2023 ABEN. 31 DE AUGUSTA A ARABIA SAUDÍ Jon Rahm, de la chaqueta verde a convertirse en la figura de ‘sportwashing’ de Arabia Saudí Jon Rahm se ha convertido en uno de los deportistas mejor pagados de la historia tras su sí a Arabia Saudí. (Warren Little | AFP) Ane Urkiri Jon Rahm siempre se ha caracterizado por ser un deportista ejemplar, lo más ejemplar que se le puede exigir a un deportista. Desde su debut en el calendario profesional de golf, el de Barrika cautivó a grandes expertos de la materia y, en ese sentido, no ha defraudado. Cada año ha ido completando retos, ganando campeonatos, hasta que este año ha entrado en el Olimpo del golf al hacerse con la mítica chaqueta verde del Masters de Augusta, su segundo Grand Slam, además de con la Ryder Cup. En 2013 dejó escrito en su cuenta de Twitter (ahora X) , «I am gonna win the Masters». Y su sueño se hizo realidad diez años después, con tan solo 28 años, con exhibición incluida la última jornada, al sacarle cuatro golpes de ventaja al segundo, Phil Mickelson, uno de los primeros golfistas que se unieron a la LIV Golf, liga de golf financiada por el Gobierno de Arabia Saudí a la que Jon Rahm se ha incorporado recientemente. La victoria de Rahm en Augusta se dio en medio de la tormenta entre el PGA Tour y el novedoso LIV, y es que el hasta entonces principal circuito de golf sancionó a los «desertores». Ahora, a pesar de que en junio el PGA Tour y el LIV anunciaron un principio de acuerdo para unificar el golf a escala mundial -se dieron hasta el 31 de diciembre para tratar de lograr el acuerdo-, el de Barrika ha sido suspendido por el circuito estadounidense, lo que además supondrá un efecto dominó en el circuito, ya que el PGA Tour ha anunciado que los resultados de Rahm en la temporada 2022-2023, en los que el golfista vizcaino ganó cuatro títulos, no contarán en la lista de puntos para la elegibilidad en los torneos de 2024. Con este nuevo contrato, Jon Rahm pasará a ser uno de los deportistas mejor pagados -se habla de unos 500 millones de dólares- justo un año después de que declarara que «siempre he estado interesado en la historia y el legado del golf y ahora mismo el PGA Tour tiene eso». El de Barrika se ha dejado cautivar por el “sportwashing” del Gobierno de Arabia Saudí y ha dejado en un limbo su imagen de ejemplaridad aunque, como bien razonó el vizcaino, «con cada decisión que tomamos en la vida habrá alguien que esté de acuerdo y le guste, y alguien que no».