2023 API. 05 - 17:11h Un pinchazo en el dedo como alternativa a la analítica de sangre intravenosa Los análisis de sangre capilar, que consisten en un punzado en la yema dactilar, pueden ser usados como una prueba alternativa a las analíticas intravenosas, según un estudio de la Clínica Universidad de Navarra (CUN) publicado en la revista ‘Diagnostics’. Una gota de sangre en la yema del dedo. (GETTY IMAGES) NAIZ El estudio, liderado por Álvaro González , director del Servicio de Bioquímica de la CUN, revela que la toma de muestra capilar impulsaría la telemedicina, facilitaría el manejo de pacientes crónicos reduciendo sus visitas a un centro hospitalario y, además, es percibida como un método menos invasivo y doloroso.«La obtención de sangre capilar es un proceso relativamente indoloro, que puede realizar el propio paciente y en el que se pueden obtener pequeños volúmenes de sangre», explica González, quien añade que este avance «responde a una necesidad creciente de obtener muestras sin tener que acudir a un centro sanitario».Al respecto señala que su implantación puede ser muy útil para personas con acceso limitado a centros de extracción, con fobias a las agujas u hospitales, y para niños, ancianos o enfermos crónicos que requieran muestras mínimas.La investigación ha contado con 296 pacientes a los que se les ha tomado una muestra de sangre tanto venosa (349 muestras) como capilar (427 muestras) para realizar una comparación de 40 parámetros bioquímicos y que han demostrado que las muestras capilares reflejaban un índice medio de hemolisis, que muestra el deterioro de los glóbulos rojos, algo superior, pero con una calidad de muestra aceptable y válida en la mayoría de los casos.Mientras que el resto de índices, tanto el lipémico (concentración de lípidos en sangre) como el ictérico (nivel de bilirrubina en sangre), han reflejado valores similares. Buena respuesta de los pacientesOtro de los objetivos de este estudio era conocer la satisfacción del paciente ante este nuevo abordaje analítico. Casi dos terceras partes (el 64,70 %) de los consultados que deben someterse al menos a una analítica anual han destacado este beneficio.«Aunque este tipo de análisis facilita su realización en casa por parte del propio paciente con los controles de seguridad y calidad oportunos, es importante tener en cuenta el tiempo transcurrido entre la toma de la muestra y su recepción en el laboratorio, ya que los resultados pueden variar pasadas las 24 horas, y que su transporte sea seguro, tanto para la trazabilidad como para la estabilidad de la muestra», recalca González.La posible implantación de esta metodología implica otros retos para los laboratorios clínicos, como la instalación de los equipamientos necesarios capaces de analizar volúmenes tan pequeños de muestra.»La sangre capilar tiene unas características y una composición diferentes a la de la sangre venosa, ya que es una mezcla de sangre de arteriolas, de los propios capilares y las vénulas. Por lo tanto, las concentraciones de analitos pueden ser diferentes a las encontradas en sangre venosa y se ha de asegurar que los valores de referencia empleados son los correctos y la interpretación clínica es la adecuada», apunta.Esta investigación para la validación de la analítica capilar de sangre es un primer paso para poder convertirlo en un proceso rutinario que mantenga la calidad en las extracciones, una estabilidad en la muestra y sea capaz de analizar cada vez más magnitudes, como se realiza en el análisis de sangre venosa.