Novak Djokovic: «Es una de las derrotas más duras»

El serbio, número 1 del mundo y favorito al oro, deja la pista entre lágrimas derrotado por Del Potro.

Novak Djokovic abandonó entre lágrimas la pista central del recinto olímpico, con la mirada clavada al suelo y de vacío, resignado a asimilar «una de las derrotas más duras» de su carrera. Solo el oro separa al serbio del Olimpo. Río fue su tercer intento. Una nueva frustración. Una ocasión que se escapa.

La imagen de Djokovic y Juan Martín del Potro en la red, abrazados, será una de las sensaciones de los Juegos. El dominador del tenis mundial en busca de consuelo. «Fue mejor que yo. En los puntos importantes jugó de forma extraordinaria. Hay que felicitarle», asumió el serbio. «Es una decepción para mí. Pero, como amigo y por todo lo que ha pasado por las lesiones, me alegro por él», añadió.

Lo cierto es que Del Potro, que se afana por recuperar el tiempo perdido a causa de una lesión de muñeca, dio un revolcón al torneo de tenis al eliminar al número 1 por 7-6 (4) y 7-6. El argentino, que lleva dos años sufriendo con una muñeca que le ha obligado a pasar por el quirófano y que ya en Londres 2012 privó al serbio del bronce olímpico, terminó escondido en su toalla, también entre lágrimas. Después, en el siguiente partido, ganó al portugués Joao Sousa en tres sets (6-3, 1-6 y 6-3) por lo que no pierde la esperanza de volver a ser el de antaño.

Cómodo para Muguruza

Garbiñe Muguruza tuvo una puesta en escena cómoda para obtener un triunfo contundente en su debut como olímpica e imponerse a la rumana Andrea Mitu, 190 del mundo, por 6-2 y 6-2. La retirada por una lesión en el hombro derecho de la serbia Jelena Jankovic, inicialmente inscrita en la competición, precipitó la presencia de Mitu.

Muguruza se enfrentará en segunda ronda a la japonesa Nao Hibino, que batió a la rumana Begu por 6-4, 3-6 y 6-3

Fin del reinado de las Williams

La pareja checa formada por Lucie Safarova y Barbora Strycova dio la sorpresa al eliminar del torneo de dobles femenino a las actuales campeonas y principales favoritas, las hermanas Serena y Venus Williams, por 6-3 y 6-4. Las checas pusieron fin a la hegemonía de las estadounidenses, que acumulan en esta modalidad tres medallas de oro, dos consecutivas. A las de Londres 2012 y Beijing 2008 añaden la de Sydney 2000.