Lakua presenta un plan para evitar o retrasar el inicio de conductas adictivas

El VIII Plan sobre Adicciones 2023-2027 del Gobierno de Lakua busca promover una sociedad más saludable y concienciada sobre los riesgos de las adicciones, tanto sustanciales como conductuales, a través de 58 acciones prioritarias.

«Lograr una Euskadi más saludable y sensibilizada ante los riesgos derivados del consumo de sustancias y conductas adictivas». Ese es el objetivo principal que persigue el VIII Plan sobre Adicciones 2023-2027, aprobado este martes por el Gobierno de Lakua, y que define un total de 58 acciones prioritarias para alcanzar esa meta en los próximos cuatro años, contemplando tanto los consumos y adicciones con sustancia como las adicciones sin sustancia o comportamentales.

Alineado con las bases establecidas en el Plan de Salud aprobado en julio, el Plan sobre Adicciones, el octavo de esta naturaleza, da continuidad a cuatro décadas de trayectoria en el abordaje de las adicciones y drogodependencias por parte de las instituciones, profundizando en el trabajo coordinado, intersectorial y en red entre los distintos agentes, y desde una clara perspectiva de salud pública, equidad y derechos humanos.

Según ha explicado la Consejera de Salud, Gotzone Sagardui, el documento establece cinco grandes objetivos de resultado, que indican los avances que se pretenden conseguir en el período de vigencia del plan: evitar o retrasar el inicio de consumos y conductas adictivas en la población; disminuir su prevalencia; minimizar los daños que originan; reducir las desigualdades en salud ligadas a las adicciones; y reducir el estigma asociado a las mismas.

Para lograrlos, se plantean, además, otros objetivos instrumentales, como guía para orientar las prioridades en cuanto a las políticas, programas y actuaciones a desarrollar en estos años. Así, pretenden activar entornos que promuevan comportamientos saludables y contribuyan a desnormalizar el consumo de sustancias y las conductas adictivas, incluyendo medidas estructurales para reducir su disponibilidad y oferta. Con especial atención al ámbito familiar, escolar, laboral y comunitario.

Además, se comprometen reforzar y mejorar los programas de promoción de la salud y prevención, con perspectiva del curso de la vida (adaptando las intervenciones a las diferentes necesidades propias de cada etapa vital) e incidiendo en el fortalecimiento del capital y los recursos emocionales de las personas.

Entre otras cosas, Lakua persigue además fortalecer y mejorar los servicios de asistencia y apoyo a la inclusión social, desde un enfoque de equidad y con especial atención a las personas en situación de vulnerabilidad.

Asimismo, desde la consejería de Salud procurarán desarrollar y difundir conocimiento e innovación en materia de adicciones y afianzar una acción intersectorial más efectiva en el ámbito de las adicciones.

Sagardui ha destacado, asimismo, el hecho de que la perspectiva de género impregne, como elemento transversal y prioritario, todo el plan, que ha contado en su proceso de elaboración con la participación de más de 70 personas de distintas entidades e instituciones, así como personas afectadas, sus familias y otros agentes sociales y comunitarios.

Aumento entre mujeres

A la espera de conocer los resultados de la encuesta de adicciones, que estarán disponibles en los próximos meses, la consejera ha explicado que el tabaco y el alcohol siguen siendo las sustancias más habituales, sin olvidar el cannabis, cuyo consumo se ha «normalizado» entre los más jóvenes y que además suele ser la puerta de entrada para el abuso de otras drogas ilegales.

Sagardui ha destacado que en los datos preliminares se aprecia el aumento del consumo de psicofármacos, sobre todo entre mujeres adultas y en adolescentes que cursan Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) y ha subrayado que, a pesar de la percepción social de que no afectan a la salud, estas ingestas también son perjudiciales si no se controlan.

Ha hablado también de la adicción al juego, que afecta de alguna manera al 2,5% de la población de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y ha dicho que se ha apreciado un aumento del gasto y del tiempo destinado a la modalidad online y una bajada en la edad de las personas que los usan.

En la misma línea, se ha referido al abuso de las nuevas tecnologías, como los videojuegos y los móviles, también entre los más jóvenes.