Patético, esperpéntico, cínico, esclarecedor, pedagógico... y más epítetos que me guardo es lo que me parece ver en el espectáculo de las disputas en el PSOE entre «los barones» y «la militancia». Sinceramente vomitivo. Y el vómito me lo producen casi que por igual las dos facciones de este Partido-Empresa-Negocio que se están dando ahora de navajazos por el poder interno, la poltrona y los pingües beneficios que ambos producen.

Y aún vomito más cuando leo notas, twits, comentarios... de conocidos o desconocidos totalmente ofendidos, enfadados, alterados, echándose las manos a la cabeza con lo que ocurre, con lo que hacen «los barones», con lo que ha hecho Felipe González... En suma: con lo que hace el PSOE.

Y como de todo ese reñidero suciolisto o sociolisto –cada cual que lo pronuncie como quiera– lo poco que me interesa se reduce a algunas personas de ese entorno que aún considero honestas y que están entre esa militancia, me limitare a decir y decirles que me duele no haber visto a la «militancia» protestar ni enfrentarse a «los barones» cuando se dijo si a la Transición tramposa, ni cuando se dijo si a la OTAN, ni cuando el GAL se puso en marcha y actuaba, ni cuando se acompañó a la puerta de la cárcel a algunos de los responsables de esa banda terrorista, ni cuando se llevó a cabo y a hostias la reconversión industrial, ni cuando se han dado los escandalosos casos de corrupción que parecen no terminar nunca, ni cuando al abdicar Juan Carlos I de Borbón se ha vuelto a votar por la continuidad de la monarquía, ni cuando se ha avalado la continuidad de la inmunidad jurídica para ese monarca puesto a dedo por el dictador Francisco Franco y con evidentes responsabilidades políticas en algunos hechos, ni cuando los EREs de Andalucia...

En fin, lo siento por unos pocos y algunas pocas, pero como dice la canción «es amarga la verdad, lo que no tiene es remedio» y vosotros tenéis lo que os merecéis. Si sois «militancia» ahora, podíais haberlo sido antes, y de hecho la habéis sido. Ciertamente y como decís vuestro partido «no es de los barones», o al menos no es sólo de ellos sino que también es vuestro, por lo que tenéis una responsabilidad evidente en lo que es hoy el P"SO"E, en lo que ocurre. Así que si ahora decís que veis un partido que «no es de izquierdas» y unos dirigentes que «son unos mangantes»… ¿a donde mirasteis antes? ¿Hasta la mísmisima semana pasada? ¿Qué habéis hecho hasta ahora? ¿Quién ha aupado, votado, mantenido a «los mangantes»? ¿Quien no se ha alzado para echarles?

Entre los adjetivos del principio para definir la situación actual del PSOE se me olvidaba uno: contundente. Porque el P"SO"E es esto... porque ya era esto.

Y también lo habéis hecho vosotros.