaturas.
Según ha informado el departamento de Salud, de estas veinte personas, siete han sido trasladadas a hospitales y centros de salud, todas ellas en Bizkaia.
Por herrialdes, en Bizkaia se han atendido a trece personas, en Gipuzkoa a cuatro y en Araba a tres personas.
Las edades de las personas atendidas van desde los 22 hasta los 92 años y los síntomas más destacados han sido mareos, temblores, desmayos, fatiga y desorientación