El nuevo Plan de Paliativos de Osakidetza pone el énfasis en la atención pediátrica

Gotzone Sagardui y José Luis Quintas, consejera y viceconsejero de Salud, han presentado ante los grupos parlamentarios un proyecto que tienen como objetivo «garantizar la atención paliativa integral y de calidad, reforzando la identificación precoz y aumentando la cobertura poblacional».

La consejera de Salud del Gobierno de Lakua, Gotzone Sagardui, y su viceconsejero, José Luis Quintas, han comparecido este lunes en el Parlamento de Gasteiz para dar a conocer ante los representantes del legislativo el nuevo Plan Estratégico de Cuidados Paliativos 2023-2027, que toma el relevo al plan anterior, 2016-2020.

Según han explicado, el paréntesis entre el final de un plan y la elaboración del siguiente se han debido a la pandemia, que obligó a reordenar las prioridades inmediatas del sistema sanitario.

El objetivo del nuevo plan es «garantizar la atención paliativa integral y de calidad para los pacientes y sus allegados, reforzando la identificación precoz de la necesidad de estos cuidados y aumentando la cobertura poblacional».

Quintas ha indicado que el plan ha sido elaborado con la colaboración con 48 profesionales y 12 asociaciones de pacientes, cada persona o colectivo con diferente grado de participación,  ha matizado posteriormente.

En el plan se destaca el refuerzo de los servicios paliativos pediátricos, con un modelo de organización específico que tendrá la punta de su pirámide en la Unidad de Hospitalización a Domicilio Pediátrica del Hospital de Cruces, y sus correspondientes equipos en la OSI Araba, la OSI Bilbao-Basurto, y la OSI Donostialdea como referentes en cada territorio.

Menos casos, más largos

El viceconsejero ha explicado que los paliativos pediátricos demandan un enfoque diferente a los de los adultos, ya que los casos afortunadamente son mucho más escasos pero la duración de las atenciones suele ser mayor y necesitan un soporte sicológico especializado, al tratarse de una situación mucho más dramática.

Por lo demás, el plan distingue tres ámbitos diferenciados. El primero el ámbito domiciliario, bien a través del servicio de atención primaria para los casos de complejidad baja o bien a través del sistema Aringarri, para cubrir las 24 horas del día durante los siete días de la semana.

En el ámbito hospitalario se buscará el trabajo conjunto entre el equipo de base de la patología correspondiente a cada paciente y los equipos especializados en paliativos.

En cuanto a las personas que viven en residencias de mayores u otros centros asistenciales, el servicio estará coordinado entre los servicios del propio centro y los del sistema público de Salud. Quintas ha destacado que este es «uno de los mayores retos del plan, tratar de darles los mismos cuidados que si estuvieran en su propia casa».

Grupos parlamentarios

Em el turno de intervención de los grupos parlamentarios, Jon Hernández, de Elkarrekin Podemos, se ha preguntado si este plan cuenta con los recursos suficientes para dar la atención a la que aspira, habida cuenta de la «situación complicada» que se da hoy en día en Osakidetza.

La representante de EH Bildu, Rebeka Ubera, ha enumerado algunas carencias que ya se detectaban en el plan anterior y que a su juicio no se han solucionado, y se ha cuestionado «cómo se desarrollará este plan, teniendo en cuenta la importancia que se da en él a la atención primaria y cuál es su estado actual».

Ubera también ha mencionado un informe de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (Secpal) que sitúa a la CAV como una de las peores comunidades autónomas en este ámbito.

Al respecto, Quintas ha respondido que ha hablado con el presidente de la Secpal, al que ha trasladado que «infravaloran los servicios de Euskadi», porque «ellos cuentan los servicios específicos de paliativos y no tienen en cuenta los servicios de atención a domicilio porque también hacen otras cosas».