A mediados de enero los principales medios de la prensa nacional se hacían eco del informe del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal): «El 5% de los cánceres de vejiga en Europa, son atribuibles a la exposición a trihalometanos (THM) en el agua del grifo. España es el cuarto país de Europa con más casos de cáncer de vejiga asociados a ese agua».

La Asociación Española de Abastecimiento de Agua y Saneamiento (AEAS) nos asegura el mismo día que la calidad del agua del grifo: «En todos los casos cumple la exigente normativa española».

El 17 de enero, Aguas de Añarbe subía a su página web la nota:«Aguas de Añarbe puede afirmar que el agua procedente de su sistema de abastecimiento goza de las mejores condiciones sanitarias y de calidad, y es controlada diariamente, lo que permite tranquilizar a los consumidores en los términos más rotundos».

En Gipuzkoa es lo único que nos ha llegado a los ciudadanos y no precisamente por la prensa territorial que viene silenciándolo todo, como si el tema no fuese con nosotros. A pesar de ser el tercer consumidor de agua envasada, ¿por qué en España el cáncer de vejiga asociado al consumo de agua del grifo, según el informe, es doble (11%), que en Países Bajos, escandinavos y centroeuropeos que no llegan al 0,6% de media (0,2% en Alemania) y beber agua del grifo en sus casas y restaurantes está mucho más generalizado? Algo no cuadra.

Informarnos sobre las razones de ese desfase, exige conocer cómo lo hacen esos países, y siendo que el asunto transciende a la salud pública, para la información total, se precisa publicar la estadística clínica de Gipuzkoa en poder de Osakidetza....también sumida en un sospechoso silencio.

El enmudecimiento sobre el tema por parte de todos los medios de prensa de Gipuzkoa...¡todos! sin excepción, hasta la censura de cartas de opinión, nos priva a los gipuzkoanos de disponer de información para tomar conciencia y medidas sobre un tema de mucha transcendencia.... y poca transparencia.

Si la OMS, al igual que lo hizo con la gripe aviar, también con el coronavirus reconoce que se ha pasado en generar tanta alarma, con el tema que me ocupa en este artículo, es toda la prensa de Gipuzkoa la que se ha pasado en tratarnos como a niños a los que sus padres quieren ocultar que lo hacen mal.