Nieve

Mountain Widerness France se lamenta de la huida hacia delante de los responsables del turismo de nieve y montaña. Se cita la orden del alcalde de Chamrousse que envía la policía municipal a multar a practicantes de ski de travesía que suben por los bordes del dominio esquiable, eso en un contexto de muy poca gente sobre el terreno dada la falta de nieve. Se quejan también de que algunas estaciones en Maurienne y Alta Saboya estén empleando helicópteros para transportar nieve a las pistas con objeto de rellenar huecos que permitan el enlace entre ellas, algo a relativizar, dicho sea de paso, pues el uso de energía extra va compensado de sobra por el ahorro debido al paro de gran parte de los remontes mecánicos e infraestructura. El caso es que salas artificiales de nieve como la de Amnéville les Thermes, en el noreste de Francia están haciendo el agosto (hasta 1.300 personas/ día) con los decepcionados fanáticos del ski, que acuden desde cientos de kms de distancia. Hay que atraer clientela y si no hay nieve (y aunque la haya) hay que diversificar, con un concierto de música electrónica en la salida de la telecabina Grands Montets, en Chamonix. Incluso un gran evento en lo alto del teleférico de la Aiguille du Midi, 3.842m, con un DJ estrella con nombre por ahora secreto. Otros llaman a replantearse la viabilidad de ciertas estaciones de media altura. Nevará y todo pasará a segundo plano.