INFO

El Alavés se lleva los puntos de Anoeta en un derbi marcado por las decisiones arbitrales

La Real, que se ha quedado con diez a la media hora por roja a Oyarzabal, se ha adelantado con un gol de Brais Méndez, pero el equipo babazorro ha empatado antes del descanso con un penalti marcado por Villalibre y el recién fichado Toni Martínez ha sentenciado en la segunda parte (1-2).

Becker trata de consolar a un enfadado Oyarzabal, que se retira a vestuarios tras ver la roja. (Andoni CANELLADA | FOKU)

El Alavés se ha llevado el primer derbi de la temporada –y ha estrenado así su casillero de victorias– al imponerse a la Real en Anoeta (1-2), en un choque que ha estado marcado por las decisiones del árbitro.

Sánchez Martínez ha expulsado al local Oyarzabal a la media hora de juego y ha pitado justo antes del descanso el penalti que ha permitido empatar a los visitantes, ya que Brais había adelantado a la Real ya en inferioridad. En la segunda parte, el recién fichado Toni Martínez ha salido del banquillo para certificar la remontada.

Imanol es poco amigo de rotaciones, así que a pesar de reconocer que su equipo físicamente está lejos de su punto óptimo, solo ha realizado dos cambio en el once respecto al que ganó al Espanyol.

Zubeldia ha entrado por Aritz –un movimiento que se hubiera dado incluso sin la lesión del beasaindarra– y el goleador Take por Turrientes, lo que ha desplazado a Sergio Gómez desde la banda al centro. El resto han sido Remiro, Traoré, Pacheco, Javi López, Zubimendi, Brais, Becker y Oyarzabal.

Sí ha cumplido lo anunciado Luis García. El Alavés recibe el domingo en Mendizorrotza a un, en teoría, rival directo como Las Palmas, y sin desmerecer un posible resultado positivo en Donostia, a priori el de los canarios era el partido en el que jugarse las habichuelas. Así, en el once babazorro solo han repetido respecto al día del Betis el meta Sivera, Aqbar, Guevara y Carlos Vicente. De momento el plan le ha salido redondo.

Novoa y Diarra han entrado en los laterales, el debutante Pica en el eje de la defensa, Protesoni en el doble pivote, Guridi y Abde en la línea de tres y Villalibre como referencia ofensiva por vez primera en su retorno a Gasteiz.    

Antes del inicio se ha guardado un minuto de silencio en memoria del eibartarra Josean Urtiaga, jugador de la Real entre 1968 y 1973 que falleció a finales del pasado mes de junio.

Kubo ha tenido la primera a los 4 minutos, pero no ha engatillado bien el pase atrás de Sergio Gómez. Tampoco ha podido marcar Oyarzabal en un balón largo que ha pillado la espalda a la defensa gasteiztarra. La réplica visitante ha llegado en un córner perfectamente cabeceado por Pica y repelido por Remiro en una espectacular palomita.

Amarilla, VAR, roja, gol

Tras esa salida explosiva, las aguas se han calmado, hasta que Oyarzabal y Protesoni han caído al suelo en un balón dividido. De primeras, el árbitro Sánchez Martínez ha amonestado al jugador del Alavés, pero su colega Pizarro Gómez le ha avisado desde el VAR para revisar la jugada. En las imágenes se aprecia que Oyarzabal no ve llegar al uruguayo y al salir corriendo le pisa en el tobillo de forma involuntaria, pero el árbitro le ha mostrado la roja (m. 30).

La decisión ha enfadado a Anoeta y ha espoleado a sus compañeros, que dos minutos más tarde se han adelantado al remachar en el área pequeña Brais una asistencia perfecta de Sergio Gómez desde la banda izquierda (1-0, 32’).

Con dos líneas de cuatro y Becker en punta, los donostiarras se preparaban para guardar su botín ante un Alavés obligado a dar un paso adelante. Para mayor preocupación local, una amarilla a Zubeldia se sumaba a la que había visto Pacheco al cuarto de hora. Los dos centrales, que llegaban justos, amonestados.

Agarrón de Zubeldia a Aqbar

Antes del descanso, Sánchez Martínez ha vuelto en erigirse en protagonista al pitar penalti en un agarrón de Zubeldia a Aqbar, de los que se producen decenas en cada partido y se solventan con un ‘sigan, sigan’.

También es cierto que ya habían avisado de que esta temporada se iban a poner más rigurosos con este tipo de jugadas, y podía haber sido peor si el de Azkoitia ve la segunda amarilla. Villalibre, como el día del ascenso ante el Levante, no ha perdonado desde los once metros (1-1, 49’).

En el camino a vestuarios, la bronca al árbitro ha sido de las gordas, en el viejo Atotxa hubieran volado las almohadillas.  

Tras el descanso, ambos técnicos han movido ficha. Imanol ha metido a Jon Martín por Pacheco –con amarilla y duda hasta el último momento–, mientras que Luis García ha retirado a Protesoni –posiblemente dolorido tras el pisotón recibido– y ha dado entrada a Stoichkov, retrasando la posición de Guridi.

El Alavés no generaba peligro, y en el minuto 63 Manu Sánchez y Kike García han entrado por Diarra y Villalibre, aunque el técnico madrileño mantenía su dibujo. Su homólogo de Orio respondía dando entrada a Sadiq en punta, una vez que en el depósito de gasolina de Becker se había encendido la luz roja.

Luis García sube la apuesta

Restaban veinte minutos para el 90 cuando Luis García subía la apuesta con la entrada del recién fichado Toni García. El atacante, llegado ayer mismo desde el Oporto, casi marca aprovechando una pérdida de Zubeldia, similar a la de Pacheco hace diez días ante el Rayo, pero Remiro se ha lucido desviando el balón lo justo con su manopla derecha.

A la segunda no ha perdonado. Con una Real fatigada y cada vez más encerrada, ha cazado un balón en el área para fusilar de duro disparo al meta local (1-2, 76'). Y ha tenido una tercera oportunidad en un testarazo que se ha ido por poco. Llegar y besar el santo.

Imanol ha metido piernas frescas para tratar de rescatar al menos el empate. Marín, Turrientes y Olasagasti han sustituido a Zubeldia, Brais y Sergio Gómez. Los donostiarras en ningún momento han dejado de intentarlo –dos derrotas en los dos primeros partidos en casa–, pero el Alavés se ha defendido con solvencia y los tres puntos viajan en el bus a Gasteiz.